Un sistema global de navegación por satélite consta de satélites que transmiten señales para determinar la posición y la altitud de un punto en cualquier parte del mundo las 24 horas. Estos sistemas como el GPS de EE.UU. y GLONASS de Rusia proveen información precisa sobre la posición y hora con aplicaciones militares como mejorar la precisión de armas, y civiles como la navegación. Sin embargo, las señales son vulnerables a la interferencia debido a su baja potencia.