Gabriela y Lizbeth son asignadas a trabajar juntas en un proyecto escolar a pesar de sus diferencias. Lizbeth es grosera y agresiva con los demás, lanzándole una libreta a Gabriela cuando ésta intenta comunicarse. La maestra envía a Lizbeth con la psicóloga escolar, quien descubre que Lizbeth sufre maltrato doméstico por parte de su padre. Tras recibir terapia familiar, la situación de Lizbeth mejora y ella se vuelve más tolerante y amistosa con