1. 1. Promueve el valor de cada uno de tus alumnos como personas dignas de respeto.
2. Favorece el desarrollo de las competencias comunicativas. Dedica una tiempo de la
jornada escolar para motivar a tus alumnos a leer.
3. Desarrolla en tus alumnos la habilidad para el cálculo mental con la práctica de ejercicios
constantes que les permitan realizar estimaciones e interpretaciones de datos numéricos.
4. Fortalece la activación física en el ámbito académico mediante la ejercitación breve pero
constante de de acuerdo a la edad de tus alumnos.
5. Impulsa la formación y aplicación adecuada de los valores, de manera explícita y
sistemática que permitan una sana y armónica convivencia
6. Promueve la cultura de la legalidad y el ejercicio de los derechos y deberes para que tus
alumnos interactúen de manera libre, responsable y comprometida en el seno de la
sociedad.
7. Establece estrategias y acciones de promoción y educación para la salud que propicien,
dentro y fuera de la escuela, la elección y consumo de alimentos y bebidas que formen
parte de una cultura de una sana alimentación.
8. Involucra a los padres de familia en el desarrollo académico de sus hijos, haciéndolos
partícipes y corresponsables.
9. Redimensiona el concepto y los procesos de evaluación. Realiza evaluaciones para el
aprendizaje, para que los resultados se conviertan en punto de partida para el diseño de
estrategias que permitan mejorar el rendimiento escolar.
10. Impulsa la participación de los estudiantes en acciones que favorezcan el desarrollo y el
bienestar de la comunidad, a partir de una conciencia cívica, ética y ecológica.