La publicidad engañosa viola varias leyes mexicanas, incluyendo la Ley General de Salud, la Ley de la Propiedad Industrial y la Ley Federal de Radio y Televisión. Estas leyes prohíben la publicidad que proporcione información falsa o exagere las características de un producto, así como la publicidad que sea ofensiva, discriminatoria o que incite a la violencia. Varias agencias gubernamentales mexicanas, como la Secretaría de Salud y la Secretaría de Gobernación, son responsables de aplicar sanciones a la publicidad