1. Periódico-taller de los alumnos de la Escuela de Periodismo Carlos Septién García
Año 11, No. 54, NOViembre-Diciembre 2013
• OPINA • DIALOGA • PARTICIPA •
LA POLÍTICA
Blanche Petrich. Premio Nacional de Periodismo Carlos Septién García 2013
Foto: Cecilia Suárez
OPCIÓN
SOCIAL FOTOGALERÍA
Blanche Petrich recibe el
Premio Nacional de Periodismo
Carlos Septién García 2013
La institución destaca su compromiso social
y profesionalismo en la búsqueda de la verdad
La Escuela de Periodismo Carlos
Septién García concedió su quinto
premio anual de periodismo a su
exalumna Blanche Petrich More-
no, quien a lo largo de casi cuatro
décadas ha dejado muestra de su
quehacer profesional.
La entrega se llevó a cabo en el
auditorio de la Canaco de la Ciu-
dad de México, el 17 de octubre.
Estudiantes y profesores rindieron
homenaje a Blanche, en presencia
del director José Luis Vázquez; de
Yumin Montfort y José Alfredo Pá-
ramo, miembros de la Asociación
Cultural Carlos Septién García,
así como de los directivos Enrique
Mandujano, Víctor Villalva y Estre-
lla Velázquez.
Enrique Mandujano, director
Académico y de Recepción profe-
sional, habló sobre Blanche:
Dice José Martí, el poeta gue-
rrero, “cuando hay muchos hom-
bres sin decoro, hay siempre otros
que tienen en sí el decoro de mu-
chos hombres. Esos son los que se
rebelan con fuerza terrible contra
los que les roban al pueblo su li-
bertad, que es robarles a los hom-
bres su decoro. En esos hombres
van miles de hombres, va un pue-
blo entero, va la dignidad huma-
na”, y cuando es una mujer la que
lleva en sí el decoro de la sociedad
hay que reconocerlo y eso es lo
que hacemos este mediodía.
La primera vez que supe de
Blanche Petrich yo era apenas
poco más que un niño de secun-
daria. Entonces para mí el perio-
dismo era una actividad confusa
y difusa, a medio camino entre la
fama propia, y la oportunidad de
entrar gratis a cuanto lugar se me
ocurriera. Ni idea tenía de que ésta
es una profesión que conlleva una
responsabilidad social desde el
momento en que tomamos nota...
Continúa en la pág. 2
Pág. 5 Pág. 9 Pág. 23
Historias breves desde Guerrero
Ximena Natera
El valle
Las carreteras de Guerrero bien se pueden comparar con los trazos que hacen los niños pequeños cuando están
empezando a dibujar: curvas cerradas y líneas irregulares, en general, nudos. De vez en cuando y después de largos
ratos entre las montañas, se encuentra uno ante valles inmensos que se extienden por kilómetros. El paisaje es tan
deslumbrante que no se puede hacer más que mirar.
Tal vez por esto, percatarse del desastre que cubre los valles lleva un par de minutos. Lo primero que se delata
son los colores, septiembre y octubre son meses húmedos, todo alrededor debería ser verde, no lo es. Si bien las
montañas y los árboles tienen un color intenso, los grandes espacios de siembra están completamente cafés, tierra
seca, como si fuera tiempo de arado.
Observando un poco más, resulta evidente que la tierra está, de hecho, mojada por una especie de lodo muy
aguado. Al último llaman la atención las casas, o más bien, la ausencia de éstas. Quedan unas cuantas y están des-
trozadas, los restos forman mazacotes de tierra, basura y ladrillo distribuidos al azar.
