Octubre es un mes marcado fuertemente por la devoción y el cariño a Nuestra Señora del Río Blanco y Paypaya... Así nos lo comparten nuestras Hermanas que viven en medio del pueblo jujeño.
1. NARRANDO NUESTRA VIDA – COMUNIDAD AMANCAY
La vida sigue con sus ritmos, de lo cual la naturaleza nos da testimonio ...y así como la naturaleza nos muestra los
ritmosde la vida,nosotrasvamosintentandodescubriryacompañarlos ritmos de esta realidad que nos toca vivir...
El mesde OCTUBRE estuvofuertementemarcadopordosejespastoralesque atravesarontodasnuestraspresencias
y actividades:
la VIRGEN MARÍA, en su advocación tan querida en estas tierras de NTRA. SRA. DEL ROSARIO DE RÍO
BLANCO Y PAYPAYA,
y la MISERICORDIA,desde el deseode vivircomoparroquiaestaexperiencia a que nos invita Francisco en este año
jubilar.
Nomás el primer día del mes fuimos invitados como Parroquia a participar de la Novena que se celebró en la
Catedral, en honor a la Virgen de Río Blanco. Esto ya nos puso en “sintonía” con este mes que en Jujuy está
ciertamente muy “teñido” de la Presencia atenta y cercana de nuestra Madre.
Desde hace unosaños,la Vida Religiosaen Jujuy está invitada por el Obispo a prestar un servicio
de ESCUCHA en el Santuario de Río Blanco, adonde llegan, cada domingo, miles y miles de peregrinos a honrar a
María. Como AUXILIARES PARROQUIALES siempre hemos estado presentes en este espacio y este año no fue la
excepción.Porciertounaexperienciamuyinteresante de encuentro congente que sufre yque va al encuentro de la
Madre a depositar sus penas y sus dolores, buscando consuelo y esperanza para sus vidas. Haber estado allí,
acogiendoyrecibiendo tanta vida, estremece el corazón, nos desafía a hacer viva la nota de la INTERCESIÓN y
nos compromete en la COMPASIÓN. Allí se perciben las realidades más profundas de sufrimiento de nuestro
pueblo. Se han acercado toda clase de gente, y no sólo adultos y jóvenes, también niños con grandes cuestiones.
Claro que es un gesto puntual (difícilmente volvemos a ver a esta gente para seguir un acompañamiento), pero
nuestro gesto comunitario fue colocar los NOMBRES de estas personas en nuestro altarcito de la comunidad, que
este mes estuvo presidido por María del Rosario de Río Blanco y Paypaya. Ella seguirá animando y cuidando de la
vida de todos estos hermanos que nos han confiado sus penas. A Ella los confiamos.
El día 7, día de Su Fiesta,Mónica pudo acompañar la peregrinación a pie desde la Catedral hasta el Santuario, y por
la tarde participamos de la Misa y procesión en la Catedral.
Tambiéncontamosconla visitade la VirgenPeregrinaenel territoriode nuestra Parroquia: el 19 de octubre estuvo
en la Guardería Niños de Belén, y allí se realizó una celebración con los niños y padres de la
Guardería y se abrió a la comunidad parroquial la posibilidad de visitar a la Virgen.
El otro gran eje transversal de este mesparanosotras,comolesdecíamos,fue la EXPERIENCIA de laMISERICORDIA, que se
intentó vivir como comunidad parroquial. El día 2 de octubre, buscamos tener un espacio con los
servidores de las cuatro comunidades para hacer esta experiencia, que queríamos después replicar haciendo una
convocatoriaa toda la comunidad.El lemaque nos convocó en las dos oportunidades fue: RECIPIENTE Y FUENTE DE
LA MISERICORDIA (inspiradosenlaalocucióndel PapaFranciscoenel Jubileo de los Sacerdotes). Con los servidores
se intentó experimentar la ACOGIDA, desde el recibimiento en la puerta de la parroquia. Durante el encuentro,
animados por un equipo del que formaba parte la Hna. Mónica, se trabajó la mirada y la cercanía en el vínculo. Y
terminamos nuestro encuentro con la Eucaristía compartida.
2. El día 29 de octubre fue laoportunidad de replicar esta experiencia convocando a toda la comunidad, en la certeza
de que NADIEQUEDAFUERADELAMISERICORDIA.Paraestaocasióntambiéncontamoscon la presencia de la
VirgenPeregrina,Ellaque testimonialaMisericordiade Diosconsu canto y con suvida. A Ella la recibimos la víspera
de este encuentro,traídapor la gente de Perico, donde había estado visitando a los presos, la gente de la calle, los
olvidados,yenel recibimientocontamosconlapresenciade labanda de sikuris de nuestro barrio. Momento muy
emocionante contemplandolafe sencilla de nuestra gente. Durante la mañana del sábado, María estuvo
en el Templo parroquial, recibiendo a todos los hijos que quisieran pasar por
allí... siempre impacta la atracción que ejerce María simplemente por estar ahí...
Por la tarde se realizó lo que se dio en llamar “Encuentro con la Misericordia”. Allí hicimos la experiencia de
atravesarla Puerta,comogestojubilar, después de una breve catequesis animada por las Hnas. Auxiliares. Fuimos
interpeladosporunarepresentaciónque noscolocóenel meollodel misteriode laMisericordiade Dios, y ayudados
con una iluminación vivencial de un sacerdote Lateranense. Finalmente trabajamos en pequeños grupos: ¿de qué
nos tenemosque vaciar,yde qué nostenemosque llenar?Usandocomosignounapequeñavasijaque nosllevamos
como recordatoriode estaJornada.Terminamoseste intensoencuentroconunaprocesiónpor las calles de nuestro
Barrio,llevandolaimagenperegrinade María, y con laEucaristía celebradaal aire libre enuna pequeña ermita de la
Virgen que se encuentra en la entrada de nuestro barrio. Terminada la Misa, teníamos que llevar la imagen
peregrina a la Catedral, así que la gente acompañó hasta subir el puente. Fue ciertamente una experiencia muy
intensa y de la cual pensamos que irán recogiéndose frutos a lo largo del caminar como comunidad.
Mónica tuvola oportunidadde participardel ENECde la región NOA,que se realizóenSalta,del 8 al 10 de octubre,
donde también el tema principal fue la MISERICORDIA.
Por supuestoque lavidasiguióconsusencuentroshabituales:visitas, encuentros de comunidades, ornamentación
del templo parroquial, acogida de quienes llegan a casa, reunión de Consejo Pastoral Parroquial, y lo propio de
nuestros trabajos tanto en la Guardería como en el Obispado.
Dentrode esta misiónhabitual,el día 22, se realizó en nuestra Parroquia un encuentro de Delegadosde
las CEBs, para poder trabajar la realidad de las comunidades y lo que queremos seguir construyendo. Fue un
momento de compartida muy profunda y que permitió visualizar en qué están las distintas comunidades de la
diócesis, para poder pensar en un proyecto para el próximo año.
Como decíamos al principio, la vida sigue su ritmo, y nosotras queremos entrar en el ritmo de la vida de estas
comunidades. Por eso, seguimos caminando, seguimos andando y ensayando modos de presencia, propuestas y
respuestas.
Por todo DAMOS GRACIAS A DIOS, que en su infinita Providencia cuida de todos y de cada uno.
Las abrazamos con cariño. MÓNICA, EDIT Y MARITA