Isabel Sarli fue una actriz argentina que se convirtió en un símbolo sexual en la década de 1960 debido a sus papeles en películas eróticas dirigidas por su esposo Armando Bó. Sus primeras películas incluyeron escenas de desnudo audaces para la época que tuvieron gran éxito de taquilla. Tras la muerte de su esposo en 1981, se retiró de actuar y la vida pública, aunque ha vuelto a aparecer esporádicamente en cabaret y películas desde 1996.