Este documento discute el uso potencial de las redes sociales en la educación, incluyendo su uso para comunicarse con estudiantes y padres, facilitar el aprendizaje colaborativo entre estudiantes, y mantener a los maestros actualizados sobre las nuevas tecnologías. Se recomienda que las escuelas establezcan páginas o grupos en las redes sociales para compartir información sobre las actividades escolares y servir como un espacio común para que los estudiantes trabajen en proyectos y se ayuden mutuamente.