El documento describe cómo varias figuras y eventos del Antiguo Testamento prefiguran a Jesucristo, incluyendo la escalera de Jacob que representa a Jesús como el único camino al cielo, las similitudes entre la vida de José y Jesús, y cómo Moisés liberó a Israel de Egipto al igual que Jesús liberará a la humanidad del pecado.
1. Imágenes de Cristo en el Antiguo
Testamento:
La escalera al cielo, José y Moisés
LECCIÓN # 7 – SERIE: SEGUROS EN CRISTO
2. Los “bocetos” del plan de Dios
“pintados” en el “lienzo” del
Antiguo Testamento
LECCIÓN # 7 – SERIE: SEGUROS EN CRISTO
3. Jacob vio una escalera que
llegaba al cielo. Gn.28:10-13
Alusión: Jesucristo es el
camino al cielo, y el único
mediador entre Dios y el
hombre
LECCIÓN # 7 – SERIE: SEGUROS EN CRISTO
4. Jacob vio una escalera que llegaba
al cielo – esa escalera (camino) es
Jesucristo.
LECCIÓN # 7 – SERIE: SEGUROS EN CRISTO
A través de su sacrificio Él hizo el puente
sobre el pecado que nos separaba
5. La vida de José tuvo muchas
similitudes con la vida de
Jesucristo
LECCIÓN # 7 – SERIE: SEGUROS EN CRISTO
1. José era amado por su
padre
6. La vida de José tuvo muchas
similitudes con la vida de
Jesucristo
LECCIÓN # 7 – SERIE: SEGUROS EN CRISTO
2. José fue rechazado por sus
hermanos
7. La vida de José tuvo muchas
similitudes con la vida de
Jesucristo
LECCIÓN # 7 – SERIE: SEGUROS EN CRISTO
3. Los hermanos de
José lo vendieron
como esclavo en
Egipto
8. La vida de José tuvo muchas
similitudes con la vida de
Jesucristo
LECCIÓN # 7 – SERIE: SEGUROS EN CRISTO
4. Dios elevó a
José a un lugar de
gloria y autoridad.
9. La vida de José tuvo muchas
similitudes con la vida de
Jesucristo
LECCIÓN # 7 – SERIE: SEGUROS EN CRISTO
5. José fue rechazado por su
propio pueblo, pero fue
aceptado por los egipcios.
10. La vida de José tuvo muchas
similitudes con la vida de
Jesucristo
LECCIÓN # 7 – SERIE: SEGUROS EN CRISTO
6. Dios capacitó a José para
proveer de grano a la gente.
11. Luego de que José
y su generación
muriera, un nuevo
gobernante
egipcio oprimió a
los israelitas.
LECCIÓN # 7 – SERIE: SEGUROS EN CRISTO
12. La vida de Moisés tuvo muchas
similitudes con la vida de Jesucristo
LECCIÓN # 7 – SERIE: SEGUROS EN CRISTO
1. Dios protegió a Moisés cuando era
bebé.
13. La vida de Moisés tuvo muchas
similitudes con la vida de Jesucristo
LECCIÓN # 7 – SERIE: SEGUROS EN CRISTO
2. Moisés fue rechazado por
su propio pueblo.
14. La vida de Moisés tuvo muchas
similitudes con la vida de Jesucristo
LECCIÓN # 7 – SERIE: SEGUROS EN CRISTO
3. Moisés fue
enviado por Dios
para sacar a Israel
de la esclavitud.
15. El “YO SOY” del Antiguo Testamento
es el mismo “YO SOY” del Nuevo
Testamento.
LECCIÓN # 7 – SERIE: SEGUROS EN CRISTO
16. Dios abrió un camino de escape
para Israel.
Él también ha abierto un camino
de escape para los creyentes en
Jesucristo.
LECCIÓN # 7 – SERIE: SEGUROS EN CRISTO
17. La Biblia es el mensaje de Dios para
nosotros.
¡Vamos a agradecerle por
su fidelidad al cumplir sus
promesas en Jesucristo!
LECCIÓN # 7 – SERIE: SEGUROS EN CRISTO
Notas del editor
Objetivos de esta lección:
Demostrar que Jesucristo ha cumplido las Escrituras escritas sobre Él.
