Los principales enfoques para la enseñanza del lenguaje escrito en México han incluido el enfoque tradicional de las décadas de 1960 y 1970, el enfoque psicogenético, y el enfoque comunicativo funcional. El enfoque comunicativo funcional, adoptado a partir de los años 1980, se centra en desarrollar la competencia comunicativa de los estudiantes a través del uso apropiado del lenguaje español en conversaciones y discursos.