Llamado a no diferir, ni hablar, ni pensar, ni sentir cosas diferentes a las enseñadas por José Luis de Jesús.
Hay un tema muy importante e interesante que papá dio a su amada iglesia y que se ha obviado porque no lo predicó él personalmente; sino que lo delegó a Martín Guio. El Calqueo titula “La Babel de Hoy” Allí nuestro José Luis de Jesús, dio instrucciones claras de la importancia de la Unidad del Espíritu. De la importancia de HABLAR LO MISMO, PENSAR LO MISMO Y SENTIR LO MISMO.
Consejo ignorado y desechado por muchos incluyendo al mismo Martín, quien lo predicó; pues aunque ahora presenta los calqueos de José Luis de Jesús, no habla, no piensa, ni siente lo mismo. Y ha hecho retroceder a la iglesia al velo de Jesucristo, el resucitado.
Lo de Lisbet con su nueva doctrina de Melquisedec Miguel, tampoco habla, ni piensa, ni siente lo mismo.
La ciencia de la gracia nos llevó a identificar que el nombre de Dios es José Luis de Jesús. Que se manifestó como Jesucristo (cuando reveló el fundamento a Pablo), Como Jesucristo Hombre al volver a vivir para sacar a luz la vida y la inmortalidad por el evangelio, y salvar a su iglesia por la locura de la predicación.
Quien hable, piense y sienta otra cosa ha caído en la Babel de Hoy.
https://www.youtube.com/watch?v=khUQYT2GrTg
1. LA BABEL DE HOY
TEMA CONFORME AL FUNDAMENTO DE
JOSÉ LUIS DE JESUS
9 de octubre de 2013
Bueno Amada, vamos entonces, a entrar ahora con el tema.
El tema en esta noche tiene como título: “LA BABEL DE HOY”
¿Recuerdan la torre de Babel? A eso se refiere “La Babel de Hoy”.
Hebreos capítulo 4 verso 12. Dice:
“Porque la palabra de Dios…”
Diga: LA PALABRA DE DIOS.
“…es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos;…”
¿Y qué hace la palabra de Dios? ¿Qué hace?
Verso 12:
“…y penetra…”
¿Hasta qué?
“…hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos,…”
Eso suena profundo, verdad.
“…las coyunturas y los tuétanos,…”
Y sigue profundizando. ¿Qué más?
“…y discierne…, va más profundo,
discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.”
Dos cosas ahí, dos cosas, los pensamientos y no sólo los pensamientos, qué
hace, va más profundo todavía, las intenciones del corazón.
Miren en esta semana me ocurrió algo y llame a Papito por eso y estábamos
hablando y yo le contaba a nuestro Padre que -estaba ya amaneciendo y no sé,
eran las cinco y media, y yo me comienzo a recordar a mi mamá y comencé como
una película. Comienzo a ver a mi mamá educándome: -Martín, venga para acá-,
sirviéndome, ayudándome.
2. Imagínate, ¿quién no ama a su madre, cierto? Y ahí, yo la veía a mi mamá,
tremendo, ese amor de una madre educando a su hijo.
Pero entonces, el sueño tomó un rumbo diferente y yo comienzo a llorar, como
nunca antes había llorado, comienzo a llorar con un sentimiento tremendo. Porque
realicé que mi mamá no iba a estar en esta fiesta tan maravillosa que vamos a
tener ahora. -¡Que mi mamá no pueda estar aquí! La persona que amo tanto, que
Papá utilizó para procrear ahí en ese vientre y mi mamá no pueda estar acá.
Y entonces, yo me preguntaba: -¿Por qué mi mamá no puede estar aquí?
Y, escuché clarito: -Porque hay unos que no son dignos de sentarse a la mesa.
Hay unos que no son dignos.
Y cuando se habla de que no son dignos, no es que sean malas personas, pueden
ser lindos. Mi mamá es ¡muá!, linda, de pronto me está viendo. Mamá es hermosa.
