1. Introducción
Colombia, un país que alrededor de la historia ha sido azotado por la
incomprensible e inútil violencia que deja profundas y duraderas
consecuencias a este maltratado país, a un país lleno de resentimiento y
dolor, una guerra inducida indirectamente por la corrupción, una corrupción
que ha significado más que guerra y desolación, también atraso y sumisión.
El panorama histórico de la violencia en Colombia es desolador y deja
mucho que desear, comenzando en la conquista y colonia, hasta el estado
crítico en que hoy nos encontramos, dejando atrás el arcabuz, los cañones,
y las culebrinas, porque como todo en el mundo la violencia evoluciona,
ahora contrataca con tráficos de estupefacientes, extorciones, secuestros,
violencia juvenil, racismo, segregación, y lo indignante es que los
colombianos nos hemos adaptado a este brusco contexto. Detrás de este
pasado y presente oscurecido por la guerra está el peor mal de todos, la
perdición de la humanidad, la corrupción.
2. 1“La corrupción es causa directa de la pobreza de los pueblos y suele ser la
razón principal de sus desgracias sociales.”, tal como lo decía Jorge
Gonzales Moore, una frase que resume toda la desgracia de nuestro país.
Desde que Colon, por coincidencia descubrió América, la corrupción es
visible, la hostilidad por el control de los recursos estatales ha sido uno de
los factores determinantes de la violencia en Colombia. Durante el siglo XIX,
ejércitos conformados por clientelas de latifundistas, se enfrentaron entre sí,
o con fuerza gubernamentales. En el siglo XX, la expresión violenta de la
política liberal y conservadora se ejerció por medio de cuadrillas, que
actuaron en forma independiente, controlando territorialmente zonas en las
cuales se eliminó al opositor por medio del terror y la barbarie. Para ello, se
recurrió a las masacres de poblaciones enteras, los asesinatos selectivos y
la crueldad de las ejecuciones.
A mediados del siglo, la violencia se revienta con las guerrillas liberales que,
por efecto de la guerra fría pasan hacer grupos armados, ya no para la
autodefensa, sino para tratar de alcanzar el poder en el marco del
comunismo. El último cuarto del siglo XX estará marcado, por los efectos
del narcotráfico en todas las esferas de la vida nacional.
El conflicto de degrada, surge el sicariato, el magnicidio o el asesinato
político y, más tarde, el paramilitarismo. Tanto en las guerras del siglo XIX,
como en la violencia bipartista del siglo XX, algunos líderes promovieron el
fanatismo con discursos sectarios, racistas, intolerantes, armaron al pueblo
y le facilitaron la impunidad.
1 González Moore, Jorge. Frases y pensamientos(blog).Disponibleen: www.frasesypensamientos.com
3. 2
“El poder tiende a corromper, el poder absoluto corrompe absolutamente”
Lord Acton. Para alcanzar y mantener el poder los políticos se han
relacionado con grupos armados ilegales y han permitido que los
narcotraficantes influyen en sus decisiones mediante el pago de sobornos.
Una de las consecuencias de esta corrupción administrativa es la muerte
violenta de muchos dirigentes políticos que amenazan con arrebatarles el
poder a aquellos que lo han mantenido por años, que han violentado los
derechos humanos, robándoles los recursos que por derecho les
corresponde, llevándose con ellos la oportunidad de tener una mejor calidad
de vida y trayendo consigo violencia y desolación.
2 Acton, Lord. Proverbia (blog).Disponibleen: www.proverbia.net
4. Conclusión
Todos los periodos de violencia en nuestro país, tienen un factor en común,
la corrupción. Una corrupción que desde el principio de nuestra historia ha
retrasado el desarrollo de nuestro país y generado, como ya lo dije, pobreza
y violencia.
La ambición de algunos dirigentes políticos no parece tener límites. Esta
avidez por el poder, ha cobrado la vida de muchos opositores que se han
atrevido a revelar la verdad a los ciudadanos, han tenido el coraje para decir
la verdad, para defender sus ideales y los derechos de los colombianos,
entre estos se encuentran: Jorge Eliecer Gaitán, Luis Carlos Galán, Jaime
Garzón, entre muchos otros que amenazaron con reformar la realidad de
nuestro país, con implementar realmente la democracia, ejercer la justica y
eliminar la burocracia administrativa, entre muchas otras.
Lo indignante de esta situación es que, nosotros mismos estamos
otorgándole el poder a estos desarmados, que consumen poco a poco a
nuestras comunidades
Los ciudadanos tenemos que saber elegir, para que el país mejore, en
nuestras manos se encuentra la solución para la corrupción, ergo, para la
violencia.
5. Institución Educativa Manuel Edmundo Mendoza
Violencia en Colombia desde el punto de vista de la corrupción
(Los flautistas de Hamelin de la política)
María Victoria Ponce
Sociales
Lic. Luis Vecino
El Carmen de Bolívar, 13 de octubre del 2015