Continúa en la pág. 7 Foto: Ximena Natera
2. DIRECCIÓN GENERAL:
José Luis Vázquez
DIRECCIÓN ACADÉMICA
Y DIRECCIÓN DE
RECEPCIÓN PROFESIONAL:
Enrique Mandujano
DIRECCIÓN DE
SERVICIOS ESCOLARES:
Víctor H. Villalva
DIRECCIÓN
ADMINISTRATIVA:
Arnoldo Meléndrez
EDITORES
LA POLÍTICA:
Estefanía Camacho y Manuel Velásquez
OPCIÓN SOCIAL:
Luisa Cantú
CIUDADES:
Mariana Díaz y América Vázquez
ECONOMÍA:
Patricia Carranza
MUNDO:
Juan Carlos Díaz de León y Edgar Ledesma
CULTURA:
Mariana Mier y Juan Ulises Gutiérrez
ESPECTÁCULOS:
Janneth Del Real
DEPORTES:
Luis Madrid y José Antonio García
CIENCIA Y TECNOLOGÍA:
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FOTOGRAFÍA:
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CORRECCIÓN:
Ángela Mariana Ávalos y Janneth Del Real
DISEÑO:
Rosario Ugalde, rosario.ugalde@nivelmas.com.mx
Blanche Petrich...
VIENE DE LA PORTADA
Directorio Soy Septién
COORDINACIÓN
DOCENTE DE POSGRADO:
Estrella Velázquez
coordinación
audiovisual Y
RADIO SEPTIÉN:
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PALABRA DIGITAL:
Analletzin Díaz
Diálogos • Noviembre-diciembre 2013
• 2
Diálogos es un periódico-taller de distribución gratuita realizado por los
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El contenido es responsabilidad de sus autores y no refleja,
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Se autoriza su reproducción total o parcial, siempre y cuando
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www.septien.edu.mx
Edición noviembre-diciembre 2013
COORDINADORA EDITORIAL: CORRECCIÓN:
Adriana Téllez Enrique Mandujano
...de una declaración y la pone-
mos por escrito o la difundimos de
manera electrónica o por radio o
televisión.
Entonces cursaba yo la secun-
daria y mi maestra de historia nos
instaba a leer un periódico de tí-
tulo intrigante, porque llevaba un
concepto incluyente. Unomásuno.
Aguerrido, contestatario, con di-
seño atractivo porque evitaba los
molestos pases a innumerables
páginas. Ahí, con textos sobre lo
que pasaba en Centroamérica, con
notas puntuales, escritas desde el
lugar de los hechos, casi ubicua,
aparecía un nombre: Blanche Pe-
trich. Ha de ser extranjera, pensé.
Una atleta de la información, está
en todos lados y de todo escribe.
Terminó el proyecto de ese Uno-
másuno ejemplar para dar paso al
triste espectáculo de un muerto
que se pudre ante nuestros ojos.
Blanche y un grupo de periodis-
tas veteranos, pero con ánimo de
seguir innovando, fundaron La
Jornada, que revitalizó la mirada
periodística y el aliento social.
Con el paso del tiempo encon-
tré el camino del periodismo y en
él de alguna manera seguí el tra-
bajo de Blanche. Ora en las mon-
tañas del sureste mexicano, ora en
el Sahara Español, o República Sa-
haraui, como ella mismo nos dijo
que es el nombre de esta parte de
África en donde se habla nuestra
lengua.
Blanche deja su huella en sus
notas. Siempre certeras, precisas.
Ella fija la mirada y hace que no-
sotros observemos también. Nos
surgen preguntas que ella contes-
ta. Es nuestra mirada y se vuelve
nuestra conciencia. De alguna for-
ma, ella encarna ese decoro que
debe tener una sociedad a la que
le han quitado todo, menos su ca-
pacidad de exigir la verdad.
Desde mi lugar como lector
imaginé a esa mujer que firmaba
con nombre extranjero. La vi in-
cansable, debía ser atlética, para
estar en todos lados, supuse; jo-
ven, por su inagotable curiosidad y
deseo no sólo por verlo todo sino
comprobar todo lo que le decían.
Ya conocía a algunos periodistas y
varios eran insoportables, celosos
de sus fuentes, de los datos que
han trabajado en el día y orgullo-
sos de sus roces con personajes de
la política y de la vida nacional.