Pero, Él no está hablando de una dignidad en carne. Papá me decía, cuando
estábamos hablando después, me decía: -Martín, es que los que se sientan a la
mesa a comer de este banquete es la iglesia y hay una sola iglesia.
Diga: HAY UNA SOLA IGLESIA.
Y entonces, Papá me decía: ¿Cuál es la iglesia?
Y me decía: -LA IGLESIA SON AQUELLOS MIEMBROS DE UN CUERPO QUE
HABLAN, PIENSAN Y SIENTEN LO MISMO. QUE HABLAN, PIENSAN Y
SIENTEN LO MISMO.
Mira a Primera carta a los Corintios 1: 10, mira el sentir de nuestro Padre, el
sentir de Dios. ¿Qué dice allá? Dice:
“Os ruego,…”
Si dice, os ruego, es porque está el sentir de Dios allí.
“Os ruego, pues, hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo,…
No era algo personal de Pablo, era por el nombre de quién, de Dios mismo
“…el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que habléis todos, cuánto,
una misma cosa,…”
Os ruego, que habléis una misma cosa. ¿Qué más?
“…y que no haya entre vosotros divisiones, sino que estéis…”
¿Unidos? ¿Qué dice ahí?
“…que estéis PERFECTAMENTE unidos…”
Esa es otra medida de unidad. Eso es otra gloria.
3. Diga: PERFECTAMENTE.
Ahí no hay margen de error, esto es perfecto.
“…perfectamente unidos en una misma mente…”
Ahí están los pensamientos.
O sea, que habléis, que estén perfectamente unidos, que penséis en una misma
qué, mente. Y ahí está.
“…y en un mismo parecer.”
En una misma intención. Las intenciones del corazón.
Una persona puede hablar lo mismo, pero no pensar lo mismo. Es más, Papi
me decía: Una persona puede hablar lo mismo, pensar lo mismo, pero no sentir lo
mismo que tú sientes.
Mira otro verso, Filipenses 3: 16. ¿Qué dice Filipenses 3:16?
“Pero en aquello a que hemos llegado, sigamos una misma regla…”
¿Y cuál es esa misma regla? EL EVANGELIO.
Pero, ¿qué más dice?
“…sintamos… una misma cosa.”
Ahí ya no está diciendo, -hablemos lo mismo. Ahí está diciendo qué, sintamos lo
mismo.
Otro verso, Filipenses 4:2. Dice:
“Ruego a Evodia y a Síntique…”
Dos colaboradoras de Pablo. ¿Qué hacía Pablo? Les rogaba.
Allá no les dice: -Por el nombre del Señor-, pero estaba Dios incluido en eso.
“Ruego a Evodia y a Síntique, que sean de un mismo qué,
de un mismo sentir…”
Entonces Papi me decía: -Martín, esas son tres medidas. Tres medidas: HABLAR
LO MISMO, PENSAR LO MISMO Y SENTIR LO MISMO.
Porque la palabra de Dios discierne los pensamientos, pero también qué, las
intenciones, la actitud, el propósito que hay en hablar o en hacer algo. Alguien
puede hablar lo mismo, pero no estár sintiendo lo mismo.
Mira, Papi nos recuerda aquí en Génesis lo que sucedió en Babel.
4. ¿Quieren ver un segundito? Vamos a dar un viaje allá en Génesis capítulo 11.
¿Qué pasaba allá al comienzo de la historia? Mira Génesis 11:1.
Dice:
“Tenía entonces toda la tierra…
¿Cuántas lenguas? Ellos hablaban una sola cosa.
“Tenían…, una sola lengua y unas mismas palabras.”
Y entonces, se inventaron el proyecto este de construir la torre. ¿Y qué pasó? En
el verso siguiente.
Mira el verso 7.
Cuando Dios ve ese proyecto, que no era el proyecto de Él, no era el sentir de
Dios. Diga: NO ERA EL SENTIR DE DIOS. Era de ellos. Ellos se inventaron eso.
¿Qué hizo Dios? Dice:
“Ahora, pues, descendamos, y hagamos qué, y confundamos allí su lengua, para
que ninguno entienda el habla de su compañero.”
