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1. LOS DIOSES
GRIEGOS.
LA TITANOMAQUIA.
VEGA ÁLVAREZ GARCÍA, Nº4, 1º C
LOS HIJOS DE CRONOS.

2. Para conocer bien la historia de la Titanomaquia y de la
guerra de los titanes hemos de empezar por los padres de
esta guerra, Cronos y Rea.

3. Tanto Cronos como Rea eran Titanes, Cronos controlaba el
tiempo, Rea la Tierra.
Eran hermanos y a su vez marido y mujer.

5. Ambos habían concebido varios hijos, pero Cronos sabía
que en las predicciones se había visto que uno de sus hijos
le quitaría su poder de dios supremo, así que todos los hijos
que tuvo los engulló sin piedad.

7. Rea, mientras este acontecimiento sucedía, angustiada de no
poder tener a sus hijos consigo, decide que el último que
quedaba por engullir viviría fuese como fuese...

8. Así pues, mientras Cronos se comía a su penúltimo hijo,
Rea envuelve una piedra simulando contener a el último.
Sin tan siquiera mirar el contenido de lo envuelto el Titán lo
engulle satisfecho de seguir perpetuando su poder.

9. Mientras, Rea encarga a las ninfas el cuidado de su hijo.
Éste lleva por nombre Zeus.
Pasan los años y Zeus se convierte en adulto. Las ninfas
deciden explicarle su procedencia.

11. Zeus, frustrado por lo sucedido, decide derrotar a su padre y
se las ingenia para llegar hasta él y matarle. Prepara una
poción la cual carga y se dirige hacia dónde su padre tiene
su morada. Una vez allí, invita a Cronos a que beba de la
copa donde anteriormente había vertido la poción. Cronos
que desconoce las intenciones de Zeus, y que ni tan siquiera
sabe que es su hijo, accede y de un trago toma todo el
contenido.

12. Pasa el tiempo y el Titán empieza a sentirse mal, tanto que
de pronto abriendo su boca vomita a todos los hijos que
había engullido. Estos eran: Hestia, Deméter, Hera, Hades,
Demóstenes y Poseidón.
La ira de Cronos es tal que ordena a sus hermanos
(Gigantes, Titanes o Cíclopes) que maten a todos sus hijos.

13. Aquí comienza la Titanomaquia.
En esta guerra, la cual duró 10 años, lograron vencer los
dioses, que se repartieron el botín entre los tres hermanos
más poderosos, otorgando así el dominio del cielo a Zeus, el
del mar a Poseidón y el del inframundo a Hades.