El infinito laberinto de causas
y efectos, como dice Borges, dis-
puso que un día terminara yo en
La Jornada. Y entonces confirmé
lo que pensaba. Conocí un tor-
bellino de buen humor que de
pronto entraba a la redacción y
todos iban tras de ella. Oí su voz,
entre exigente y tierna. Siempre
firme. Y segura, exige datos, pre-
cisa frases. Y el eterno tecleo que
inunda su oficina. Por fin conocí
a Blanche.
En sus ojos vi la tierna curiosi-
dad siempre joven, pero también
el brillo del ave que tiene a su pre-
sa, sobre todo cuando detecta al-
gún abuso, alguna falla del pode-
roso. Su sonrisa desarma, tal vez
por eso logra que le den datos que
nadie más consigue. Y en su apa-
riencia frágil se esconde el alma de
una guerrera que ha peleado mil
batallas, y que tiene fuerza para
prestarla a quienes no nos atre-
vemos a abanderar una causa, o
para asestarle un golpe fatal con la
nota precisa al poderoso que bajó
la guardia, engañado por la tierna
imagen de Blanche.
Su trabajo la precede y la pro-
yecta. Lo que vio y contó de las
guerras en Centroamérica for-
maron su carácter, pero eso pasó
ayer. Hoy hay nuevas cosas que
decir. Los abusos a denunciar pa-
recen eternos, sólo se transforma
el protagonista. Pero ella sigue ahí,
con el ánimo de levantar la voz.
Las nuevas tecnologías no le son
ajenas ni sus formas de difundir la
información. Wikileaks la conside-
ró ideal para darle forma al caudal
de datos que tenía sobre México
y que ella difundiera lo que tenía
que decirse.
Qué mejor forma de aprender el
periodismo que con alguien que lo
ha vivido y encarnado. Por eso sus
enseñanzas van más allá, ya que
también ha sido maestra de ésta,
su alma mater. En el aula es gene-
rosa, comparte sus secretos, dice
lo que está investigando, revela
eso que nunca dice el reportero
estrella, porque ella no es estrella,
es la encarnación del periodista.
Carlos Septién García, de quien
conmemoramos el 60 aniversario
luctuoso y por quien la escuela y
este premio llevan su nombre, de-
cía que la misión del periodista es
buscar la verdad a cualquier cos-
to, aún el de su tranquilidad y su
propia vida. Blanche es ejemplo de
esto. Ha sacrificado su propia tran-
quilidad, su tiempo, su espacio,
que es la vida misma, por hacer-
nos un poco más conscientes, más
humanos. Por llevarnos la verdad
y ser ejemplo del periodismo com-
prometido, con el dato, con todas
las voces implicadas.
“En la medida en que un hom-
bre esté consagrado a esta misión,
en la medida en que se ocupe
de su vida, su tiempo, su trabajo
en la realización periodística, ese
hombre adquiere la dignidad del
periodismo”, decía Carlos Septién
como si ya supiera que íbamos a
estar este día honrando a quien
representa estas palabras.
Por tu búsqueda de la verdad
a cualquier costo, asumir el com-
promiso que esto conlleva y darle
decoro a estos tiempos de horror,
por ser un ejemplo de vida, gracias
Blanche.
Blanche Petrich Moreno agra-
deció a la comunidad Septién la
entrega de este reconocimiento:
Pocas actividades humanas son
tan gregarias y colectivas como el
oficio —o profesión, como se pre-
Foto: Mariana García
3. fiera llamarlo— del periodismo.
Este oficio que Gabriel García Már-
quez llamó el mejor del mundo,
ese que se aprendía en las salas
de redacción, en los talleres de im-
prenta, en el cafetín de enfrente,
en las parrandas de los viernes, en
las tertulias de las cinco de la tarde
donde se discutían en caliente los
temas de cada sección.