Verso siguiente:
“Así los esparció el Señor desde allí sobre la faz de toda la tierra, y dejaron
de qué, de edificar la ciudad.”
Allí, Dios los separó, los esparció, porque aunque hablaban lo mismo, no tenían el
sentir de Dios. Y Papá ¿qué hizo? LOS ESPARCIÓ, LOS DIVIDIÓ.
Mira qué tremendo. Mira qué sucede en la mente de Papá. Allá los esparció. Aquí,
en el Gobierno de Dios, nos está trayendo a la unidad perfecta. ¿Usted ve eso tan
maravilloso? Lo que Él esparció allá.
¿Por qué hoy en día usted ve tantos idiomas y tantas cosas? Y el mundo está así.
¿O, habrá alguna organización que ande en la unidad perfecta? No. Pueden haber
Convenciones, Foros, Seminarios, y ahí están todos los de esta empresa, los de la
otra. ¿Usted piensa que ellos sienten lo mismo? No.
Sólo en este Gobierno puede haber esa unidad perfecta.
Diga: SOLO EN CRECIENDO EN GRACIA.
En este tiempo, Dios nos trajo de todos los rincones de la tierra y hoy en este
Auditórium se cumple eso, nos trajo. Y, así hablemos tzotzil, portugués, o español
o inglés, sentimos lo mismo.
Diga al que está a su lado: YO SIENTO LO MISMO.
5. Un pueblo en la perfecta unidad. ¿Por qué? Porque ese es el sentir de Dios. Eso
es lo que Dios siente, lo que Dios anhela, lo que Él ha declarado, lo que Él le dio al
Apóstol Pablo de escribir, hoy se condensa en este pueblo maravilloso.
Hoy Papá Dios se agrada y ve a esta Amada, y el Apóstol Pablo desde la nube
dice: POR FIN SE CUMPLIÓ ESTO, LA UNIDAD PERFECTA DE DIOS.
(Aplausos).
A unos segundos de la transformación. ¿Por qué? Repasemos Primera carta a
los Corintios capítulo 1 verso 10. ¿Qué dice el Apóstol Pablo? Mire la frase.
“Os ruego,… Os ruego,…”
Qué ruego tan tremendo.
“Os ruego, pues, hermanos, por el nombre de nuestro Señor…
Oye, Papá Dios, a través de Pablo escribiendo eso, “Les ruego eso”. Parece que
si no hay unidad perfecta, no se puede.
Mira, nosotros vamos a gobernar al mundo, Amada. Este Gobierno es la
alternativa. No hay otra alternativa para el mundo, no existe otra. Si no es aquí, en
este tiempo, perdone lo que voy a decir aquí: SE JODIÓ EL MUNDO. (Ovación).
Porque no hay otro pueblo como este. No hay otro pueblo. El Señor llegó, se
vistió, se encubrió de carne, camina en medio nuestro, y ya por 40 años, -¿40,
cierto, Andrés Cudris?- 40. 40 años anunciando, anunciando para transformar
nuestras mentes y transformó nuestra mente como nadie lo ha hecho, lo ha hecho
Él.
Mire, nosotros acá fuimos educados diferente, a usted lo edificaron diferente que
el que está a su lado, su mamá lo edificó diferente, le dio a comer diferente, fueron
a escuelas diferentes, todos acostumbrados a hacer las cosas diferentes, culturas,
-no es que esta cultura le echan más sal, en esta le echan más azúcar, en esta le
echan así, aquí nosotros hacemos así-. Eso se acabó, porque somos muertos.
Papá pudo. Mire, esto es lo más grande de la historia. Se metió Papá, la palabra
de Dios, que sale de la boca de Dios, se metió, renovó nuestra mente, no para que
hablemos lo mismo solamente, sino para que sintamos lo mismo, para que
estemos perfectamente unidos en amor.
