La autoestima es fundamental para vivir con confianza y lograr los objetivos. Creer en uno mismo permite soñar libremente y trabajar hacia esos sueños. Una baja autoestima genera inseguridad, dudas y culpas, dificultando el progreso personal y las relaciones sociales. Desarrollar una sana autoestima es clave para el éxito en distintos ámbitos de la vida.
1. La importancia de la autoestima
Cuando crees en ti, no necesitas vivir a la sombra
de otros. Tu luz ya es importante.
Como indica la reflexión anterior, la autoestima sirve para
aportar luz a nuestra vida, para soñar libremente y
caminar con paso firme y decidido hacia esos sueños. La
autoestima es la base de la autoconfianza y motivación,
por tanto, es necesaria para creer en nosotros mismos y en
nuestras posibilidades de afrontar con éxito los retos que
plantea la vida.
Es la parte más importante del desarrollo y crecimiento
personal. No solo repercute en todos los ámbitos,
influyendo en las elecciones o decisiones que se toman,
sino que además aporta el equilibrio necesario para
mantener unas óptimas relaciones sociales.
Una forma efectiva de comprobar la importancia de la autoestima, es ver los efectos devastadores que produce cuando es
deficiente:
- Fomenta la inseguridad, las dudas, las culpas y los miedos.
- Alimenta la inestabilidad emocional.
- Provoca la insatisfacción personal.
- Genera pensamientos negativos que perjudican cualquier proyecto o iniciativa.
- Puede desembocar en conflictos y trastornos psicológicos.
Otro dato negativo y curioso es el de las atribuciones en las personas con baja autoestima: actúan en su propia contra pensando
que cuando algo les sale mal son ellos los culpables, y en cambio cuando algo les sale bien lo atribuyen a la suerte o a la
intervención de los demás. Con esta forma de pensar deterioran aún más su autoestima, generando negatividad en forma de carga
pesada que les impide desarrollarse y progresar con normalidad. Así, en la fase académica le suele abocar al fracaso escolar o les
impide acometer estudios superiores. En las relaciones sociales se sienten inferiores o diferentes a los demás, perjudicando su
integración en cualquier grupo y generando también problemas en las relaciones de pareja. Y en el aspecto profesional provoca
conflictividad, desaprovechando las buenas oportunidades que puedan surgir, debido a los miedos y falta de confianza.
La confianza en nosotros mismos influye directamente sobre las actitudes, el comportamiento y el desarrollo de las capacidades.
Aspectos muy importantes para situarnos en el lado correcto de esa fina línea que separa el éxito del fracaso. Y no solo afecta a
las propias capacidades, sino también a la forma de utilizar los recursos disponibles para afrontar con éxito los retos que puedan
surgir.
Habitualmente no somos conscientes del nivel de autoestima y solo apreciamos los resultados o las consecuencias: el miedo, las
falsas expectativas, las dudas e indecisiones… Pero de ese nivel depende la efectividad para acceder a las necesidades básicas
(alimentación, reproducción, autoprotección). Así, las relaciones interpersonales, el aprendizaje, la actividad profesional y en
general cualquier ámbito o aspecto de la vida, se ven afectados directamente por la valoración que hacemos de nosotros mismos.
Valoración imprescindible para elegir y decidir lo más conveniente.
Por último decir que la importancia y ventajas o beneficios de contar con una buena autoestima son más una cuestión de calidad
que de cantidad, es decir, con una sana autoestima se suelen hacer más cosas, pero sobre todo mejores.
Fernando Barba
www.exitopleno.com
¿Y tú, qué tal andas de autoestima?
¿Sabes que puedes mejorarla y así mejorar tu calidad de vida?