Las empresas deben implementar medidas para proteger a los trabajadores de la exposición a radiación ultravioleta de origen solar de acuerdo a la normativa chilena. Esto incluye identificar, evaluar y controlar el riesgo; entregar información e instruir a los trabajadores; y notificar casos de quemaduras solares relacionadas al trabajo. El Servicio Nacional de Salud fiscaliza el cumplimiento de las medidas de prevención.