Mire lo que dice Filipenses 4:2, repasemos nuevamente. ¿Qué decía Pablo? Veía
a dos colaboradoras que hablaban lo mismo, pero ellas no estaban en el mismo
sentir. Dice:
“Ruego a Evodia y a Síntique, que sean de un mismo qué,sentir...”
Porque pueden haber alguien todavía en este Gobierno que no sienta lo mismo
que Papi, que no sienta lo mismo que su Obispo. ¡Hello!
Diga: ESE ES EL RUEGO DE PAPI.
6. Y allá en Primera a los Corintios 1: 10 dice.
“…que estéis qué, perfectamente unidos…
¿Habrá otro momento en la historia donde se pueda dar eso: LA PERFECCIÓN
DE LA UNIDAD? ¿Cuándo? Tiene que ser ahora, Amada. Tiene que ser ahora, y
es ahora. Es ahora.
Mire, como hablábamos con alguien anoche en el hotel, decíamos: -Si Papá, que
es el que ha hecho esto en nosotros, no es Dios, entonces, Dios no existe. Porque
aquí no se trata de sanar una rodilla, o sanar un riñón, Él hizo algo más que nadie
ha podido hacer.
Diga: SOLAMENTE JOSÉ LUIS DE JESÚS MIRANDA.
Mire, si el sentir es tan importante, que con Papi hablábamos ahí, fue una
conversación bien extensa, -cuando en Egipto el ángel de la muerte, Dios les dijo,
el ángel de la muerte va a pasar y va a matar a los primogénitos, que no tengan
una marca en el dintel. Y, yo me imagino que algún vivo ahí dijo: -Pintemos ahí, de
todas maneras. Pintemos, por si las moscas, tú sabes. Pintemos ahí.
¿Usted cree que el ángel comió cuento? Dijo: -Está pintado ahí… El ángel entró,
porque Dios trasciende a una marca. Dios trasciende aún al tatuaje que tenemos.
Hay gente afuera que tiene los tres seis, también. ¿Dónde están los bendecidos
de Honduras y El Salvador? Hay gente que tiene esa marca, pero esto va más
allá. No ve que esto es a las coyunturas allá, a los tuétanos, a las intenciones del
corazón. ¡Qué tremendo es Papá Dios!
También mencionaba, hablábamos con Papi de aquella ocasión de Moisés y
Acán. Dios le dice al pueblo: -Vayan y acaben con todo el anatema, con todo-, y
entonces, las instrucciones era acabar con qué, con todo.
Pero hubo uno que no estaba en ese sentir y se guardó por allá escondido, metió
bien allá un lingote y otras cositas más, las guardó ahí. Pero Papá juzga las
intenciones de los corazones y Moisés les dice: -Un segundito, vengan acá, aquí
hay anatema en el pueblo. Acam, ven acá. Cuéntame todo, no me guardes nada.
-¿Cómo así?
Porque los ángeles, aquí hay una cobertura angelical, que estuvo allá también, lo
que pasa es que ahora sirven acá en otra gloria.
Le dijo: -¿Qué pasó, qué hiciste?
-¿Yo?
-Sí, tú.
Y él pensaba que ese escondido no se veía. Y le encontró el lingote. Traiga todo lo
que escondió. Le trajo el lingote, trajo todo. ¿Y, qué hizo Moisés? Allá en Josué
7, dice que se llevó a Acam, a los hijos, a los bueyes, a los asnos, hasta las
mascotas, todo, se metió todo allá y los apedrearon a todos.
7. Porque estaba en el pueblo, pero no estaba en el sentir, no estaba en el mismo
sentir, no obedeció.
Entonces, Papá en una ocasión decía: -En la transformación pueden haber
sorpresas. Hay personas que hablan lo mismo que nosotros, -yo los he visto en el
Internet-, pero no están en el sentir de Papá.
¡Ah!, es más, hasta piensan lo mismo que nosotros. Bendecido, dicen. Es más, le
dicen a Papi: -Papi. Hey Papi. Papi dijo esto… Yo estoy sometido a Papi. Al
Obispo, no.
