1. PRIMERA IGLESIA BAUTISTA DE BARQUISIMETO, 09-03-13
ELABORADO POR: REV.JUAN ANTONIO GUÉDEZ CORTI, PASTOR
LA IGLESIA FRENTE A LA ADVERSIDAD
GÉNESIS 50:14-21
INTRODUCCIÓN: Los sufrimientos o adversidades no son ajenos a los cristianos. Podemos sufrir
como consecuencia de nuestros errores, por capricho de Satanás, por las acciones malévolas de
otros, o por el sufrimiento de alguien allegado. La vida de José, hijo de Jacob o Israel, nos sirve de
ejemplo clásico del sufrimiento que puede tener un justo debido a las acciones de otros.
José era el hijo preferido de su padre, y esta condición generó la envidia y la rivalidad con sus
hermanos mayores. Cuando tuvieron la oportunidad sus hermanos quisieron matarlo y lo metieron
en una cisterna y lo abandonaron para que muriera. Pero fue vendido como esclavo a unos
mercaderes que lo llevaron en esa condición a Egipto. Ahora, en un país extraño, con cultura y
lengua diferente, esclavo contra su voluntad; fue acusado de intento de violación de la mujer de
Potifar y metido en la cárcel. Seguramente estaba decepcionado de la familia, maltratado por la
vida, acusado injustamente, triste, solo, lejos de sus padres. Con razón y justicia seguramente se
preguntó: ¿Por qué me sucede esto a mi si no he hecho nada malo? Al ver la actitud de José al
hablar de esos problemas con sus hermanos, (Gn.50:20 “), confirmamos que Dios puede
transformar cualquier situación adversa en la vida de un cristiano y usarla para bien propio y de
otras personas.
PROPOSICIÓN: En esta oportunidad, viendo la vida de José, veremos cómo perseverar cuando
sufrimos a consecuencia de los actos de otros y donde encontrar fuerza para seguir adelante.
I.- ¿CÓMO PERSEVERAR CUANDO ESTAMOS SUFRIENDO LA
ADVERSIDAD?
1. CONFÍE EN DIOS.
a. Tenga la seguridad que Dios lo ve y conoce su padecimiento y se interesa por
usted.
- José nunca lo dudó.
- Cinco veces en la vida de José, cada vez después de una crisis, se encuentra
la frase: “Jehová estaba con José.” (Gn.39:2, 3, 21,23)
- Aun cuando todo le fuera mal a José, Dios estaba con él.
- ILUSTRACIÓN: A pesar de la noche, la distancia o la tormenta Jesús nos
ve. Mr.6:47-48 “y al venir la noche, la barca estaba en medio del mar, y él
solo en tierra. 48Y viéndoles remar con gran fatiga, porque el viento les era
contrario, cerca de la cuarta vigilia de la noche vino a ellos andando sobre el
mar,…”
b. Reconozca que todos tenemos libre albedrío dado por Dios.
- Dios no impone su voluntad sobre nosotros. Él nos deja decidir si la
hacemos o no. En esto Él es permisivo.
- A veces, cuando vemos una tragedia, tratamos de aparentar que somos
muy espirituales diciendo: “Debe ser la voluntad de Dios” ¡Cómo si Dios
disfrutara los errores y las tristezas delos hombres!.
- La voluntad de Dios NO siempre se cumple. Él nos ha dicho lo que
quiere, pero nosotros decidimos si lo hacemos. Si nos negamos a hacerlo, Él
se limita y nos permite experimentar las consecuencias de nuestros propios
errores.
2. - Como las otras personas también tienen libre albedrío, las
consecuencias de sus errores las podemos padecer nosotros. La acción de
los hermanos de José contra él fue pecado y Dios lo permitió porque Él no
creó títeres.
c. Reconozca que Dios tiene el control absoluto del desenlace final.
- Dios toma aun lo más terrible en tu vida y puede cambiarlo por completo.
Considera la vida de José, de esclavo y presidiario a gobernante.
- Si nosotros se lo permitimos Dios transformará nuestras desgracias en
bendición. La única manera en que Dios podía sacar algo bueno era con la
perseverancia de José, aun cuando no lo entendiera.
2. ENFRENTE LA ADVERSIDAD. 1ª Pd.4:19 “De modo que los que padecen
según la voluntad de Dios, encomienden sus almas al fiel Creador, y hagan el bien.”
a. Es posible que experimentemos problemas que no hemos causado.
b. No se entregue a la auto compasión. No hay evidencia que José se auto
compadeciera.
