Un potro oscuro llamado Potro-Oscuro llevaba cada noche a los niños y niñas a la Gran Ciudad del Sueño. Una noche, recogió a un niño, una niña, un perro blanco, una gatita negra y una ardilla gris para llevarlos a la ciudad. A pesar de que el niño quería ir más rápido, el Potro-Oscuro iba despacio. Al llegar a la Gran Ciudad del Sueño, todos los pasajeros se habían quedado dormidos.