El documento describe el papel del Community Manager como gestor de comunicaciones en la era digital. Explica cómo las relaciones públicas se han adaptado a Internet y los medios sociales, permitiendo una comunicación interactiva con los públicos. También analiza el uso que hacen las ciudades españolas de plataformas como Facebook, Twitter y YouTube para construir su marca, aunque señala que no aprovechan todo el potencial de los medios sociales para interactuar con los ciudadanos.