Lengua

1. Narrador- Hera decidió castigar a los habitantes de Tebas por un crimen
cometido en la ciudad, y se sirvió de la Esfinge para conseguirlo. La Esfinge
era un monstruo colosal que había nacido en el corazón de África. Tenía
cabeza y torso de mujer, patas de león, cola de serpiente y unas enormes
alas de águila.
Esfinge- (Le decía con voz muy dulce) Si quieres seguir adelante de veras
responder a un acertijo.
Narrador- Al viajero le inundaba un miedo atroz.
Viajero- (Con un nudo en la garganta le preguntaba) ¿Y que pasa si no atino
con la respuesta?
Esfinge- Que no tendré más remedio que castigarte por tu completa
ignorancia.
Narrador- La Esfinge con la voz más dulce que puede imaginarse
pronunciaba entonces su enigma que decía así:
Esfinge-
Solo tiene una voz,
Y anda con cuatro pies por la mañana,
dos al mediodía y tres por la noche.
Cuantos menos pies tiene, más veloz corre.
Si lo conoces, te ama, pero si no lo conoces
lucha contra a ti y te destruye.
Narrador- Ante la enorme dificultad del enigma, el viajero empezaba a
sudar y a temblar de miedo. La Esfinge, mientras tanto, esperaba impasible,
como si no tuviera prisa alguna, pero, al fin rompía su silencio para decir:
Esfinge- No sabes la respuesta ¿verdad?
Viajero- (El viajero ni si quiera contestaba)
Narrador- ¿Para que iba ha decir nada si sabía que su muerte era
irremediable?
Esfinge- (Al final estrangulo y devoro a su presa)
Narrador- La esfinge empezó ha pasar hambre hasta que un día:
Esfinge- ¿A donde vas viajero?
Edipo- A Tebas (Con voz firme)
Esfinge- Pues no pasaras de aquí a menos que me des la respuesta ha este
enigma.
Solo tiene una voz,

2. Y anda con cuatro pies por la mañana,
dos al mediodía y tres por la noche.
Cuantos menos pies tiene, más veloz corre.
Si lo conoces, te ama, pero si no lo conoces
lucha contra a ti y te destruye.
Edipo- (Muy atentamente) Es muy difícil
Narrador- Edipo se encero en un circulo que había hecho el mismo con un
palo. Paso un rato.
Edipo- (Muy seguro de si mismo) La respuesta ha este enigma es el hombre.
Narrador- La cara de la esfinge adquirió un gesto áspero. Edipo había
descifrado el enigma. La esfinge no pudo aceptar su derrota, sus ojos se
volvieron rojos de rabia y su cuerpo se tensó como una cuerda que soporta
mucho peso. La Esfinge al final perdió el control y decidió tirarse por un
barranco y quitarse la vida. Edipo siguió su camino hacía Tebas y todo el
mundo podía pasar por allí tranquilamente.
Hecho por: Ainhoa, Adrián y
Guillermo.