El autor critica la formación actual de maestros por centrarse demasiado en la pedagogía y poco en los contenidos disciplinares. Argumenta que los maestros deben aprender primero los contenidos antes de enseñarlos. El estudiante comparte que los maestros deben conocer los fundamentos, pero no estar tan enfocados en los detalles y datos. También discrepa con restar importancia a la pedagogía, pues es fundamental saber cómo enseñar a los estudiantes.
1. PRÁCTICA 6. EDUCACIÓN Y SOCIEDAD.
COMENTARIO ARTÍCULO “PRIMERO APRENDE Y SOLO DESPUÉS ENSEÑA”.
1. RESUMEN DEL CONTENIDO DEL ARTÍCULO.
El artículo escrito por Enrique Moradiellos, catedrático de historia contemporánea en la
Universidad de Extremadura, hace una crítica al sistema o la forma actual que tiene la
Educación de formar a sus futuros docentes centrándose en la pedagogía y sus teorías más
pragmáticas y, dejando más a un último plano los contenidos disciplinares que deberían
aprender para luego poder enseñar. Este artículo se escribió después de que viera la luz la
noticia de los resultados de las últimas oposiciones para educadores que fueron según el autor
un tanto nefastas.
2. SEÑALAR LA TESIS PRINCIPAL.
El autor del artículo hace una crítica a la formación actual en las universidades en la carrera de
Magisterio, sea cual sea su especialidad, puesto que afirma que se han dejado de un lado los
fundamentos disciplinares, para centrarse más en los aspectos pedagógicos, es decir, en cómo
enseñar. Para realizar esta crítica se apoya en afirmaciones que expertos en la materia, todos
pedagogos, que al igual que él ven a la formación actual, a la educación como una ciencia, o
mejor dicho, que se está intentando hacer de la educación una ciencia, dejando totalmente
descuidado algo fundamental para ellos que es el contenido en sí de cada materia, todos
señalan que qué se va a enseñar si ni siquiera el que lo enseña lo sabe.
3. VALORACIÓN CRÍTICA: ARGUMENTAR PUNTOS DE CONCORDANCIA/ DISCORDANCIA
CON EL PLANTEMIENTO DEL AUTOR.
Es cierto que a mi parecer los resultados de los exámenes de oposición que salieron a la luz
son un tanto alarmantes, ya que la mayoría de esas preguntas son básicamente sobre aspectos
que para personas que llegan a un nivel de estudios superior debería saber, o en el peor de los
casos aunque no se supiera a ciencia cierta la respuesta que no estuvieran muy
desencaminados de la correcta, con esto me refiero a que, por ejemplo, podría no llegar a
saber con certeza donde nace el río Guadalquivir, pero si saber que desemboca en el Océano
Atlántico. Sin embargo creo que todo lo acontecido ha servido más bien de excusa para
aquellos que no están muy de acuerdo con la formación que se está dando actualmente en
educación y han exagerado, o mejor dicho, extremado hasta el límite.
Comparto con el autor del artículo que hay conocimientos básicos, que se pueden
considerar como conocimientos de cultura general que deberíamos saber en principio
cualquier persona que accede a estudios superiores, puesto que eso significa en teoría que
tenemos un nivel superior de conocimientos y que por eso hemos llegado hasta ahí. Pero, sin
embargo, no estoy en absoluto de acuerdo en que todos los docentes debamos de ser
verdaderas enciclopedias humanas como llega a insinuar en el artículo, él dice que da igual la
especialidad de magisterio, que desde la educación infantil hasta un profesor de 2º de
bachillerato debe tener los mismos conocimientos, pues bien, al igual que él se plantea como
verdadera vergüenza que como vamos a enseñar a nuestros alumnos si no sabemos nosotros,
2. yo le pregunto, ¿Me sirve de algo saber la dinastía completa de los Austrias para enseñar en un
aula de educación infantil? La respuesta es no.
Tampoco estoy de acuerdo en que quite tanta importancia a la enseñanza de la
pedagogía en carrera de magisterio puesto que se puede invertir la preguntar que hace el
autor por la siguiente, ¿Cómo van a aprender nuestros alumnos si no sabemos cómo
enseñarlos? Como estudiante de magisterio que soy lo considero fundamental, el ejemplo de
la opositora que hacía sobre que nadie la evaluaba su capacidad a la hora de enseñar a un niño
ciego y que el autor llevaba a su terreno hacia la demagogia, resume todo lo que yo quiero
decir en este aspecto. Mi opinión es que en las oposiciones, sobre todo en la especialidad de
infantil, deberían centrarse más en aspectos como este, en ver cómo podemos ser capaces de
enseñar ante las adversidades que se nos pongan por delante, que saber si el Ebro nace en
Zaragoza y en Teruel, y creo que en este artículo eso no se ha sopesado ni valorado en ningún
momento.