1. Universidad de Guayaquil
Facultad de ciencias químicas
Tema: Las conservas
LCD. Danilo Montero
Grupo:10
Integrantes:
G.Tapia
Joshua torres
Luis Tóala
Alejandro Velásquez
Andrea Zambrano
2. ¿Qué es una conserva?
Se llama conserva al resultado del proceso de
manipulación de los alimentos de tal forma que se evite o
ralentice su deterioro (pérdida de calidad, comestibilidad o
valores nutricionales). Esto suele lograrse evitando el
crecimiento de pasto natural, levaduras, hongos y otros
microorganismos, así como retrasando la oxidación de las
grasas que provocan su enranciamiento. Las conservas
también incluyen procesos que inhiben la decoloración
natural que puede ocurrir durante la preparación de los
alimentos, como la reacción de dorado enzimático que
sucede tras su corte.
Muchos métodos de elaboración de conservas incluyen
diversas técnicas de conservación de los alimentos. Las
conservas de frutas, por ejemplo elaborando mermeladas a
partir de ellas, implican cocción (para reducir su humedad y
matar bacterias, hongos, etcétera), azucarado (para evitar
que vuelvan a crecer) y envasado en un tarro hermético (para
evitar su contaminación).
3. ¿Para qué sirve una conserva?
Puedes usarlos las veces que quieras solo que en cada nuevo uso
debes esterilizarlos y revisar que el empaque de hule no este
deteriorado, de lo que si debes de estar pendiente es que estos
tarros son elaborados con vidrio sódico cálcico así que los productos
que guardes dentro no deben de estar mucho tiempo, creo que
máximo 3 meses, ya que tienden a descomponerse por el pH del
tipo de vidrio.
4. METODOS DE CONSERVACIÓN DE ALIMENTOS
Conservar los alimentos consiste en bloquear la acción de los
agentes (microorganismos o enzimas) que pueden alterar sus
características originarias (aspecto, olor y sabor).
Estos agentes pueden ser ajenos a los alimentos (microorganismos
del entorno como bacterias, mohos y levaduras) o estar en su
interior, como las enzimas naturales presentes en ellos.
Desde hace más de diez mil años existen métodos de conservación
que se han ido perfeccionando:
salazón, curado, ahumado, escabechado, refrigeración y la
aplicación del calor mediante el cocinado de los alimentos.
El gran desarrollo de la industria conservera, la posibilidad de
pasteurizar, liofilizar o ultracongelar ha supuesto un notable avance
en lo que se refiere a la conservación.
Por otra parte los métodos de conservación hoy cumplen doble
función, mantener el alimento en buenas condiciones y aportar
unos sabores muy apreciables.
5. ¿Para qué son importantes?
Son importantes de las conservas mantener o
mejorar los valores nutricionales, la textura y el
sabor, si bien históricamente algunos métodos han
alterado drásticamente el carácter de los alimentos
conservados. En muchos casos estos cambios han
pasado a ser cualidades deseables, como es el caso
de los quesos, yogures y encurtidos
6. ¿Cómo esterilizar nuestras conservas?
Para nuestras conservas esterilizaremos nuestros
botes dos veces. La primera en vacio, de esa forma
ayudamos a la limpieza. No es indispensable, pero
tampoco hace mal. Para esterilizarlos los sumergimos en
agua, con un paño de algodón en el fondo para evitar
que con los golpes del agua hirviendo los rompan contra
el fondo.
7. La segunda esterilización viene al final. Debemos
introducir nuestros ingrediente terminado hasta el
borde del bote y cerrarlo fuertemente. En el caso de la
mermelada, pues con mermelada hasta el final. En el
caso de escabeches, con aceite hasta el final y así con
todo tipo de conservas.
Volvemos a cocer al baño maría los botes, durante
unos 20 minutos aproximadamente. Dejamos enfriar. Así
conseguimos que disminuya por efecto térmico el
contenido y se cree un vacio en el interior.
8. Alimentos en conservas
Son ricas, sabrosas, variadas y pueden sacarnos de
más de un apuro culinario. ¿Invitados sorpresa?
¿Fallos eléctricos? ¿Cena improvisada? Las conservas
son unos aliados perfectos en estos casos. Descubre
que hay algo más que aceitunas o alcaparras entre
las conservas y sácales todo su partido.
Las conservas son el “fondo de despensa” de
cualquier cocina. El que más y el que menos cuenta
con latas de atún, espárragos, aceitunas o
alcachofas que pocas veces aprovechan en sus
comidas. El uso de las conservas como aperitivos o
para matar el hambre hasta el almuerzo es el más
extendido.
9. Origen de las conservas
Las conservas se remontan a la Antigüedad, cuando
se descubrió que la salazón, el ahumado o el hielo
mantenían a los alimentos durante más tiempo.
