Las prestaciones sociales son beneficios adicionales al salario que el empleador debe pagar a los trabajadores, como prima de servicios, vacaciones, cesantías, intereses de cesantías, subsidio familiar, subsidio de transporte, horas extras, incapacidades y riesgos profesionales. Algunas prestaciones se calculan como un porcentaje del salario y días trabajados, mientras que otras cubren contingencias de salud, pensiones e invalidez.