El documento habla sobre la muerte y la esperanza cristiana. Explica que según el cristianismo, la muerte no es el final sino el inicio de una vida eterna con Dios. Jesús resucitó y a través de su resurrección abrió el camino para que los cristianos también puedan resucitar y vivir para siempre con Dios después de la muerte. La segunda venida de Jesucristo marcará el triunfo definitivo del reino de Dios.