- Encare la situación como lo haría un barco velero en una tormenta. Dirija
la quilla a la dirección del viento.
- Nunca tome decisiones importantes si está deprimido. No puede evaluar
las cosas con claridad y acierto.
c. No se entregue a la amargura.
- No se puede vivir con la pesada carga de la amargura.
- José lo sabía y por eso perdonó a sus hermanos.
- ¿Qué debe hacer si le tienta la amargura?
Entréguesela a Dios.
Mantenga su fe y esperanza en Dios. Crea que Dios obrará para bien.
Persevere en mantener saludable su vida espiritual.
- Dios puede transformar por completo su adversidad. Recuerde la crucifixión
de Jesús se transformé en resurrección. Aunque otros quieran destruirle,
Dios usará esas dificultades para edificarlo.
II.- ¿DE DONDE PODEMOS TOMAR FORTALEZA PARA CONTINUAR EL
CAMINO?
1. CONFÍE EN EL PLAN DE DIOS. Rom.8:28 “Y sabemos que a los que aman a
Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito
son llamados.”
a. A pesar de la maldad que hay en el mundo, que la voluntad de Dios no siempre
se cumple; pero para aquellos que aman a Dios, Él hace que todo se transforme
para bien.
b. Dios es mayor que cualquier problema al que usted se enfrente.
Lc.1:37 “porque nada hay imposible para Dios.”
Rm.8:31-32 “31¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién
contra nosotros? 32El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó
por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas?”
c. Es difícil ver el actuar de Dios cuando estamos sumergidos en una situación
difícil. Pero al estar ya fuera de ella nuestra perspectiva mejora y podemos ver
lo que Dios estaba haciendo y como la usó para beneficio de nuestra vida.
d. La condición para este actuar de Dios es si se lo permitimos.
3. 2. APRÓPIESE DE LAS PROMESAS DE DIOS.
a. Las promesas de Dios son como cheques en blanco que debemos usarlos.
b. Las promesas de Dios nos dan esperanza, fortaleza y consuelo. La Biblia dice
que la Palabra fue escrita para darnos ánimo y esperanza.
Rm.15:4 “Porque las cosas que se escribieron antes, para nuestra enseñanza se
escribieron, a fin de que por la paciencia y la consolación de las Escrituras,
tengamos esperanza.”
c. Necesitamos leer las promesas, memorizarlas y apropiarnos de ellas.
2ª Pd.1:3-4 “Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han
sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó
por su gloria y excelencia, 4por medio de las cuales nos ha dado preciosas y
grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la
naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de
la concupiscencia;”
2ª Cor.7:1 “Así que, amados, puesto que tenemos tales promesas, limpiémonos de
toda contaminación de carne y de espíritu, perfeccionando la santidad en el temor de
Dios.”
3. APÓYESE EN EL PUEBLO DE DIOS.
a. Cada Iglesia debe ser una comunidad de creyentes compasivos que se aman, se
apoyan, que oran unos por otros, que se ríen juntos, lloran juntos y llevan su
carga juntos.
- Rm.12:10,15 “Amaos los unos a los otros con amor fraternal; en cuanto a
honra, prefiriéndoos los unos a los otros. …15Gozaos con los que se gozan;
llorad con los que lloran.”
b. Nos necesitamos los unos a los otros. En múltiples oportunidades la Biblia usa
la frase “los unos a los otros” para indicar la necesidad de relación y
dependencia en la Iglesia del Señor donde podamos darnos apoyo firme para
animarnos y ayudarnos..
c. Necesitamos formar nuestro círculo íntimo de la fe, para reunirnos, orar juntos y
compartir nuestras vidas con ellos.
d. También necesitamos un grupo de personas que ya hayan transitado las pruebas
por las que nosotros estamos pasando, para que nos apoyen y ayuden a
superarlas también. El propósito es que nosotros podamos también servir de
consuelo y bendición a otros. Dios trabaja en la vida de las personas a través de
otras personas. 2ª Cor.1:3-4 “Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor
Jesucristo, Padre de misericordias y Dios de toda consolación, 4el cual nos
consuela en todas nuestras tribulaciones, para que podamos también nosotros
consolar a los que están en cualquier tribulación, por medio de la consolación
con que nosotros somos consolados por Dios.”
