El aluminio es un metal ligero y versátil con miles de usos industriales y de construcción. Es posible reciclar latas y otros objetos de aluminio para volver a usarlos en varias industrias, lo que reduce la contaminación en un 95% y ahorra recursos como el mineral de hierro y el carbón en un 70%. Reciclar el aluminio genera beneficios económicos y ambientales.