1. LAS DROGAS EN LOS JÓVENES.
El consumo de drogas constituye en la actualidad un importante fenómeno
social que afecta especialmente a los adolescentes, La prevalencia del uso y
abuso de drogas en la etapa adolescente y adultez temprana son altas, Ante
la alta disponibilidad, en la actualidad los adolescentes tienen que aprender a
convivir con las drogas, tomando decisiones sobre su consumo o la abstinencia
de las mismas.
2. Los adolescentes pueden estar comprometidos en varias formas con
el alcohol y las drogas legales o ilegales. Es común el experimentar
con el alcohol y las drogas durante las adolescencia.
Desgraciadamente, con frecuencia los adolescentes no ven la relación
entre sus acciones en el presente y las consecuencias del mañana.
3. SEÑALES PRINCIPALES DEL USO DE ALCOHOL
Y DEL ABUSO DE DROGAS POR LOS
ADOLESCENTES PUEDEN INCLUIR:
Físicas: fatiga, problemas al dormir, quejas continuas acerca de su salud,
ojos enrojecidos y sin brillo y una tos persistente.
Emocionales: cambios en la personalidad, cambios rápidos de humor,
irritabilidad, comportamiento irresponsable, poco amor propio o
autoestima, carencia de juicio, depresión, retraimiento y una falta
general de interés.
De Familia: el comenzar argumentos, desobedecer las reglas, el
retraerse o dejar de comunicarse con la familia.
En la Escuela: interés decreciente, actitud negativa, calificaciones bajas,
ausencias frecuentes, faltas al deber y problemas de disciplina.
Problemas Sociales: amigos o pares envueltos con drogas y alcohol,
problemas con la ley y el cambio dramático en el vestir y apariencia.
4. ¿PORQUÉ LOS JÓVENES CONSUMEN
DROGAS?
La respuesta es simple: placer. Ya sea con sustancias legales
como el alcohol y el tabaco o con ilegales como los inhalables,
la cocaína, la heroína o la marihuana, los usuarios buscan las
sensaciones de bienestar inducidas por el consumo.
Todas las drogas que producen adicción tienen la característica
en común de liberar dopamina, un neurotransmisor que, al
estimular el sistema nervioso central, provoca alegría,
desinhibición y, en algunos casos, falta de cansancio y una
mayor facilidad para concentrarse.