En esta lección nos proponemos ver cómo se conecta la descendencia de David, el gran Rey de Israel, con Jesús de Nazaret, nacido en Belén de Judea, designado como Mesías, Redentor, Emmanuel, Hijo de Dios, Señor y Salvador del género humano. Nos proponemos examinar cómo esa conexión nos vincula al pueblo de Dios, heredero de las promesas dadas a Abraham.

1. Lección
2
Conexiones
familiares
Salmo
89.35-­‐37;
Isaías
9.6-­‐7;
Mateo
1.18-­‐21
Texto
áureo
«Dará
a
luz
un
hijo,
y
le
pondrás
por
nombre
Jesús,
porque
él
salvará
a
su
pueblo
de
sus
pecados.
Todo
esto
aconteció́
para
que
se
cumpliera
lo
que
dijo
el
Señor
por
medio
del
profeta».
—Mateo
1.21-­‐22

2. Propósito
• En
esta
lección
nos
proponemos
ver
cómo
se
conecta
la
descendencia
de
David,
el
gran
Rey
de
Israel,
con
Jesús
de
Nazaret,
nacido
en
Belén
de
Judea,
designado
como
Mesías,
Redentor,
Emmanuel,
Hijo
de
Dios,
Señor
y
Salvador
del
género
humano.
Nos
proponemos
examinar
cómo
esa
conexión
nos
vincula
al
pueblo
de
Dios,
heredero
de
las
promesas
dadas
a
Abraham.

3. Bosquejo
de
la
lección
I.
Dios
jura
por
sí
mismo
que
la
descendencia
de
David
será́
para
siempre
(Salmo
89.35-­‐37).
II. Promesa
de
un
Mesías
(Isaías
9.6-­‐7).
A. Un
niño
nos
es
nacido,
Hijo
de
Dios
y
Príncipe
(v.
6a).
B. Títulos
de
este
hijo
(v.
6b).
C. Su
reinado
(v.
7).
III. El
cumplimiento
de
la
profecía
(Mateo
1.18-­‐22).
A. María
concibe
del
Espíritu
Santo
(v.
18).
B. Dilema
de
José́
(v.
19).
C. Dios
se
revela
a
José́
(v.
20).
D. Misión
del
Mesías
(v.
21).

4. Vocabulario
bíblico
«COMPROMETIDA»:
Entre
las
formalidades
prematrimoniales
de
los
hebreos,
cuando
una
mujer
casadera
era
solicitada
en
matrimonio,
se
celebraba
una
reunión
entre
los
jefes
de
las
dos
familias
para
llegar
a
un
acuerdo
que
incluía
la
dote
que
el
novio
presentaba
para
su
futura
esposa.
Completado
este
trámite
la
desposada
quedaba
legalmente
comprome`da
e
impedida
de
tratos
con
otros
varones
y
sujeta
a
su
prome`do.
«INFAMARLA»:
Denunciar
públicamente
a
una
mujer
por
violar
el
pacto
conyugal
teniendo
relaciones
ín`mas
con
un
varón
que
no
es
su
prome`do.

5. Salmo
89.35-­‐37
RVR
VP
35
Una
vez
he
jurado
por
mi
san`dad
y
no
men`ré́
a
David.
36
Su
descendencia
será́
para
siempre
y
su
trono
como
el
sol
delante
de
mí.
37
Como
la
luna
será́
firme
para
siempre
y
como
un
tes`go
fiel
en
el
cielo».
35
Una
vez
le
he
jurado
por
mi
san`dad,
y
no
le
men`ré́:
36
sus
descendientes
reinarán
en
su
lugar,
siempre,
mientras
el
sol
exista.
37
¡Siempre
firmes,
como
la
luna!
¡Siempre
firmes,
mientras
el
cielo
exista!».

6. Isaías
9.6
RVR
VP
6
Porque
un
niño
nos
ha
nacido,
hijo
nos
ha
sido
dado,
y
el
principado
sobre
su
hombro.
Se
llamará
su
nombre
«Admirable
consejero»,
«Dios
fuerte»,
«Padre
eterno»,
«Príncipe
de
paz».
6
Porque
nos
ha
nacido
un
niño,
Dios
nos
ha
dado
un
hijo,
al
cual
se
le
ha
concedido
el
poder
de
gobernar.
Y
le
darán
estos
nombres:
Admirable
en
sus
planes,
Dios
invencible,
Padre
eterno,
Príncipe
de
la
paz.

