2. ORTOGRAFÍA
La actual ortografía española empieza a codificarse desde el siglo XVIII, con el
establecimiento en 1727 de las primeras normas ortográficas por parte de la Real
Academia Española al poco tiempo de su fundación. Hasta ese momento las
vacilaciones en las grafías eran constantes: unos optaban por soluciones fonéticas,
tratando de adecuar su escritura a la pronunciación oral, y otros se decantaban por
criterios etimologizantes, manteniendo grafías que carecían de correspondencia en
la pronunciación del español de la época. El resultado era una falta de unidad que
dificultaba la comprensión.
Actualmente las 22 academias del español mantienen acuerdos que garantizan la
unidad ortográfica. De este modo, la edición de la Ortografía de la lengua
española (1999) fue la primera en ser elaborada con la colaboración consensuada de
todas las academias de América y de Filipinas.
3. REDACCIÓN
Existen 3 fundamentos de redacción básicos:
Corrección
Adaptación
Eficacia
La corrección asegura que un texto esté preparado para dar a entender su objetivo principal. Procura que al finalizar esté correctamente escrito
para la comprensión del lector; existen 4 tipos de corrección:
Ortográfica: Corrige errores de escritura, errores de dedo, falta de palabras o letras, procura correcta escritura de la palabra y corrige
puntuación.
Morfológica: Corrige todo lo que tiene que ver con accidentes gramaticales (el tiempo, el número y el género).
Corrección sintáctica: Corrige la coherencia del texto y se asegura que el lector comprenda el escrito según la intención del redactor. Tiene que
ver con la coherencia.
Corrección léxico-semántica: Procura que las palabras utilizadas en el texto concuerden con el tema, la intención u objetivo de escritura.
La adaptación procura que el texto sea adecuado para el público según el medio de comunicación a utilizar. El objetivo de redacción dependerá
del nivel socioeconómico, edad y cultura de dichos públicos seleccionados.
La eficacia se asegura de que el texto funcione, cumpla su propósito y en el caso de la redacción publicitaria: que venda. Este último elemento
es el más importante en la redacción puesto que si el texto no es eficaz no cumplirá su cometido.
4.
5. 5 CONSEJOS PARA ESCRIBIR
CORRECTAMENTE
1. Piensa sobre qué escribirás antes de escribir
No hacerlo es una equivocación que muchos cometen. Antes de sentarte a escribir asegúrate que tienes algo que decir y define
claramente cómo lo quieres expresar. No centres tu escritura en las palabras, sino en las ideas que quieres transmitir. Piensa: ¿Cuál
es el objetivo de este post? A partir de ello empieza a construirlo.
2. Puntos, puntos, puntos
Fue el primer consejo que me dio mi maestro de Periodismo. Para brindar una escritura fluida debes usar correctamente los signos
de puntuación. Evita los párrafos eternos de una sola oración. Y siempre que estés tentado a escribir una coma piensa si se puede
sustituir por un punto.
3. Dile adiós a los adjetivos y adverbios
Las descripciones son importantes para conseguir una buena narrativa, pero muchas personas abusan de los adjetivos y adverbios.
Revisa tu texto y observa todas las palabras que puedes eliminar (por ejemplo: muy, realmente, quizás, asombroso, increíble,
verdaderamente, justo). Como expresó el cuentista Horacio Quiroga “Inútiles serán cuantas colas de color adhieras a un sustantivo
débil”.
4. No repitas palabras
La amplitud de vocabulario, así como el nivel cultural de una persona se notan en el uso excesivo de palabras. Busca sinónimos o
conceptos que pudieran reemplazar lo que escribiste. Lo primero que debes hacer es encontrar tus muletillas (las palabras que
repites constantemente), buscarlas en tu texto con la funcionalidad en Word de Ctrl + B y cambiarlas por otras. El idioma español
es sumamente amplio; aprovéchalo.
5. Utiliza subtítulos o cabezas intermedias
Cuando realices un texto, sobre todo si es largo, piensa en dividirlo en subtemas y usar cabezas intermedias. Esto ayuda a
descansar la vista y a hacer más fluida la lectura.