El documento trata sobre el arte como un lenguaje que comunica y se interpreta. Explica que estamos inmersos en una realidad que nos interpela constantemente con significados, y que al interpretar la sociedad, sus manifestaciones ideológicas impactan nuestra forma de pensar, sentir y comportarnos. También señala que los signos y símbolos están vinculados por la proyección del uno sobre el otro, y que al expresarnos a través del arte visualizamos la connotación de los signos y cómo han moldeado nuestras decisiones y sociedad a lo larg

1. El arte es un lenguaje que comunica y se interpreta.
Inmersas en la realidad que nos rodea, estamos sumergidas, moviéndonos en un
medio que nos interpela continuamente con sus significados, relacionándonos
consciente o inconscientemente con lo que nos entregan.
Al interpretar la sociedad en que nos movemos, sus manifestaciones ideológicas
son un cúmulo de información que impactan profundamente nuestra forma de
pensar , sentir y movernos. Configuran en el fondo, una imagen del mundo y de la
vida que conduce la forma como nos relacionamos.
Signo y símbolo están vinculados por la proyección inevitable del uno sobre el otro,
porque no existe una forma que carezca de expresión en si misma y no nos
entregue un significado que se pueda interpretar , de forma práctica o emocional.
Manifestar expresivamente a través del arte visualizando la connotación de signos,
de impacto visual, intelectual y emocional y la forma en que hemos marcado la
cimentación de nuestras decisiones y de la sociedad, es un análisis que muestra
como en el transcurso que nuestra existencia, hemos (y nos) interpretado en sus
diversos planos a través de la historia, sus hitos más sustantivos, elaborando signos
que han conducido nuestro sentir, por consecuencia nuestro comportamiento, por
lo que la reflexión apela a interpretar y a interpretarnos. La visualidad de signos,
esta frente a nuestros ojos para ser leídas, lo que nos están diciendo nos representa
como sociedad y habla por todos y todas.
Podemos descifrar signos escondidos detrás de nuevas formas, pero hay un
lenguaje sustancial manifiesto que nos apremia.
Art is a language that communicates and is interpreted.
Immersed in the reality that surrounds us, we are submerged, moving in a medium
that continually challenges us with its meanings, consciously or unconsciously
relating to what it gives us.
When interpreting the society in which we move, its ideological manifestations are
an accumulation of information that profoundly impact our way of thinking, feeling,
and moving. Basically, they configure an image of the world and of life that drives
the way we relate to each other.
Sign and symbol are linked by the inevitable projection of one onto the other,
because there is no form that lacks expression and does not give us a meaning that
can be interpreted, practically or emotionally.
Expressively expressing through art visualizing the connotation of signs, of visual,
intellectual and emotional impact and the way in which we have marked the
foundation of our decisions and of society, is an analysis that shows how in the
course of our existence, we have (and us) interpreted at its various levels throughout
history, its most significant milestones, creating signs that have led our feelings, and
consequently our behavior, for which reason reflection appeals to interpret and to
interpret ourselves. The visuality of signs is in front of our eyes to be read, what they
are telling us represents us as a society and speaks for everyone.
We can decipher hidden signs behind new forms, but there is a manifest substantial
language that compels us.