Antes y ahora, es muy común
y cotidiano ver a la reportera, al
reportero, trabajar en una asigna-
tura como un llanero solitario, an-
dando de acá para allá, hablando
con frecuencia consigo mismo y
encerrado hasta altas horas de la
madrugada frente al teclado. Pero
en realidad no hay periodista que
trabaje solo. Detrás de ella, o él,
siempre hay un colectivo que se
afana porque ese reportaje, esa
nota, esa entrevista de sus desve-
los salga a la luz al día siguiente.
Es por eso que este reconoci-
miento es también para todos los
jornaleros, mis compañeros de
afanes, pesares y alegrías, mis je-
fas Carmen Lira y Elena Gallegos,
mi jefe Josetxo Zaldúa, el equipo
completo.
Leíamos hace unos días la no-
ticia de que solamente en este
Distrito Federal nuestro, en sep-
tiembre (solo un mes) hubo 696
marchas y protestas en las calles;
casi un millón de personas parti-
ciparon. Seis terminaron en en-
frentamientos con los granaderos.
Y este es un recuento solamente
de la capital. Muchos otros brotes
se viven con intensidad en los es-
tados, otras ciudades y comunida-
des. ¿Qué nos dice este dato?
Mi lectura: México vive estas
horas con profunda incomodidad.
La protesta que sale a la superfi-
cie es apenas un síntoma de las
fracturas y frustraciones de nues-
tra sociedad, del fracaso de los
gobernantes, de la falta de vías de
interlocución. Para los centenares,
o miles, de colegas que caminan
al lado de estas manifestaciones
cumpliendo con la cobertura coti-
diana, el reto es enorme. ¿Cuáles
son las claves profundas de esta
efervescencia? ¿Cómo entenderla
y explicarla, cómo narrar el mo-
mento con la claridad indispensa-
ble para las audiencias atareadas
con los problemas de la sobrevi-
vencia diaria, intoxicadas con el
discurso distorsionador de los po-
derosos medios de comunicación,
distraídos con los dolores de cabe-
za del fútbol y los corazones rotos
de las telenovelas?
Sabemos, nos consta, que en
los noticieros de la noche y la ma-
ñana no es precisamente la ver-
dad la que se transmite; que con
frecuencia las razones de fondo
de esta agitación se ocultan y ter-
giversan, que el ruido mediático
silencia las voces plurales que re-
claman la atención de los poderes.
El mejor periodismo de nues-
tra época, que muchas veces va a
contracorriente de la información
que fabrican los grandes consor-
cios y la versión oficial, es aquél
que, desde hace años, ha corrido
el riesgo de ser un testigo incó-
modo para narrar, con veracidad
y cercanía, los hechos que han
jalonado nuestra historia recien-
te. El levantamiento zapatista y
su caminar en los pueblos indios;
las reiteradas luchas por una de-
mocracia real, sin fraudes ni votos
comprados; los campesinos que
defienden sus tierras de los mega-
proyectos y la minería —Atenco,
Wirárika, algunos de ellos—; los
trabajadores despedidos en masa,
(los electricistas); las decenas de
miles de familias dolidas por la
desaparición o el asesinato impu-
ne de sus seres queridos, que se
cuentan por carretadas, víctimas
del crimen organizado y las estra-
tegias fallidas para hacerle frente;
el magisterio amenazado por la vi-
sión neoliberal de la educación; los
estudiantes hartos de tener como
futuro un país anclado y que ex-
plotan en el grito del #Yosoy132.
Entre estas convulsiones traba-
jan los periodistas de esta genera-
ción, muchas veces son un saldo
fatal. No pueden dejar de estar
presentes hoy, en este momento,
la memoria de nuestros colegas
asesinados, en especial compa-
ñeros periodistas de los medios
provincianos que enfrentan en
situaciones límites la vida de vio-
lencia que ha deteriorado regio-
nes enteras. Los muchos “Regina
Martínez” a quienes no podemos
dejar de extrañar, los reporteros
que son amenazados, que han te-
nido que salir al exilio, los que han
tenido que callar, y también a ese
entrañable enjambre de reporte-
ros ciudadanos y fotorreporteros
golpeados y detenidos en los en-
frentamientos callejeros, pero que
nos aportan, con su trabajo y la
documentación generada, piezas
indispensables para ilustrar la rea-
lidad en la que nos movemos.