7. Isaías
9.7
RVR
VP
7
Lo
dilatado
de
su
imperio
y
la
paz
no
tendrán
límite
sobre
el
trono
de
David
y
sobre
su
reino,
disponiéndolo
y
confirmándolo
en
juicio
y
en
jus`cia
desde
ahora
y
para
siempre.
El
celo
de
Jehová́
de
los
ejércitos
hará́
esto.
7
Se
sentará
en
el
trono
de
David;
extenderá́
su
poder
real
a
todas
partes
y
la
paz
no
se
acabará;
su
reinado
quedará
bien
establecido,
y
sus
bases
serán
la
jus`cia
y
el
derecho
desde
ahora
y
para
siempre.
Esto
lo
hará́
el
ardiente
amor
del
Señor
todopoderoso.

8. Mateo
1.18
RVR
VP
18
El
nacimiento
de
Jesucristo
fue
así:
Estando
comprome`da
María,
su
madre,
con
José́,
antes
que
vivieran
juntos
se
halló
que
había
concebido
del
Espíritu
Santo.
18
El
origen
de
Jesucristo
fue
éste:
María,
su
madre,
estaba
comprome`da
para
casarse
con
José́;
pero
antes
que
vivieran
juntos,
se
encontró́
encinta
por
el
poder
del
Espíritu
Santo.

9. Mateo
1.19
RVR
VP
19
José́,
su
marido,
como
era
justo
y
no
quería
infamarla,
quiso
dejarla
secretamente.
19
José́,
su
marido,
que
era
un
hombre
justo
y
no
quería
denunciar
públicamente
a
María,
decidió́
separarse
de
ella
en
secreto.

10. Mateo
1.20
RVR
VP
20
Pensando
él
en
esto,
un
ángel
del
Señor
se
le
apareció́
en
sueños
y
le
dijo:
«José́,
hijo
de
David,
no
temas
recibir
a
María
tu
mujer,
porque
lo
que
en
ella
es
engendrado,
del
Espíritu
Santo
es.
20
Ya
había
pensado
hacerlo
así,
cuando
un
ángel
del
Señor
se
le
apareció́
en
sueños
y
le
dijo:
«José́,
descendiente
de
David,
no
tengas
miedo
de
tomar
a
María
por
esposa,
porque
su
hijo
lo
ha
concebido
por
el
poder
del
Espíritu
Santo.

11. Mateo
1.21
RVR
VP
21
Dará
a
luz
un
hijo,
y
le
pondrás
por
nombre
Jesús,
porque
él
salvará
a
su
pueblo
de
sus
pecados.
21
María
tendrá́
un
hijo,
y
le
pondrás
por
nombre
Jesús.
Se
llamará
así
porque
salvará
a
su
pueblo
de
sus
pecados».

12. Resumen
-­‐
1
• El
reinado
de
Saúl
sobre
las
tribus
de
Israel
fue
un
desastre
por
su
personalidad
ambivalente,
bipolar
y
obs`nada.
El
reinado
de
David,
en
cambio,
a
pesar
de
sus
pecados
personales
y
errores
en
el
manejo
de
las
relaciones
con
sus
hijos,
fue
un
reinado
exitoso,
memorable,
de
muchos
sacrificios,
sufrimientos
y
penurias,
pero
de
contundentes
logros.
David
logró
unificar
el
reino
y
centralizar
el
culto
a
Jehová
en
Jerusalén,
llevando
el
Arca
del
Pacto
a
la
ciudad
de
Sión.
Dios
le
prome`ó
a
David
afirmar
su
reino
y
que
de
sus
descendientes
nacería
el
Mesías,
Salvador
de
Israel.
En
ese
Mesías,
en
ese
Jesús
Salvador
se
cumpliría
la
promesa
dada
a
Abraham:
«Serás
bendición
para
todas
las
familias
de
la
`erra».

13. Resumen
-­‐
2
• El
nacimiento
de
Jesucristo
en
Belén
de
Judea
en
`empos
del
Rey
Herodes,
en
circunstancias
extrañas
y
especiales,
afirma
que
Dios
está
en
control,
que
Él
`ene
un
plan
de
salvación
para
hacer
accesible
el
poder
de
su
amor
y
su
misericordia
a
todo
ser
humano,
empezando
por
el
pueblo
hebreo
y
alcanzando
a
todas
las
familias
de
la
`erra.

14. Oración
• Señor
y
Dios
nuestro,
saber
que
nuestra
vida
presente
está
conectada,
por
lazos
de
sangre
y
vínculos
de
fe
a
las
vidas
y
a
los
sueños
de
nuestros
antepasados
le
da
significado,
valor
e
importancia
a
nuestro
quehacer
humano.
Tú
man`enes
un
hilo
conductor
de
energía,
vitalidad
y
fuerza,
entre
nuestros
ancestros,
nosotros
y
los
que
nos
sucederán,
que
nos
permite
vivir
con
esperanza
significa`vamente
frente
a
todas
las
fuerzas
y
agentes
del
mal,
a
fin
de
ser
más
que
vencedores,
por
medio
de
Jesús
que
nos
amó
dándose
en
la
cruz
por
nuestra
redención.
En
su
nombre
oramos.
Amén.