Los acrílicos tienen ventajas y limitaciones, y es tarea del
pintor decidir si puede aprovechar unas a pesar de las
otras. Como medio, no tienen nada que ver con los óleos;
la sustancia y cuerpo de los colores son más semejantes a
los de la acuarela, gouache y temple. Los acrílicos tienen
una luminosidad y una delicadeza que invita a diluirlos,
bien con agua, bien con un medio acrílico.
Elige tu pintura acrílica.
Existen docenas de marcas de
acrílicos y están disponibles ya
sea en tubos o frascos.
Comprar acrílicos es una de las
pocas ocasiones en la que es
mejor derrochar y conseguir
una marca más cara. Las
marcas baratas de acrílicos no
tienen un pigmento tan espeso
como las marcas más caras, y
por lo tanto requerirán 2 a 3
capas de pintura adicionales
para obtener el mismo brillo
SELECCIONA UNOS CUANTOS PINCELES
Los pinceles son diversos
la forma de la punta del
pincel y el material de las
cerdas. Hay tres tipos
diferentes de puntas de
pincel: plana, redonda y
lengua de gato, pero los
más comunes son
sintéticos y pelo de jabalí.
DECIDE SOBRE QUÉ PINTAR
Los acrílicos son espesos
y pesados, y por lo tanto
solo se pueden usar en
pocas superficies. Las
superficies acrílicas más
comunes y populares son
los lienzos estirados o
encuadrados, el papel
acuarela o la madera
tratada.
MATERIALES ADECUADOS
Como pintor principiante,
es posible que tengas una
idea de lo que quieres
pintar o que estés
buscando algo de
dirección. Piensa en
temas o modelos posibles
que puedas usar para tu
primera pintura. Es más
fácil trabajar a partir de
un objeto tridimensional
o una fotografía