Demostrar que Jesús es el único camino a Dios.
Presentar algunos aspectos de la vida de José y Moisés que prefiguraban la vida de Jesucristo.
Demostrar que Jesucristo es el “YO SOY”.
Esta lección ayudará a los estudiantes a:
Tener un mayor aprecio por la Palabra de Dios.
Sentir una mayor seguridad de su salvación en Cristo.
Amar al Señor Jesús de una manera más profunda.
Lee: 1 Pedro 1:10-12
¡Los profetas recibieron un conocimiento previo de nuestra salvación por parte de nada menos que Cristo mismo! Fue como si Él hubiera hecho un boceto del plan por todo el “lienzo” del Antiguo Testamento: un fondo panorámico aquí, un elemento mayor allá, y muchísimos detalles minúsculos. Todos ellos serían pintados más adelante en colores vivos por medio de su propia vida en la tierra.
La unidad de la Biblia y la precisión de estas figuras de Cristo en el Antiguo Testamento son algunas de las grandes pruebas de la veracidad de la Palabra de Dios. Ningún otro libro puede ofrecer la absoluta precisión histórica y el cumplimiento total de cada profecía, todo de acuerdo a la perfecta agenda de Dios.
Vamos a ver tres ejemplos de figuras o “tipos” de Jesucristo en el Antiguo Testamento en los cuales Dios estaba “esbozando” su plan y revelándolo a la humanidad. El mismo Jesús hizo eco de estos pasajes mientras hizo su ministerio en la tierra.
Isaac fue el hijo de Abraham, dado en cumplimiento de la promesa de Dios.
Isaac tuvo dos hijos gemelos, Jacob y Esaú. Esaú no valoró las promesas de Dios, pero Jacob sí. Los dos hermanos tuvieron problemas y Jacob tuvo que huir. Jacob se detuvo en el camino para descansar en la noche y tuvo un sueño. Los ángeles subían y bajaban por la escalera, la cual se extendía desde la tierra hasta el cielo.
¿Cuál era el significado del sueño?
Dios dio el sueño para mostrar que Él enviaría al Libertador, el cual sería descendiente de Jacob.
Este Libertador sería como la escalera, comunicando la tierra con el cielo.
Por medio del Libertador, los que creyeran serían restaurados a la unidad con Dios.
El pecado separa al hombre de Dios. Es como un gran abismo entre Dios y los hombres.
Al morir por el pecado, el Señor Jesús tendió un puente sobre el gran abismo entre Dios y nosotros.
En los primeros días del ministerio de Jesús en la tierra, Él habló de esta escalera, y afirmó que representaba su vida.
Lea Juan 1:51.
Jesús es el mediador, el puente, la escalera entre el hombre pecador y Dios. Por medio de la sangre de Jesús y su muerte, nuestro pecado ha sido quitado de nosotros.
Ya no estamos separados de Dios. Dios le repitió a Jacob las promesas que le había dado a su abuelo, Abraham.
Lea Génesis 28:13-15.
Después de un tiempo, Dios le permitió a Jacob regresar a la tierra de Canaán. Dios lo bendijo con doce hijos. De los hijos de Jacob procedió la gran nación de Israel.
Israel fue el nuevo nombre que Dios le dio a Jacob.
Dios estaba cumpliendo sus promesas: De enviar a un Libertador por medio de la línea de Abraham. Y darle bendiciones terrenales a sus descendientes.
Génesis 37:3 nos dice que Jacob amaba a José más que a sus otros hijos, porque lo había tenido en su vejez. Era el “toñeco”, consentido, y mimado.
El Señor Jesús era amado por su Padre.
Cuando Jesús fue bautizado, Dios habló desde el cielo.
Lea Mateo 3:17.
Dios el Padre amó a Dios el Hijo aun antes de que viniera a este mundo para ser nuestro Salvador.
Considere: Nosotros hemos llegado a ser los hijos de Dios. ¿Cuánto nos ama Él? Tanto como ama a su Hijo, Jesucristo. Y nos lo comprobó al enviarlo a morir en nuestro lugar. Lea Juan 3:16.
