La historia cuenta que una reina ordenó abandonar a su recién nacida hija en una montaña para que muriera porque no era un varón. La niña fue criada por una osa y se convirtió en una cazadora hábil gracias a la diosa Diana. Atlanta participó en una cacería donde mató a un jabalí a pesar de las burlas de los guerreros. Más tarde, organizó una carrera para casarse con el ganador, pero perdió a propósito para poder casarse con el príncipe Melanion del que estaba enamorada.