¿Cómo caminar en estas are-
nas movedizas? La historia del
periodismo nos regala numerosas
brújulas para no perdernos. Está
esa recomendación de oro del
enorme polaco universal Ryzard
Kapuscinski, que definió nuestra
tarea como el deber de informar
Soy Septién •
3 •
intencionalmente, de manera que
ayude a la humanidad y no fomen-
tando el odio o la arrogancia, para
fomentar el respeto del otro; el ver
nuestra labor como buscadores de
contextos, de las causas que expli-
can lo que sucede.
Vuelvo a García Márquez pen-
sando en el futuro que ya se nos
echó encima, con estas gene-
raciones que se empujan –dice
él—unas a otras; que cuando uno
acaba de hacer algo ya se perfila
alguien que amenaza con hacerlo
mejor. En 1996 advertía contra los
riesgos del “esplendor tecnológico
y el vértigo de las comunicacio-
nes”. ¡Y se refería a la grabadora
de cassette, al télex y otros objetos
de museo.
¿Qué decir, a estas alturas, del
avasallamiento del periodismo
de la revolución tecnológica o .0,
como le dicen? ¿De esa herramien-
ta maravillosa que es el internet y
sus redes sociales, plataformas que
nos obligan a diario a reinventar-
nos, a crear nuevos lenguajes, a
movernos más rápido, a ir más le-
jos? ¿Del imparable cambio de há-
bitos de las sociedades, que cada
vez acuden menos a los medios
tradicionales y más a los digitales
para tomarse el café, el pan y las
noticias de cada día? Herramientas
que también son amenaza, son un
peligro de que prive la mediocri-
dad, la pobreza de la palabra escri-
ta o pronunciada y donde ¡aguas!
la mentira suele correr mucho más
veloz que la verdad.
El antídoto, en la mirada del
Gabo, no parece tan complicado.
Me atrevo a enunciarlo aquí, para
esos periodistas jóvenes, todo-
terreno que hoy nos rodean, tan
hábiles para la tecnología pero con
frecuencia –y cito a García Már-
quez—“parecen desvinculados de
la realidad y de sus problemas vi-
tales”. Mantengan las condiciones
más importantes del periodismo
de calidad: la creatividad y la prác-
tica. Y desde luego, la curiosidad
inagotable por la vida.
Gracias •
Estudios incorporados a la SEP
Maestrías:
•Periodismo Político
RVOE SEP Acuerdo 2007128 del 19 de febrero de 2007
•Periodismo Económico
RVOE SEP Acuerdo 2007127 del 19 de febrero de 2007
Con duración de seis trimestres (18 meses efectivos) en
clases presenciales los sábados en horario de 9 a 15 horas
Escuela de Periodismo Carlos Septién García
Iniciamos clases en marzo y octubre de cada año
Foto: Mariana García
Foto: Cecilia Suárez
4. La censura de la violencia
Manuel Velásquez
Justicia para
Lucero y los
feminicidios en
Guanajuato
Estefanía Camacho
Éste es el testimonio de Alejan-
dro Medina, fotoperiodista de la
Agencia Oochel, agredido por gra-
naderos, el 2 de octubre: “Cuando
pregunté el motivo de mi deten-
ción un policía me dijo: ¡nos an-
das tomando fotos!, andas en tus
desmadres, nos agredes, así que
camínale”. A la altura de la Aveni-
da Juárez, detrás de la valla de gra-
naderos, fui entregado a un policía
que me despojó de mi casco, me
trasladó a jalones y empujones a la
calle Balderas hasta llegar al cruce
con Independencia, esquina con
Azueta, donde me presentó ante
el comandante que había ordena-
do mi detención, según escuché.”