Lea Génesis 37:4-5. Hasta el punto de aborrecerlo, tanto como para ni querer hablar con él.
Jesús fue a su propio pueblo judío, pero ellos lo rechazaron.
Los líderes judíos estaban celosos de Jesús y buscaban matarlo.
Los hermanos de José estaban tan celosos de él que pensaban matarlo. Pero, más bien [en cambio] decidieron venderlo como esclavo.
Lea Génesis 37:27-28.
José fue llevado a Egipto.
Allí, la esposa de su amo mintió acerca de él, y José fue encarcelado.
· Pero Dios no se olvidó de él.
· Dios tenía un plan para la vida de José.
Jesús fue vendido por uno de sus discípulos.
Judas Iscariote vendió a Jesús a sus enemigos por 30 piezas de plata, el precio de un esclavo.
Él le dio la habilidad a José de interpretar los sueños de Faraón, el rey de Egipto. Por tanto, Faraón puso a José en autoridad sobre todo Egipto.
Lea Génesis 41:38-43.
Dios le dio a José, un israelita, gran sabiduría para regir en la ajena e impía tierra de Egipto.
Dios elevó al Señor Jesús a un lugar de gran gloria y autoridad.
El sufrimiento de Jesús fue aun mayor que el de José. Nuestro Señor fue clavado a una cruz, la ejecución más cruel que se haya inventado.
Sus enemigos pensaron que Él estaba acabado, pero, por el contrario, Él estaba sufriendo en la cruz para terminar la gran obra de nuestra salvación.
Jesús murió injustamente por nuestros pecados; el justo murió por los injustos. ¡Dios lo levantó de los muertos y le dio toda autoridad en el cielo y en la tierra!
Lea Mateo 28:18.
Aunque los mismos hermanos de José lo odiaban y lo rechazaron, los egipcios lo aceptaron como su gobernante y el que los salvó de la sequía.
Jesús fue rechazado por Israel, pero ha sido recibido por los gentiles.
Al igual que José, Jesús fue rechazado por su propio pueblo. Sin embargo, Jesús llegó a ser el Salvador para gente de todas partes del mundo.
Lea Juan 10:14-16.
El pueblo de Israel era el rebaño de Dios, su pueblo escogido.
· Pero Jesús no sólo vino por ellos sino por toda la humanidad.
· Nosotros también llegamos a ser parte de su pueblo, el pueblo que ha puesto su fe en Él.
· Muchas personas judías, también, han puesto su fe en su Mesías, Jesucristo.
Lea Génesis 41:55-57.
Por medio de José, Dios sostuvo a las personas durante siete años de hambruna.
Dios nos dio vida eterna por medio de Jesucristo.
Jesús nos ayuda no sólo con las necesidades de esta vida, sino que nos ha suplido con todo lo que necesitamos por toda la eternidad.
Lea Juan 6:27-29, 33-35.
Todos los hijos de Jacob finalmente fueron a Egipto para escapar de la hambruna. Pero luego de unos 400 años, y muchos cambios en el gobierno de Egipto, un faraón malvado llegó al poder y oprimió a los israelitas.
Lea Éxodo 1:6-14.
Este faraón esclavizó a los israelitas. Y trató de destruir a todos los niños varones de Israel. Pero de nuevo, Dios levantó a un libertador para su pueblo.
Dios vio la terrible condición de los israelitas. Él recordó sus promesas a Abraham, Isaac y Jacob. Dios escogió a Moisés para liberar a los israelitas.
Lea Éxodo 2:1-10.
Dios protegió a Jesús cuando era bebé.
Satanás guió al rey Herodes para que tratara de matar a Jesús cuando era bebé.. Pero Dios intervino.
Lea Mateo 2:13-14.
Dios es todopoderoso. Él es más grande que Satanás y que cualquiera de las artimañas de éste.
Aunque Moisés fue escogido por Dios para librar a Israel, los israelitas rechazaron los primeros esfuerzos de Moisés por ayudarlos.
Lea Éxodo 2:11-15.
