La carta es del maestro Damián Miguel Moreno Luna dirigida a sus alumnos del quinto grado "A" antes de finalizar el ciclo escolar. El maestro expresa orgullo por haber trabajado con los estudiantes y desea lo mejor para ellos en el futuro, recordándoles que construyan amistades desde el amor y sin lastimar a otros. También les desea que sigan sus pasiones y mantengan la paz en sus espíritus de niños.
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carta a mis alumnos
1. Queridos alumnos, estamos a mes y medio de
culminar este ciclo escolar. En lo personal me siento
orgulloso de haber trabajado durante estos meses
con ustedes. Siempre había deseado tener un grupo
competitivo y relajado a la vez.
Cada uno de ustedes es distinto pero no dejan
de ser niños. En mi posición de maestro pude tener
errores que quizás no los pude percatar como tal. Si
en cada uno de ustedes cause dolor, llanto, corajes,
desvelos, deseos de desaparecerme “Tómenlo por
el lado amable” porque hice lo mejor que pude. Día
a día me preparo analizando mis aciertos y errores
para mejorar los primeros y superar los segundos.
VILLAHERMOSA, TABASCO A MAYO 31 DE 2017
Carta a mis alumnos del quinto “A”
Generación 2016- 2017
Primaria “Luz Loreto” col. 1° de Mayo
2. A mis alumnos Erik Vidal y Sebastián los extrañaré,
ya que ambos son nobles y respetuosos y aunque
fueran unos “relajistas” - a como muchos le dicen a
los niños que se permiten ser auténticos- los seguiría
queriendo porque son mis alumnos. Dios les bendiga
en sus nuevos caminos.
A los demás qué les puedo decir, si cada día
antes de que yo entre al aula tienen una fiesta eterna
en el salón. Los he sorprendido jugando a ser
ustedes mismos, sin máscaras. Pueden divertirse y
jugar siempre y cuando sus juegos no impliquen dolor
físico o emocionales, porque si así fuese dejaría de
ser un juego a como se los he dicho siempre.
3. Alumnos míos, construyan sus amistades desde el
amor, sin juzgar, sin herir a nadie, sin hacerlos sentir
mal. Recuerden que cada uno de ustedes vive
situaciones distintas y que juzgar la vida de un
compañero no ayuda en nada y tampoco hace
superior a nadie; al contrario, genera sensaciones
negativas entre el que juzga y el juzgado provocando
rencores que pueden contaminar su espíritu de niño,
un espíritu que siempre deben mantener en paz.
Tengo fe en que ustedes serán lo que sus
corazones dicten, que escojan lo que les apasiona
para que no vean su profesión u oficio como un trabajo
sino como una extensión de ustedes donde se sientan
felices y plenos. Deseo que lo que les haya podido
enseñar con el esmerado acompañamiento de sus
padres pueda reflejarse como frutos dulces en sus
4. Como bien decía mi papá “La educación es como un
árbol donde el aprendizaje es representado por las
amargas raíces necesarias para alimentar a éste,
pero que llegado el momento de cosechar los frutos,
estos son los más dulces y deliciosos que se puedan
comer”. Mi papá comprendía la magnitud de esta frase
y la tenía presente todos los días.
Sólo me queda decirles que me siento orgulloso
de tenerles como grupo. Que más allá de enseñarles
contenido deseo aprendan a vivir y amar la vida.
Atentamente
Prof. Damián Miguel Moreno Luna