Y el sentir de Papi que puso a ese Obispo, ¿dónde lo dejas tú? ¿Dónde dejas tú el
sentir de Papá, que vio a bien que ese vaso de barro con debilidades cumpliera
esa función? Porque nosotros los Obispos no somos los más…, je.
No, al contrario, Papá nos escogió porque somos los más débiles. Pero Papá nos
puso.
Pregúntele al rey David cuando Saúl… Saúl estaba fallando. Y David lo cogió allá
y lo podía cortar la cabeza. David no lo tocó. Dijo: -Ese es el que Papá escogió. Ya
después Dios quitó a Saúl -eso es otro cuento-. Papá lo quitó, porque estaba
obrando mal, pero mientras tanto…no ve que es lo que Papá…, es el sentir de
Papá. No se puede estar en este Gobierno y tener un sentir diferente, Amada. Tú
podrás engañar…
Mira, allá ese que cubrió el dintel, lo pintó, le quedó parecido, es más le
quedó hasta más bonito que el vecino, mira…pin…,
-¿Y ese dintel? Oye, dónde tú pintaste eso tan hermoso.
-Una pintura que me conseguí allá.
Pero, puede engañar al vecino, a los ángeles no.
Amada, es el tiempo en que Papi nos ha llevado a la unidad perfecta. A la perfecta
unidad: hablando, pensando y sintiendo lo mismo. No hay de otra, ese es el ruego
de Papá.
¿Cuántos reciben que se lleva a cabo hoy? La perfecta unidad de Jesucristo
Hombre en nosotros. (Aplausos).
Mire, en esta etapa Papi nos ha llevado y nos ha librado de toda contaminación de
carne y de espíritu. A tal punto que no sólo nos ha llevado a hablar en la doctrina,
sino que Papi viene con un sentir por amor de su amada y aún nos lleva a otra
gloria para cuidar este vaso de barro de una mejor manera. ¿Por qué? Porque Él
lo vivió. Porque Papi siempre va adelante. Como Él decía -a mí me ha tocado
moler el vidrio-, y Él pasó por unas situaciones y unos desordenes y unas cositas y
Él sufrió y padeció, aprendiendo obediencia. Y, luego a su Amada que es lo que Él
más ama, nos trae unas instrucciones en amor. Es más, Él nos dice: -Hasta yo he
fallado en esto, pero tenemos la oportunidad de corregirnos-, siempre Papi,
consolándonos.
8. ¿Tú crees que es en el mismo sentir que debemos recibir esa instrucción de Papi?
Imagínate, que alguien hubiese dicho por allá, -¡aah! Yo sí hablo bendecido, pero
eso de cómo José Luis va a hablar de la fumadera, cómo va a hablar de nuestro
licorcito ahí, nuestra carnecita acá, nuestra cosita…?
Amada, ese fue el sentir de Papi y sus hijos ni preguntamos, sus hijos lo recibimos
con gozo, porque Él es el que más nos ama y nos cuida, nos quiere ver bien.
(Aplausos).
¿O será que a puertas de la transformación, Papi está chequeando cómo están
esos muertos? ¿O, habrá algún vivo? Vamos a ver cómo están los muertitos.
Porque al muerto lo acomodan como quieran. ¿No es cierto? Hay una película que
como veinte días tuvieron a un muerto que lo llevaban para un lado y para el otro,
y le ponían los lentes. ¿Te acuerdas? Porque al muerto no, ni pregunta. Llévenme,
tranquilo. ¿Cierto?
¿Cuántos se declaran bien muertitos? Este es un pueblo maravilloso. Esto es una
locura para los de afuera.
Papi me decía: -Martín, ¿cuánto yo anhelaría que en esas sillas ahí donde va a
ser el aniversario estuviera Cheo ahí, José Luis Jr., que estuviera Jessica, que
estuviera Jennifer? ¿Tú no crees que Papi anhela eso?