Información tomada de Artículo
19: El pasado 2 de octubre fue el
detonante. Se veía venir, pero na-
die estaba seguro de cuándo, ni
de cómo ocurriría. Las manifesta-
ciones en el último año habían ido
subiendo de tono, grupos de per-
sonas las han violentando desde
“Perdón su señoría, por hacerle
perder el tiempo; a usted licen-
ciado, por haber tenido que leer
todas las inmoralidades que he
cometido; y a Miguel, sobre todo,
por haberlo provocado…” pidió
María de la Luz Salcedo Palacios,
más conocida como Lucero, vícti-
ma de violencia y casi violación en
Guanajuato, después de que la jue-
za Paulina Iraís Medina Manzano
calificara el ataque como un “faje”
y pusiera en libertad al agresor
para enfrentar el proceso penal.
Las lesiones causadas a Lucero
y los abusos erótico-sexuales que
le fueron imputados a su agre-
sor confeso Miguel Ángel Jasso
Manríquez, no están tipificados
como graves en el Código Penal
de Guanajuato.
“Perdón por haber provocado a
Miguel, por haberle causado eno-
jo al decirle que no”, siguió Lucero
en una carta dirigiéndose a Miguel
Ángel, el perpetrador confeso. “Él
se disculpó por haberme casi ma-
tado, por haberme hecho pasar
por, sino el peor, uno de los peo-
res días de mi vida…”, escribió la
joven de 18 años, describiendo en
sencillas oraciones por lo que pasa
47.1% de mujeres que sufren vio-
lencia en México cada año, según
el Instituto Nacional de Estadística
y Geografía.
Además, a pesar de que ella fue
la agredida una noche en la que
recibió golpes por negarse a te-
ner relaciones sexuales con Jasso
Manríquez, después de que fue
asfixiada y golpeada en la cara,
el abogado de su agresor, Héctor
Corona Vieyra, todavía la calificó
como “inmoral”, ya que Lucero
perdió la “virginidad” a los 17
años. Cabe señalar que la joven
llegó a denunciar el mismo día de
su ataque al Ministerio Público y
hasta una semana después co-
menzó la investigación.
Lucero se alegra de no haber
entrado en la cifra de feminicidios
cometidos este año en Guanajua-
to que registra la cifra más alta a
comparación de otros años y que
aún no concluye. Más de 50 mu-
jeres han sido asesinadas durante
2013 en el estado gobernado por
Miguel Márquez Márquez, según
la ONG “Centro Las Libres”.
Tan sólo en 2006 y 2007 ocu-
rrieron 66 feminicidios; en 2008
ascendieron a 43; en 2012 se re-
portaron 57 casos, y en lo que va
de 2013 con la cifra más alta: 59.
Sin embargo hasta ahora el
gobernador de Guanajuato que
pertenece al Partido Acción Nacio-
nal, desestimó la cifra de mujeres
ejecutadas al decir que eran 12
feminicidios y que hay más de 20
estados arriba de ellos, por lo que
no es un número para declarar
alerta de género para el Gobierno
estatal.
Según el INEGI, en la sociedad
mexicana 29% dijo estar de acuer-
do con que “si hay golpes o maltra-
to en casa es un asunto de familia y
ahí debe quedar”; 16.8% también
estuvo de acuerdo con que “una
esposa debe obedecer a su esposo
o pareja en todo lo que él ordene”;
14.7% igualmente expresó estar
de acuerdo con “es obligación de
la mujer tener relaciones sexuales
con su esposo o pareja”.
Sólo 14% de las mujeres que
sufren violencia han incurrido al
instrumento de la denuncia. Y de
las mujeres casadas que no de-
nunciaron, fue por motivos como
la creencia de que se trató de algo
sin importancia (72.7%), por ver-
güenza (9%), por sus hijos o por-
que la familia la convenció de no
hacerlo (8.9%), porque él le dijo
que cambiaría (8.8%), por miedo
(7.0%), porque no sabían que po-
día denunciar (6.1%) y porque no
confían en las autoridades (4.3%).
Ana Karen, una adolescente de
17 años que fue víctima de múl-
tiples violaciones, al denunciar su
caso dijo que la mujer al frente de
Unidad de Investigación de Deli-
tos Graves le dijo que como ella
“no puso resistencia” no contaba
como violación.