En realidad, este fue el primer intento de Moisés para ayudar a su gente, pero fracasó porque no fue hecho en la forma ni en el tiempo de Dios.
Jesús también fue rechazado por su propia gente.
Jesucristo vino en la manera y el tiempo de Dios e hizo muchas clases de milagros entre el pueblo.
· Pero aún así los líderes judíos lo rechazaron.
· Rehusaron creer que él era el Libertador enviado por Dios.
Jesús resucitó a Lázaro, haciéndolo salir de su tumba, luego de que hubiera estado muerto por cuatro días.
¡Aun después de este gran milagro, los líderes judíos se negaban a creer!
Lea Juan 11:47-48, 53.
A pesar de que Jesús había mostrado claramente que Él era Dios, los líderes se confabularon para matarlo.
Moisés pasó 40 años como pastor de ovejas en el desierto de Madián.
Luego Dios le habló desde de una zarza ardiente y le dijo que regresara a Egipto.
Lea Éxodo 3:9-10.
Jesucristo fue designado por Dios para redimir a la humanidad de la esclavitud del pecado y de Satanás.
La nación de Israel rechazó al Señor Jesús.
Pero Dios lo designó para ser el único Salvador del mundo entero.
Nosotros mismos hemos aceptado al Señor Jesucristo como el único Salvador.
Aunque fue rechazado por su propio pueblo, para nosotros es precioso.
Cuando Dios le habló a Moisés desde la zarza ardiente, Moisés le hizo una pregunta.
Lea Éxodo 3:13.
¡Mire la respuesta de Dios!
Lea Éxodo 3:14.
Sólo Dios tiene este nombre, porque significa que Él existe por sí mismo, no tiene comienzo ni fin, ni depende de nadie.
Cuando el Señor Jesús estuvo en esta tierra, fíjese en lo que dijo de sí mismo:
Lea Juan 8:58.
Esto originó una fuerte reacción negativa por parte de los líderes, porque ellos no lo reconocían como Dios.
Pero nosotros los que creemos podemos decir:
· “Sí, Señor, tú eres el gran YO SOY, porque tú eres Dios”.
· “Tú eres todo lo que necesito”.
Dios el Padre, Dios el Hijo y Dios el Espíritu Santo son el grande y eterno YO SOY.
Cuando Faraón se rehusó a liberar a los israelitas, Dios envió terribles plagas sobre el pueblo egipcio. Los egipcios adoraban a Faraón y a otros dioses falsos.
Aunque vieron las grandes hazañas que Dios hizo, se negaron a poner su confianza en su Creador. Pero ninguna de estas plagas tocó a los israelitas porque Dios los protegió. Dios les estaba demostrando a Egipto, a Israel y al mundo entero que Él es soberano que y libra a aquéllos que ponen su confianza en Él.
Dios estaba en contra de los egipcios y los castigó por su incredulidad y rebeldía.
Así como estaba en contra de los egipcios, también está en contra del mundo incrédulo.
Dios castigará a todos los incrédulos.
Pero nosotros, los que hemos puesto nuestra fe en Jesucristo, somos preservados de la ira de Dios, así como los israelitas.
No es que seamos mejores que los incrédulos o que por ir a la iglesia y portarnos bien eso nos guarda de la ira de Dios. Es la gracia de Dios que nos ha sido dada mediante la fe en Jesucristo. Ahora somos los hijos de Dios, y Él ha hecho una distinción entre nosotros los que creemos y aquéllos que se rehúsan a creer en Él.
Es posible que los que hemos puesto nuestra fe en Jesucristo experimentemos muchos sufrimientos en este mundo, pero nunca tendremos que experimentar la ira de Dios contra los incrédulos.
La Biblia es el mensaje de Dios para nosotros, lleno de retratos del Señor Jesucristo.
¡Cómo nos anima a leer todos estos tesoros!
Dios quiere que lo conozcamos, y quiere que les hablemos a otros acerca de Él. Él nos ha proporcionado una riqueza de verdades: para creerlas, para depender de ellas,
y para compartirlas con otros.
Démosle gracias a Él por su Palabra y su gran fidelidad al cumplir todas sus promesas en Jesucristo.