El documento discute las relaciones entre la literatura, la sociedad y el contexto histórico. Explica que las obras literarias no están aisladas y se ven influenciadas por la época y cultura en la que fueron creadas. Al estudiar obras de la Edad Media, los estudiantes pueden aprender sobre otras sociedades y épocas. Además, al analizar las obras desde su propio punto de vista, la literatura les servirá para aplicar sus perspectivas a obras de otras eras y considerar cómo se relacionan con su propia sociedad

1. Introducción
El 28 de noviembre, después de haber iniciado en la asignatura de Lengua castellana y
Literatura el estudio de los contenidos literarios, se plantearon en el grupo de 3º ESO A
las relaciones entre la literatura, la sociedad, el contexto histórico y las circunstancias
personales de los lectores y se planteó a los alumnos lo que íbamos a hacer a lo largo del
curso. Las conclusiones a las que llegaron los alumnos fueron redactadas por Lucía
Lema Figueroa:
Las obras literarias no son objetos aislados: nacen en una época histórica, en un
contexto, y no están separadas de la sociedad. Pueden pertenecer a culturas diferentes a
la nuestra y en ellas influyen las circunstancias en las que vivió su autor.
Debemos tener en cuenta todo esto al leerlas, sobre todo las primeras que vamos a
estudiar este curso, que pertenecen a la Edad Media. Las obras literarias nos sirven para
aprender sobre otras sociedades, otras épocas y personas alejadas de nosotros en el
tiempo.
Pero al analizar las obras desde nuestro punto de vista, la literatura también nos va a
servir para nuestra vida. Vamos a aplicar nuestro punto de vista a las obras de otras
épocas y opinar sobre lo que nos parece bien o mal de lo que se cuenta en ellas.
También veremos la relación con nuestra sociedad y pensaremos cómo actuaríamos
nosotros en casos parecidos, pero de hoy en día.