El documento define una utopía educativa como una idea irrealizable sobre la educación. Explica que las utopías educativas delimitan las finalidades que guían las prácticas de la escuela y la familia en la construcción de la infancia moderna. Además, señala que existe la idea de que tecnologizar las aulas aumentará la calidad de la educación, pero que la relación entre educación y computación es indirecta.