Imagínate, él daría todo, pero es que acá los sentimientos no van. Este es un
Gobierno donde los sentimientos son otro departamento. Aquí es por
predestinación, por elección. Y aún esto que hablamos fíjate, esto que hablamos
esto no se puja, -Yo voy a guardar la perfecta unidad-. No, no, no. Tranquilo, eso
no. Eso fácil ¡fuh!, se huele, se detecta ahí.
El ángel ahí ve, este puede estar acá, puede decir -no yo soy un colaborador, yo
barro-, bueno, la intención del corazón
¿Por qué cantas?, ¿Por qué bailas?, ¿Por qué te paras acá?, ¿Por qué haces?
¿Por qué? El ángel observa. ¿Usted no cree que el ángel saca el rayo X ahí a
ver?
-¡Uuf! No, no, no, habla bonito y todo, pero este no.
Esto es por una invitación especial que Papá hizo y equipó a esos ángeles.
Sintámonos privilegiados, Amada, Obispos, Colaboradores de que Papi puso ese
sentir, el mismo sentir lo puso en ti y en mí. (Aplausos)
Mira lo que me decía Papi, para terminar, decía:
“LOS PENSAMIENTOS VIENEN A LA MENTE NUESTRA Y A LOS
PENSAMIENTOS TÚ LOS ORDENAS.”
Viene un pensamiento y qué haces, lo ordenas. Ok, ya lo tienes ordenadito.
-Sí ya lo tengo.-
9. “LUEGO LO BAUTIZAS CON UNA INTENCIÓN CORRECTA”, las intenciones del
corazón. Puede haber muchas intenciones, pero hay una que es la correcta.
-¿Por qué hago eso? ¿Por qué voy a cantar, por qué voy a bailar, por qué voy a
colaborar?
Tú lo bautizas: -Un momentito, qué busco ahí, qué intención hay, voy a figurar, me
van a aplaudir, voy a ganar, todos van a pensar… ¡Hello!
Diga: HAY UNA INTENCIÓN CORRECTA.
Y entonces, estás en el sentir de Papi. La idea es estar en el sentir de Papi. Y
como dije ahora: No se puja. No se empuja. Debe de estar.
¿Tú amas a Papi?
Perdón: ¿Amamos a Papi?, me pregunto yo también. ¿Amamos a Papá?
¿Lo que viste escrito ahí, tú crees que es el mismo ruego de José Luis para su
amada? ¿Tú crees que Papá te está rogando a ti?
Diga: -A mí-. No mires para el lado: A ti.
¿Qué tú hables lo mismo? ¿Tú quieres hablar lo mismo? ¿Y pensar lo mismo?
Ojo con la respuesta que me vas a dar, no contestes rápido. ¿Y el sentir?
Papá no puso un colaborador ahí. O, es que él es más bajito que tú, o más feo
que tú, o es que Papá lo puso ahí -de pronto- para sacar la medida tuya, para
sacar la intención ahí tuya, porque él se equivocó, porque él no hizo lo que a ti te
parece, porque la corbata le quedó de lado, por cualquier estupidez de la carne.
¿Acaso no somos un solo cuerpo?
¿Acaso no somos una amada, o somos dos?
Los que están con su Obispo y los del lado norte.
No, no amada, aquí somos uno solo. No hay salida, aquí hay uno solo.
-No, pero es que está fallando.
-Ah y entonces Papá no conoce eso. Papá no podrá quitar a ese Saúl luego de ahí
para que David...
-No, es que Papá…
-Porque, entonces tú me estás diciendo que Él no es Dios. Tú me estás diciendo
que Él no es Dios con tu actitud.
-¡NO, ÉL ES DIOS!
-Tranquilo, pero lo estás diciendo, porque entonces Dios no puso a ese obispo.
¡Hello!
Yo recibo amada, que ese día en un abrir y cerrar de ojos, que puede ser este fin
de semana, nosotros estamos, mire, no solamente hablando, ni cantando lo
mismo, sino que estamos perfectamente unidos. Que Papá nos dice: -Amada,
vamos a gobernar, vamos a reinar, vamos a destruir a esa ramera.
