El documento define el bullying como la intimidación y maltrato repetido entre escolares con la intención de humillar a un menor indefenso. Explica que el bullying implica una víctima débil acosada por uno o más agresores con poder. Las consecuencias incluyen problemas psicológicos para la víctima y posible conducta delictiva futura para el agresor. Recomienda enseñar a resolver conflictos de forma constructiva, fomentar valores como la tolerancia, y buscar ayuda psicológica para víctimas y agresores.