5. Sus primeras obras del período romano, como Teseo y
el Minotauro, manifiestan ya la maestría técnica y la
perfección en el acabado que le eran habituales. De
hecho, todas sus obras fueron fruto de una larga
elaboración, de una ejecución realizada con un detallismo
casi artesanal.
No fue Canova un escultor nato y de cincel fácil, sino
que se forjó a través del estudio y el trabajo; mediante la
práctica diaria del dibujo, por ejemplo, perfeccionó su
plasmación del desnudo y superó las deficiencias de sus
primeros estudios anatómicos. En su estudio romano
desplegó una enorme actividad para poder atender todos
los encargos que recibía de las más destacadas
personalidades del momento, desde Napoleón hasta
Catalina la Grande de Rusia. Era ya por entonces el
principal escultor del estilo neoclásico, condición con la
que se ha perpetuado su figura en la historia del arte.
15. La escultura es el arte por excelencia del Neolasicismo, basándose en la
dialéctica entre materia y forma, tendiéndose al predominio de la forma frente a la
materia. El Arte Griego que mejor recoge esto es la escultura. Además, la escultura
define un ideal antropocéntrico, por lo que es doblemente clásica.
El Neoclasicismo desprecia el virtuosismo y aprecia más el esfuerzo, la habilidad
técnica. La base de la escultura es el dibujo, diseño, como idealización. Así, frente
a la improvisación y virtuosismo en la ejecución Barroco, durante la época
Neoclásica se valora mucho más el proyecto y la concepción de la obra,
dejándose relegada la etapa técnica final. De hecho, se percibe en la organización
del trabajo una separación de las diferentes fases donde interviene todo el taller en el
proceso. Esto puede entenderse como una perdida de libertad creativa por parte del
artista, pero refleja el esfuerzo por llevar a cabo el proyecto artístico.
Los máximos exponentes de la escultura neoclásica son el italiano Canova y del
danés Thorvaldsen.
Las claves podrían resumirse en:
- Figuras en calma. Expresión serena y fría. Dignidad y elegancia.
- Cuerpos esbeltos con aspecto y pose de estatuas grecorromanas.
- Temas heroicos.
- Composición ordenada y clara. Contornos limpios y bien definidos.
- Encuadres en fondos de arquitectura clásica.
18. TIPOLOGÍA:
Es una escultura de bulto redondo, de cuerpo
entero, donde la protagonista (Paulina Bonaparte)
tiene una posición yacente.
19. TEMA:
Canova retrata a la hermana del emperador Napoleón
Bonaparte a los 25 años de edad. La retrata desnuda, en
pose seductora, como si fuera una Venus victoriosa. La
manzana que porta en su mano izquierda alude a su
triunfo en el juicio de Paris. Cuenta el mito griego de Elide,
enfadada por no haber sido invitada a las bodas de Peleo,
que sembró la discordia entre los asistentes cuando arrojó
una manzana de oro y dijo que era para la más bella de las
presentes. Afrodita (Venus), Atenea y Hera disputaron por
la manzana y Zeus, para zanjar la cuestión, decidió que
Paris eligiera a la más hermosa de ellas. Paris entregó la
manzana a Venus, que le había ofrecido el amor de la
mujer más bella del mundo si ella era elegida.
20. DESCRIPCIÓN:Paolina Borghese como Venus vencedora. “Paulina Bonaparte”. Canova retrata a la
hermana del emperador Napoleón Bonaparte a los 25 años de edad. La retrata
desnuda, en pose seductora, como si fuera una Venus victoriosa. La expresión es
hermética; no nos permite conocer el estado psicológico de la retratada. Ese hermetismo,
la idealización y el desnudo aportan atemporalidad a la escultura, que no parece el
retrato real de alguien en un momento concreto de su vida.
