2.
Después de una rigurosa preparación intelectual,
la ilustre médica italiana se dedicó a observar la
conducta infantil y ensayó varias técnicas para
facilitar el desarrollo de las aptitudes de los niños
con la menor interferencia adulta. El resultado fue
un sistema de pedagogía activo y de fácil empleo
que revolucionó los métodos de enseñanza
practicados hasta entonces.
3.
El día de Reyes o Epifanía de 1907 había pocos
motivos de regocijo para los habitantes de la calle
Dei Marsi, en el barrio pobre de San Lorenzo,
alejado del bullicioso centro de Roma. Los más
afortunados t eran los obreros con trabajo fijo por
más de diez horas diarias que sufrían los peores
rigores de la revolución industrial aún no
humanizada.
4.
Los demás eran desocupados que conseguían
ocasionalmente alguna tarea. Las mujeres tenían
que trabajar para su subsistencia y, al mismo
tiempo, cuidar de sus hogares. La miseria
hostigaba a la población, principalmente a los
niños, que deambulaban por las calles o las
escaleras de los edificios, librados a su suerte, mal
alimentados y sin ninguna educación, a no ser la
que ellos mismos se procuraban en sus juegos,
embadurnando las paredes.
5.
Estas travesuras "pictográficas" decidieron a los
vecinos más preocupados por el aseo y a las
autoridades del Instituto de Bienes Inmuebles-
organización que se ocupaba del problema de la
vivienda en los barrios pobres- a tomar cartas en el
asunto.Así fue como ese día de Reyes se reunió un
grupo de personas en uno de los edificios de
viviendas económicas construidos por el Instituto.
Tomó la palabra una mujer de 37 años, cabellos
oscuros, complexión fuerte y mirada bondadosa. Al
escucharía, los asistentes se miraron desconcertados
por el tono encendido y los proyectos
aparentemente desproporcionados a las
posibilidades que ofrecía el cuartucho en que se
hallaban.
6.
Estas travesuras "pictográficas" decidieron a los
vecinos más preocupados por el aseo y a las
autoridades del Instituto de Bienes Inmuebles-
organización que se ocupaba del problema de la
vivienda en los barrios pobres- a tomar cartas en el
asunto.Así fue como ese día de Reyes se reunió un
grupo de personas en uno de los edificios de
viviendas económicas construidos por el Instituto.
Tomó la palabra una mujer de 37 años, cabellos
oscuros, complexión fuerte y mirada bondadosa. Al
escucharía, los asistentes se miraron desconcertados
por el tono encendido y los proyectos
aparentemente desproporcionados a las
posibilidades que ofrecía el cuartucho en que se
hallaban.