Este documento resume la oposición política al régimen de la Restauración en España. Los principales movimientos de oposición fueron los carlistas, que defendían el tradicionalismo y la monarquía divina; los republicanos, divididos entre unitarios y federales, que promovían ideas liberales como el sufragio universal; el movimiento obrero, incluyendo anarquistas y socialistas como Pablo Iglesias; y los nacionalismos periféricos en Cataluña y el País Vasco, liderados por Valentí Almirall y Sabino Arana respectivamente.