Es un bulto redondo, de cuerpo entero, donde la protagonista (Paulina Bonaparte)
tiene una posición yacente. Ésta se encuentra desnuda, cubierta levemente por una
sábana y sentada en una chaise longue o triclinio. Con esta posición, se intenta
identificarla con una diosa. El elemento utilizado para su realización es el mármol
(pulido). Tiene una textura bidimensional. Presenta una composición equilibrada y una
estructura triangular en la figura femenina. Es una escultura abierta. Se aprecian
formas onduladas y redondas dándole volumen a la figura. Se juega con la
luminosidad, enfocando a Paulina Bonaparte. En cuanto al color no existe policromía. La
obra pertenece al Neoclasicismo, puesto que se busca la belleza y la perfección, el estilo
es sencillo e intenta imitar a los romanos. Durante el matrimonio con el Príncipe Camillo
Borghese Paulina posó para esta escultura.
La retratada tenía 25 años cuando el escultor empezó su trabajo en un único bloque
de mármol de Carrara. Paulina aparece indolente, tumbada en un diván, extendiendo la
pierna derecha sobre la que reposa la izquierda. En su mano izquierda sujeta una
manzana aludiendo a su triunfo en el juicio de Paris. El brazo derecho sostiene su
atractiva cabeza dirigiendo su altiva mirada hacia el espectador.
21.
22.
23. FUNCIÓN:
Canova quiso expresar mas que nada la sensualidad de la
mujer y la misma naturaleza femenina, represento temas
mitológicos, ya que se asemeja mucho a la Venus victoriosa en
donde sostiene en sus manos una manzana, así también como
símbolo de belleza. El hecho de que este en un diván en una
posición serena y relajada y actitud distante, no nos permite
conocer el estado emocional de la retratada. Canova tomó muy en
cuenta la simetría y la composición, esta escultura es un claro
ejemplo de la escultura neoclásica, por que en ella refleja
expresiones serenas y un toque de elegancia, de distinción,
encontramos también pureza en la imagen. El cuidado y
minuciosidad con que se trabajan en el mármol los detalles
caracteriza a este escultor.
24. SIMBOLISMO:
Canova fue el escultor más celebre de su tiempo. Su fama atrajo la
curiosidad de Napoleón, que quedó extasiado cuando contempló Eros
y Psique. Así que decidió contratarle, pues su estilo encajaba
perfectamente en el programa propagandístico de la corte
napoleónica. Napoleón intentaba legitimar su poder presentándose
como un dios o un héroe de la Antigüedad. Así, Canova realizó
varios retratos monumentales de Napoleón y de su familia. Enlaza de
este modo con el retrato en la antigua Roma, una de cuyas tipologías
era aquella en que los emperadores y miembros de su familia aparecen
identificándose con dioses o héroes, adoptando algunos de los
atributos de éstos. La familia imperial francesa retomará esta tipología
clásica cuya función era la propaganda imperial. Este retrato de Paulina
Bonaparte, con los símbolos característicos de la diosa Venus, así
como otros realizados por el artista para el emperador, encaja
perfectamente dentro de este programa.
25. VALORACIÓN:
La escultura de Antonio Canova ejerció una autoridad ilimitada
sobre toda una generación de artistas. Su fama atrajo la curiosidad
de Napoleón (o más bien la de sus publicistas), y este escultor de
los papas se convirtió en representante artístico del Imperio. El
distante rigor clasicista de su estatuaria fue un exponente bien
acomodado en la parafernalia neorromana de la corte napoleónica.
Realizó retratos del propio emperador, la emperatriz María Luisa y
de la hermana de Napoleón Paulina Borghese (esta vez con la
figuración propia de una Venus triunfante) y de otros miembros de
la corte francesa. La escultura napoleónica, como la arquitectura,
se nutrió de artistas maduros fuertemente enraizados en el
clasicismo, aunque Canova representó su versión más severa. El
italiano fue objeto de culto entre los nuevos artistas galos. Con
todo, aunque no fue en Francia donde Canova encontró los ecos
más sonoros, sí pudo escuchar allí los más sugestivos.