El documento describe un proyecto llamado "1 Kilo de Ayuda para educación" que busca recaudar fondos para la educación de niños en situaciones de pobreza a través de la venta de tarjetas solidarias en empresas. El dinero recaudado se destina a 32 colegios en diferentes países que atienden a 19,000 estudiantes. La educación que brindan tiene como objetivo romper el círculo de pobreza a través de mejores resultados académicos y oportunidades para continuar estudios superiores.