10. Papá me decía: -Este mismo Babel de allá se repite hoy.
¿Sabe cómo se repite? Los evangélicos de hoy miran para arriba, porque la torre
de Babel quería llegar a dónde, arriba, y los evangélicos están diciendo: -Señor,
desciende, va aparecer en las nubes, ya viene el Señor, Cristo viene, arriba
vamos.
¿Y Papá cómo los tiene? Hablando diferente. El de allá habla diferente al de allá y
el de allá, allá. Se tiran entre ellos, esos son cincuenta mil revelaciones allá: El
Babel de hoy.
Y Papá me decía: Si usted está aquí y no está sometido completamente a
Jesucristo Hombre y a los que así se conducen, a sus colaboradores, usted
está rumbo a una segunda Babel.
-¡RUMBO A LA TRANSFORMACIÓN!
No, allí dice: -A una segunda Babel.
¿Y qué es Babel? Hablar otra cosa, otro idioma.
-No, que Dios me mostró esto…yo hablo esto…, yo ando acá en lo mío.
Bienvenido a esa Segunda Babel.
Los metodistas, adventistas, tienen una segunda Babel, se llaman cristianos.
Ah y nos critican, dice Papi.
Están hablando, están divididos todos. Y nos critican. Están fregados y nos
critican.
Pero hay un pueblo mundial –dice Papi- que es Creciendo en Gracia, que
piensa, que siente y que habla lo mismo. No estamos mirando para arriba
como la Babel, estamos mirando acá porque Dios camina y habita en medio
nuestro.
¡Abba Padre!
¿Cuántos le dan gracias a Papito?
Vamos a estar en pie amada, y a darle gracias a Papi. Los músicos se preparan,
los cantantes, los artistas de Papito.
¿Cuántos se declaran en la unidad? ¡Abba Padre!
Voy a preguntar ¿Cuántos se declaran en la perfecta unidad? ¡Abba Padre!
Amada, yo recibo esta palabra para mi vida. Yo necesitaba esta palabra para
apreciar esto, para amar a mi Padre, para amar su palabra, para amar su unidad,
para amar su gobierno, para amar a mis hermanos. Todos esos colaboradores
que usted ve ahora alrededor acá, mira con chalecos ahí limpiando, yo me declaro
en el mismo sentir de ellos, de mis hermanos, de mis compañeros, de mis amigos
en la gracia, de mis obispos. Yo me declaro en el mismo sentir de ustedes,
sometidos a ustedes también los unos a los otros, respetando que Papá los puso
a ustedes en sus países y declaro la cobertura de Papi llevándonos a otra gloria. Y
11. como Papi siempre ha dicho: -Si hemos fallado en algo, hay la oportunidad de
crecer, hay la oportunidad. Así es Papito.
Si Él mismo ha dicho: -Si yo me he equivocado en cositas-, porque así crecemos,
así crecemos.
Y hoy vamos a salir en una unidad tan preciosa, tan linda y los que van a llegar,
van a llegar en una unidad tan preciosa porque declaramos y recibimos.
Diga: YO RECIBO LA TRANSFORMACIÓN DE MI PADRE, PERO YO RECIBO
QUE SOY UNA VIRGEN SENSATA, UN SOLDADO, UNA PRIMICIA, QUE
HABLA LO MISMO, QUE PIENSA LO MISMO, PERO SOBRE TODO, PAPITO
SOBRE TODO, ÁNGELES QUE ME OYEN, SOBRE TODO, SOBRE TODAS LAS
COSAS, OBEDIENTE A TU RUEGO, SINTIENDO LO MISMO QUE MI PADRE
JOSÉ LUIS Y SU AMADA EN LAS NACIONES. LO RECIBO ASÍ. GRACIAS, MI
PADRE, RECIBO TU PALABRA, RECIBIMOS TU PALABRA.
¡Abba Padre!
Y RECIBIMOS ESTOS DIOSES PRECIOSOS RUMBO A ARMAGEDÓN.
¡Abba Padre! Vamos a darle alabanza a nuestro Padre.