Factores ecosistemas: interacciones, energia y dinamica
Aspectos para analizar una obra artística.
1. DISEÑO S5
CÓMO ANALIZAR UNA PINTURA
En la medida que el papel de la pintura, como el de toda obra de arte, es muy diverso a lo largo
de la historia, la posibilidad de formular unos principios comunes que permitan el análisis de todos
sus componentes resulta una construcción relativamente convencional. No obstante, es posible
apuntar aspectos que, con distinta importancia según los casos y épocas, pueden ser tenidos en
cuenta para ahondar en su significado.
Aspectos técnicos
El paso previo a analizar cualquier pintura es determinar cómo fue ejecutada, en qué tipo de
soporte y sus medidas, lo que es llamado “ficha técnica” de la obra. Luego está la técnica, puede
determinar la época o alguna tendencia específica por sus propuestas. Por ejemplo, antes del
impresionismo no existían muchos pigmentos de colores por lo que las obras solían ser menos
luminosas.
Aspectos iconográficos
La historia de la representación muchas veces confunde para analizar una pintura, cada obra,
hasta la más abstracta tiene un motivo. La esencia de la pintura no está en la representación de
este motivo concreto (cómo está hecho), que puede repetirse, de modos completamente distintos,
en épocas y artistas diversos (buenos o no), resultando incomprensible si no se vincula a un
determinado contexto cultural (entorno), personal y social. Se debe conocer el artista, el lugar, la
época, la sociedad, y todos los factores que formaron parte de la obra.
Es posible clasificar las obras según sus motivos o aspectos iconográficos, pueden ser:
1. Cuadros de género; de la vida cotidiana, situaciones, anécdotas.
2. El retrato; se debe conocer la biografía del personaje para comprender la obra.
3. Paisaje; copia o extracción de un entorno real.
4. Arquitectura; muestras de espacios físicos como motivo de la obra.
5. Naturalezas muertas o bodegones.
Cuando entró el Realismo en las tendencias artísticas del momento, acabó o disminuyó las obras de
motivos, ya que mostraba realidades de la vida limitando la expresión del artista. En este periodo
los artistas aluden con imaginación hechos visibles, figurativos o abstractos pero siempre dentro de
términos concretos.
2. Aspectos formales
El lenguaje pictórico posee unos determinados códigos, cuya correcta lectura nos permite
comprender los fines expresivos propios de cada obra o artista. Para analizarla hay que tener en
cuenta los siguientes aspectos:
1. La línea; trazo firme y cerrado - descriptivos, abocetado o abierto – imaginativos.
2. El volumen; aunque la pintura es bidimensional, las figuras pueden sugerir corporeidad
(figuras modeladas) gracias al uso de claroscuro.
3. El espacio; en los cuadros tradicionales el espacio está dado por el uso de la perspectiva
que ubica los elementos en puntos determinados, el espacio también puede estar dado por
elementos simbólicos, como el arte medieval o la superposición de planos, como el
cubismo.
4. El color; es el elemento que define la pintura. Pueden entenderse dentro de su clasificación
o por el significado y la intensión dentro de la obra.
5. La luz; puede ser uniforme, dirigida o vinculada a planos de color.
6. La composición; el orden armónico de los elementos del cuadro, pueden ser cerradas (hacia
el centro) o abiertas (hacia los extremos). El uso de los elementos sugiere movimiento o
estabilidad.
Aspectos estéticos, sociales, funcionales y simbólicos
El análisis posterior a haber estudiado los aspectos antes mencionados se refieren a la metodología
de nuestro estudio, en las cuales las conclusiones varían dentro de los siguientes puntos:
1. Toda pintura responde al gusto de una época, de un lugar o de un artista concreto; ello
debe permitirnos adscribirla a una cierta corriente, que responde a unas determinadas
características.
a. Una imagen constituye un objeto cultural, que tuvo, en su tiempo, un determinado papel
personal o social, transformado, en todo o en parte, hasta nuestros días.
b. Aunque la mayor parte de las pinturas son objetos artísticos muebles, fueron concebidas
para cumplir una determinada función en un lugar, conservado o perdido, que va
estrictamente asociado a su significado histórico, o bien forman parte de una determinada
colección.
c. Como todo lenguaje artístico, una pintura encierra muchos más significados que los
meramente derivados de su forma y de su tema; expresa ideas abstractas, que es necesario
desentrañar para apreciar su valor.