Según la leyenda tehuelche, en un principio sólo existían el caos y el dios Kóoch. Él creó los mares al llorar de soledad y el viento al suspirar, disipando la niebla. Luego formó el sol, las nubes y la vida en una isla. Un gigante raptó a una nube y engendró un hijo poderoso, por lo que mató a la madre nube. Un tuco-tuco salvó al bebé y los animales lo llevaron a la tierra de Patagonia creada por Kóoch
2. Según los tehuelches, en un principio todo era caos existencial. El mundo no poseía ningún elemento, sólo tinieblas y Kóoch, el dios solitario.
3. Entristecido por la soledad, el dios comenzó a llorar, y así formó los mares. Pero, al darse cuenta de que estaba inundando todo, dejó de llorar, y con un suspiro hondo, nació el primer viento Así la niebla se disipó y apareció la luz.
4. Otros cuentan que Kóoch, sumido en tinieblas y envuelto en las aguas, deseaba poder ver le mundo que lo rodeaba. Para esto, extendió su mano a lo alto, y provocó una herida en la oscuridad. Al girar su mano, una chispa origino el sol: Xáleshen.
5. El sol luego formó las nubes, y éstas empujadas por el viento, resonaban con enormes truenos. Luego, hizo surgir una isla, la dotó de vida, y se alejó, perdiéndose en el horizonte
6. Todo era paz en la isla, hasta que los gigantes, hijos de Tons, la Oscuridad, vinieran al mundo. Nóshtex , uno de ellos, raptó a la nube Teo y la encerró en su caverna. Sus hermanas, furiosas, provocaron una tormenta al no encontrarla. Xáleshen, se abrió paso entre las nubes, y enterado de lo sucedido, le contó a Kóoch. El creador le prometió el castigo del raptor de Teo. Aseguró que si esperaba un hijo de Nóshtex, este sería más poderosos que su padre.
7. A la mañana siguiente, el dios sol comunicó la profecía a las nubes, y éstas, se la contaron a Xóchem, el dios viento. Éste sopló la noticia por toda la isla y las puertas de las cavernas de antes, que llegó a los oídos de Nóshtex. El gigante, asustado, golpeó a Teo mientras dormía, arrancó de sus entrañas al hijo, y despedazó a la madre.
8. Un tuco-tuco llamado Terr-Werr, escuchó las palabras del viento, y salvó al bebé antes de ser devorado por su padre. El roedor pidió ayuda a los animales y el chorlo sugirió llevar a l niño a la tierra que Kóoch había creado antes de su partida.
9. Todos los animales los acompañaron, pero el zorro fue interceptado por Nóshtex, quien le obligó a confesar.
10. El gigante se dirigía hacia la isla, pero el pecho-colorado lo distrajo con su canto.
11. Sólo pudo ver a lo lejos, al cisne, que había levantado vuelo con el niño, dirigiéndose a la tierra salvadora de la PATAGONIA.