1. Según la situación comunicativa Según el canal utilizado
LAS VARIANTES DIAFÁSICAS
Registros Depende de
Formal COLOQUIAL
Personalidad de
emisor y receptor
Relación entre
emisor y receptor
Ámbito donde se
produce el proceso
comunicativo
Asunto del que se
trata
Intencionalidad
Oral Escrita
Hay interacción
lingüística
No hay interacción
lingüística
Signos no verbales: gestos,
sonidos, tonos, ritmos…
Signos no verbales:
puntuación, tipografía…
Espontaneidad:
estructura abierta
Planificación:
estructuras cerradas
Sintaxis poco elaborada y
gramaticalidad relajada
Sintaxis muy elaborada
y respeto por la norma
Aparición de variantes
diatópicas, diastráticas…
Tendencia a la
lengua estándar
Comunicación inmediata y
casi siempre efímera
Comunicación diferida y
normalmente duradera
Relevancia del contexto:
presencia de deícticos
Irrelevancia del contexto
extralingüístico
Importante presencia de
repeticiones, digresiones y
elipsis
Delimitación precisa de la
informaciónUso frecuente de muletillas y
frases hechas
Respeto por las normas
gramaticales
Elocución fluida, expresiva y
cuidada
Construcciones sintácticas
complejas y bien conectadas
Riqueza y precisión léxica
2. EL REGISTRO COLOQUIAL
RASGOS FONÉTICO-FONOLÓGICOS RASGOS MORFOSINTÁCTICOS RASGOS LÉXICO-SEMÁNTICOS
Pronunciación
descuidada
[tasi / reló]
Expresividad:
acompañamiento de gestos,
sonidos, tonos, ritmos…
Abundancia de
interrogaciones retóricas y
exclamaciones
(¿Eres tonto? / ¡Bruto!)
Monoptongaciones
(alcol)
Abundancia de elipsis,
presuposiciones y frases
inacabadas
Empleo de diminutivos y
aumentativos con valor
expresivo
(vejete / tranquilón)
Falta de precisión léxica:
palabras comodín
(cosa / hacer / eso)
Uso de léxico jergal
(chorizo / jeta) y
expresiones coloquiales
Uso de “muletillas”
(¿no? / claro / ¿vale?)
Ordenación subjetiva de
la oración
(El pan, a mí me gusta
mucho)
Uso de apócopes
(bici / profe / depre)
Rupturas de la
construcción sintáctica:
anacolutos
(Yo, a mí me parece…)
Oraciones cortas con
pobreza de nexos:
yuxtaposición
(Es tarde, yo me voy, ¿me
acompañas?)
Repeticiones para
transmitir intensidad
(Esto está rico, rico)
Empleo de los pronombres
“tú” y “uno” en lugar de “yo”
(Uno ya no sabe qué hacer)
Uso del léxico valorativo
(de muerte / molar)
Uso de frases hechas y
lexicalizadas (como los
refranes), expresiones
idiomáticas y metafóricas
(Por todo el morro / Está
hecho un toro)
Abundancia de
interjecciones
(¡Hala! / ¡Vaya!)
Expresiones afectuosas e
insultos ficticios
(Gordi / mamoncete)
Escasez de adjetivos y
adverbios
Vocabulario limitado con
poco uso de sinónimos
Uso habitual de vocativos
informales
(tía / illo)
Afirmaciones y negaciones
rotundas
(Por supuestísimo que sí /
De ninguna de las maneras)
Uso de elementos
intensificadores
(Que te digo que te calles)
Hipocorísticos (Pepe /
Loli / Toni)