4. EXPERIMENTE LA PRESENCIA DE DIOS EN JESUCRISTO.Tal vez sea la
principal fuente de fortaleza en las crisis.
a. La presencia de cristo puede ayudarnos en cualquier situación.
Mt.28:20 “he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo.
Amén.”
- ILUSTRACIÓN:Jesús trajo bendición para aquellos que se acercaron a él.
Calmo el mar para que la barca no se hundiera, multiplicó alimentos para
que miles comieran, dirigió a los pescadores a una pesca milagrosa, sano a
4. los que se acercaron a él, e incluso resucitó a otro. La presencia de Cristo
puede ayudarnos en cualquier situación.
b. José al igual que Jesucristo sufrió sin culpa para beneficio de otros.
2ª Cor.5:15-18 “y por todos murió, para que los que viven, ya no vivan para sí,
sino para aquel que murió y resucitó por ellos… 17De modo que si alguno está
en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas
nuevas. 18Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo
por Cristo, y nos dio el ministerio de la reconciliación;”
c. Dios nos dio libre albedrío y no nos impone su voluntad. Pero Él quiere que
usted se vuelva a Él.
Lc.9:23 “Y decía a todos: Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí
mismo, tome su cruz cada día, y sígame.”
Vivimos en un mundo donde la gente peca y lastima a otros. Cuando le
entregamos nuestras vidas a Cristo y confiamos en Él, nos ayuda a superar cada
situación y nos da la habilidad para ver cómo va a resolverla al final. La cruz es
el máximo ejemplo de personas procurando hacer el mal mientras Dios hace que
todo obre para bien y para bendición de la humanidad.
Volverse a la presencia de Cristo y darle a Él la vida no solo significa que Él
lo rescatará de la tormenta, sino que le dará el valor y la fortaleza para resistirla.
CONCLUSIÓN:
RESUMEN O RECAPITULACIÓN:Hoy hemos visto la vida de José, y vimos cómo perseverar
cuando sufrimos a consecuencia de las acciones de otros y donde encontrar fuerza para seguir
adelante.
APLICACIÓN: Tal vez usted haya sido lastimado. Si es así, haga como José: No se entregue a la
autocompasión o a la amargura. En vez de eso, tome todos los escombros y entrégueselos a
Jesucristo. Deje que él saque algo nuevo, refrescante y bello de esa situación fea.
DEMOSTRACIÓN: Suceden muchas cosas injustas en este mundo. Al final de todo Dios pedirá
cuentas. Habrá un día de juicio. Nuestra responsabilidad es perseverar y ver lo que él pueda hacer
en nuestras vidas para edificarnos en vez de permitir que las cosas injustas nos devasten. Si está en
una situación en la que no comprende por qué suceden algunas cosas, acuérdese que tiene libre
albedrío, que las otras personas también tienen libre albedrío, y que Dios lo ve todo. Busque el plan
de Dios y vea que le da un giro a la situación aún más fea, y lo usa para bien si usted se lo permite.
Vuélvase al plan de Dios. Vuélvase a la presencia de Cristo y permítale el dominio de su ser. Dios
puede sacar lo mejor de una mala experiencia. No todas las cosas obran para su bien en la vida de
todo el mundo. Es una falsa creencia popular pensar que todo sucede para bien de todos. Solo
obrará para bien si le damos a Dios los escombros y le entregamos nuestras vidas y entonces Él
hace que las cosas obren para bien. Si usted se niega a hacer esto, él no hará que nada obre para su
bien.
PERSUACIÓN:
INVITACIÓN:Uno necesita ser cristiano, tener a Jesucristo en la vida, amar a Dios para que todas
las cosas obren para bien. Para serlo, usted necesita pedir perdón, arrepentirse de sus pecados y no
volver a ellos; y debe creer y recibir a Jesucristo en su vida como Señor y Salvador personal. Debes
creer que el Hijo de Dios no solo puede perdonar tus pecados, sino hacer de tu vida algo mejor. El
quiere obrar en tu vida, tiene un plan para ti y puede transformar todas tus experiencias malas y
sacar de ellas bendiciones para ti si tu se lo permites. Entonces podrás decir como José: “ Aunque
trataron de hacerme daño, Dios usó todo lo malo en mi vida para formarme y hacerme una persona
mejor. Por ello estoy muy agradecido.”