2. A continuación, vamos a dar a conocer al Apóstol
Pedro, su historia y mostrar las características más
importantes que tuvo como líder.
3. Simón Pedro (Betsaida, . ? - Roma, 67), conocido también como san
Pedro, Cefas, o simplemente Pedro, fue, de acuerdo con múltiples
pasajes neotestamentarios, uno de los discípulos más destacados
de Jesús de Nazaret. Su nombre de nacimiento era Shimón bar Ioná y
era pescador de oficio en el mar de Galilea.
Por su seguimiento de Jesús de Nazaret, se constituyó en el apóstol
más conocido y citado del Nuevo Testamento en general y de los
cuatro Evangelios canónicos y los Hechos de los Apóstoles en
particular, que lo presentan bajo muy variados aspectos.
4. Dejó su casa para unirse a los discípulos de Jesús en los primeros
momentos de su predicación. San Pedro carecía de estudios, pero
pronto se distinguió entre los discípulos por su fuerte
personalidad y su cercanía al maestro, erigiéndose
frecuentemente en portavoz del grupo.
Cabe resaltar que se menciona a Pedro como la masculinización
del griego ‘petra’, es decir ‘roca’, cambiando apenas su
terminación pero manteniendo la raíz de la palabra.
Por otra parte, Pablo de Tarso siempre le llamó Cefas. Esta
palabra hebrea helenizada del arameo ‘kefas’ que significa ‘roca’,
no era un nombre propio, pero Pablo se lo asigna como tal.
5. Todos los evangelios mencionan el nombre de Simón; Jesús se
dirige a él siempre así, salvo con una excepción (Lucas 22:34):
«Pero él dijo: “Te digo, Pedro: No cantará hoy el gallo antes que
hayas negado tres veces que me conoces”».
Aun cuando la noche de la última cena, Pedro juró no apartarse
de Jesús, al ser interrogado por los soldados romanos que lo
habían detenido, negó tres veces conocerlo antes del canto del
gallo, es decir, antes de que la noche acabase, cumpliéndose así la
profecía del Mesías.
El día de Pentecostés, siempre según la Biblia, se le concedió una
aparición especial de Jesús que sirvió para convencerle
definitivamente y para que se vinculara a la predicación de la
nueva doctrina y la organización de naciente sociedad cristiana.
6. Simón podría decirse que fue el confesor de Jesús, su discípulo más
allegado, y esto, se nota en los evangelios. Existen muchos pasajes
donde vemos a Simón muy cerca de Jesús, por ejemplo:
* Fue uno de los tres discípulos íntimos que, según la Biblia, fueron
testigos de la transfiguración de Jesús (Marcos 9:1).
* Según el relato bíblico fue el primero en reconocer a Jesús como el
Mesías esperado. Y él les preguntaba: «Y vosotros, ¿quién decís que soy
yo?» Pedro le contestó: «Tú eres el Cristo.»(Marcos 8:29).
Tras la muerte de Jesús, la figura de Pedro es menos precisa.
7. Jesús elige a Pedro y le cambia su nombre: “...desde
ahora tú eres Piedra y sobre esta roca voy a edificar mi
Iglesia”. (Mt 16,18)
El don de liderazgo no es un asunto de un tipo de
cierta personalidad. Pedro fue un líder en virtud de su
fuerza personal (Hechos 4:8-12)
Pedro tenía las cualidades de un gran líder. Jamás
podía ser como el líder modelo, el hombre perfecto,
como su Maestro, pero era el mejor de todos para la
misión que iba a cumplir.
8. Pedro era un apasionado. Solo uno con esa cualidad podía encabezar
una obra que, dirigida por el Espíritu Santo, ha permanecido más de
dos mil años.
Cuando está decidido a hacer algo, lo acomete. No teme confesar lo
que cree.
A pesar de sus grandes defectos, tenía cosas como su humildad, su
arrepentimiento cuando fallaba, su reconocimiento de que “Dios ha
constituido en Señor y Mesías a quien Uds. crucificaron”(Hechos
2,36). Por eso llora cuando se da cuenta que negó tres veces a
Jesús. Por eso está dispuesto a morir junto a Jesús, por la misma razón.
9. Cuando Pedro llegó a Roma, los cristianos la identificaban
como la otra "Babilonia la grande"; era la capital de los
nuevos opresores idólatras, metrópoli grande, lujosa y
pecadora con un gran poder político, militar y económico.
No menos corrompido era su emperador Nerón César (54-
68), nombrado por San Juan en el libro de las revelaciones
como la Bestia, el 666.
En el año 64 el maniático monarca mandó a incendiar la
ciudad, metiéndole la culpa a los cristianos, que eran
considerados como una secta judía, hostiles a la sociedad
pagana, y acusados de rendirle tributo a Jesucristo en vez
que al emperador y a sus ídolos.
En esta misma persecución fue hecho prisionero el apóstol
Pedro y luego Junto a Pablo, murió martirizado.
10. Al final de este estudio de reconstrucción del perfil
histórico y espiritual de Pedro se puede concluir que
Pedro ocupa un lugar de primer plano, reconocido y
atestiguado por toda la tradición neotestamentaria.
Pedro es el discípulo histórico de Jesús, el testigo
autorizado de su resurrección y el que garantiza la
autenticidad de la tradición cristiana.