Pronto también se descubrió que el azúcar
conservaba mejor ciertas frutas y verduras.
Los alimentos se conservaban entonces en cualquier
recipiente y se mantenían con
manteca, almíbar, azúcar u otro ingrediente para
que permanecieran en buen estado. Se
salvaguardaban además del aire, por lo que se
evitaba la oxidación de los alimentos, así como de
cualquier contaminación externa.
10. Ventajas de las conservas
Alimentos al natural, cocinados, cocidos, en escabeche,
en aceite, pescados, legumbres, frutas, verduras... La
variedad en el mercado es amplísima, también los
precios y, por ende, la calidad. Existen desde encurtidos
económicos al alcance de todos hasta auténticas
delicatessen dignas de los más exquisitos gourmets.
Las conservas también nos permiten disfrutar de
alimentos de temporada durante todo el año, ampliando
tus posibilidades de cocinar cualquier receta en
cualquier época.
Pero sobre todo, te permiten disfrutar de platos
exquisitos cuando apenas tienes tiempo de cocinar o
cuando no cuentas con el tiempo suficiente para poder
ir a hacer la compra y te surgen compromisos
improvisados en los que te toca cocinar.
11. Recetas en conservas
El atún en lata es una de las conservas más extendidas.
Existen diversas variedades: al natural, en aceite de
girasol, de oliva, vegetal, en escabeche. Y como tal, hay
numerosas recetas que pueden hacerse con él. Una de ellas
es este plato de patatas rellenas de atún, para las que tan
sólo necesitas patatas, huevos y atún y todos los ingredientes
que quieras añadirle, según la disponibilidad de tu despensa:
pimientos del piquillo, lechuga, cebolleta, etc. El plato
resultante, además de ser muy nutritivo, tiene una
presentación muy original. Es idóneo para que tus invitados
vayan abriendo bocado.
Si en lugar de patatas cuentas con tomates, puedes hacerlos
también rellenos con atún y otros encurtidos que tengas
como pimientos del piquillo o anchoas. Resultan igual de
atractivos que las patatas pero son algo más ligeros y rápidos
de hacer.
Si tus invitados son amantes de los contrastes de
sabores, nada mejor que estos aguacates rellenos de
ahumados.
12. Los pimientos del piquillo también pueden
convertirse en unos grandes aliados para tus cenas
de urgencia. Puedes elaborar unos exquisitos
canapés rellenándolos con los ingredientes que más
te gusten. En este caso, los preparamos con tortilla
de patatas. También pueden servirnos de base para
preparar unas originales minipizzas que elaboramos
además con queso, tomate y anchoas.
Precisamente estas últimas nos sirven para elaborar
unos ricos canapés de anchoas con aceitunas
negras, en los que también echamos mano de los
pepinillos.
13. Si prefieres un bocado más suave y dispones de algo más de
tiempo, puedes optar por estas alcachofas rellenas de
bechamel con jamón. Aunque también puedes decidirte por
unas simples alcachofas acompañadas con mayonesa. Si las
decoras con alguna hierba aromática que tengas en la
despensa, la presentación será más original y sólo tardarás
cinco minutos.
De primer plato, y en tan sólo 15 minutos, puedes elaborar
esta sopa de espárragos blancos con anchoas para la que
sólo necesitas una lata de espárragos blancos, una lata de
anchoas, aceite, vinagre y sal.
Para culminar tu comida sorpresa apuesta por una brocheta
elaborada con frutas en almíbar. Rápido, sencillo y con una
presentación diferente, tus invitados no se podrán resistir a
ellas.
Ten en cuenta que todas estas recetas pueden modificarse
añadiéndoles todos los ingredientes que te gusten o de los
que dispongas. Las conservas son versátiles y flexibles y se
adaptan a tus necesidades culinarias y al menú por el que te
decidas.
14. Conservas: para disfrutar sabor y seguridad todo el año
La elaboración de vinagretas, conservas en aceite, compotas y
mermeladas son algunas de las recetas que suelen ser susceptibles de
conservación. Sin embargo, en todos estos casos, la falta de higiene y las
medidas preventivas pueden poner en jaque la producción.
PUNTOS CRÍTICOS
Algunos detalles a tener en cuente en una primera instancia es controlar
que no haya defectos en los frascos que pueden originar
fugas, contaminación posterior al tratamiento y alteración del producto
una vez envasado.
La operación de llenado debe ser controlada. Por ejemplo, si se retrasa
el embutido de los recipientes, su tratamiento posterior puede reducir la
eficacia de la esterilización. El llenado excesivo, por su parte, puede
originar un tratamiento inferior al necesario, la modificación del tamaño
de los trozos, y la cantidad de ellos también afectarán el proceso.