1. HEADHUNTING
¿Qué hay de los brotesverdes?
Incierta rentrée profesional
la de 2010
Un íntimo amigo, médico de profesión, se queja de
que cada vez que cuenta a qué se dedica, la gente
le responde de inmediato con una larga retahíla de
síntomas, padecimientos, dolencias e historial clínico,
para acabar con el consabido “¿qué me pasa, doctor?”.
Todo el mundo tiene “algo”.
A los headhunters nos pasa algo parecido. Cuando
confiesas tu profesión, generas de manera automática
e inapelable un sinfín de espontáneas entrevistas de
trabajo. Claro, todo el mundo tiene un currículum...
Los profesionales nos perciben, generalmente con buen
criterio, como un acertado barómetro de la situación
económica o empresarial del mercado.Y tienen toda la
razón. Estamos presentes, de manera relevante, en la
primera línea de batalla de múltiples sectores, y nuestra
suerte está ligada muy directamente a las tendencias
o fluctuaciones de la economía.
De este modo, las preguntas que últimamente más
escucho son, precisamente: “¿Qué hay de los brotes
verdes famosos?” “¿Salimos ya de verdad?” “¿Voso-
tros veis luz al final del túnel?” Sirvan las siguientes
líneas para compartir mi punto de vista acerca de esta
cuestión, verdadera pregunta del millón del momento.
Vamos por partes. De entrada, quiero advertir que mi
visión acerca de la difícil situación que atravesamos
es moderadamente optimista. Percibimos una cierta
evolución; sí, es cierto que hay mayor movimiento.
Parece existir un nuevo mar de fondo en las orga-
nizaciones. Dicho con todas las reservas, y siempre
en función del sector de actividad del que hablemos,
las empresas empiezan poco a poco a relanzar pro-
yectos, objetivos y procesos previamente paralizados.
Percibimos un tímido renacer de la iniciativa y de la
ambición profesional, ahogada en los últimos meses
por la prudencia y el temor ante lo desconocido. Si
esta situación es flor de un día o tiene visos de man-
tenerse e ir al alza, corresponde a los economistas y
demás analistas financieros presentar los argumentos
a favor o en contra.
De lo que yo puedo hablar es acerca de las personas,
que es a lo que me dedico. ¿Cuál es el pulso de los
profesionales que entrevistamos cada día? Aquí es don-
de radica, a mi parecer, la principal diferencia. Estamos
notando apetito, ganas de hacer cosas. Hay en el aire un
cierto hastío de tanta crisis económica. Las personas
empiezan a cansarse de esa inercia negativista que nos
acompaña desde hace casi dos años.Y las empresas,
como la economía en general, las hacemos y consti-
tuimos las personas. Este es el hecho trascendental, el
auténtico motor de cambio real.
Hasta hace pocos meses, la predisposición al cambio
o el interés por escuchar cualquier oferta era nula. El
factor riesgo a considerar en toda oferta resultaba
demasiado determinante para nuestros candidatos,
dada la situación del mercado de trabajo.
En los últimos dos trimestres sin embargo percibimos
a los profesionales contactados mucho más proacti-
vos y optimistas de lo que eran hace sólo un año. A
la par que otros datos políticos o macroeconómicos,
esta nueva actitud puede incidir positivamente en el
despertar de los mercados. Personalmente valoro este
cambio más que cualquier otro indicador, como una
señal esperanzadora del deseado relanzamiento eco-
nómico.Y es que, de momento, yo, los brotes verdes…
los de la ensalada. 
Capital Humano www.capitalhumano.es08
...en 140caracteres
El 70% de los candidatos realiza algún re-
ciclaje profesional. El progreso tecnológico
y la nueva flexibilidad del mercado laboral
requieren el desarrollo constante de nuevas
competencias y conocimientos.
@MichaelPageInternational
Fernando Galante y Millán
Socio Director
Padula & Partners
www.padulapartners.com