De la misma forma, sigue im-
pune el caso de Laura, una mujer
asesinada por su esposo, al que
denunció previamente tres veces
por violencia intrafamiliar.
También está el caso de una
estudiante de economía, que fue
encontrada muerta en el Cerro de
las antenas, en la sierra de Santa
Rosa. Después de 4 días de estar
desaparecida, la Procuraduría Ge-
neral del Guanajuato determinó
que la joven por “voluntad propia
y sin intervención de un tercero”
decidió suicidarse. Su madre indig-
nada respondió a las autoridades
que se trata de un “suicidio nada
creíble”, pues las autoridades no
recabaron información sobre si el
cuerpo presentaba o no signos de
violencia, ni cómo sobrevivió los 3
días sola en la sierra antes de su-
puestamente cometer el suicidio,
y poniendo en duda la efectividad
de las autoridades.
¿Falta de leyes
o de cultura de
prevención?
La ley existe. Fue aprobada en
noviembre de 2010 como Ley de
Acceso a las Mujeres a una Vida
Libre de Violencia y establece, en-
tre otros puntos, que el Gobierno
de Guanajuato y municipios deben
orientar políticas públicas para RE-
CONOCER, PROMOVER, PROTE-
GER Y GARANTIZAR el derecho
a las mujeres a una vida libre de
violencia.
Si uno de los principales puntos
es violado por el mismo goberna-
dor de la entidad al negar cifras,
subestimarlas y no reconocerlas
como política pública, se puede
esperar que se violen más puntos
importantes de la ley y que las
mujeres enfrenten irregularidades
y omisiones importantes en sus
casos •
Diálogos • Noviembre-diciembre 2013
• 4
el 1 de diciembre de 2012, el día
de la toma de posesión de Enrique
Peña Nieto.
A partir de ese momento, la vio-
lencia estallaría en tres momentos
más: 10 de junio, 1 de septiembre
y 2 de octubre. Todos en 2013.
Algo preocupante, ya que nunca
antes se había dado una dinámica
de ese tipo en la Ciudad de Mé-
xico. En los medios tradicionales
se les tachó a los incitadores de
la violencia como “anarquistas”,
aunque la etiqueta queda en
duda. Además, cabe destacar que
en dos de las fechas, 10 de junio
y 2 de octubre, fueron marchas
conmemorativas del 71 y del 68,
respectivamente.
Lo preocupante de las cuatro fe-
chas, es que hubo un componente
que también fue creciendo con-
forme iba pasando el tiempo: la
agresión a periodistas y comunica-
dores. Donde el saldo documenta-
do de la marcha del 2 de octubre,
según la organización Artículo 19,
fue de 49. De los cuales, 32 agre-
siones fueron por parte de policías
y tres por personas con “actitud
de policía”, llevaban radios y man-
tenían comunicación con los cuer-
pos policíacos.
Una cifra preocupante, si con-
sideramos que las agresiones por
parte de policías fueron 65% del
universo total. A pesar de que
previamente, la organización no
gubernamental Artículo 19 había
iniciado una campaña con el nom-
bre “Rompe el miedo”, en la que
pretendía tener un monitoreo más
amplio de seguridad para los pe-
riodistas que fueran a hacer la co-
bertura sobre la marcha, dadas las
circunstancias que se presentaron
en las manifestaciones anteriores.
El gran problema es que los pe-
riodistas y comunicadores encarga-
dos de difundir la información a la
ciudadanía no pueden desempe-
ñar sus funciones adecuadamente,
La Política
lo que lleva a que se vea obstruida la libertad de expresión. Una garantía
fundamental en un estado democrático.
La respuesta del Gobierno del DF fue poco alentadora para los que ejercen
la profesión. Prometieron investigar y castigar a los elementos que se vieron
involucrados. No hablaron de programas de capacitación a policías, tampoco
mencionaron futuros monitoreos para evitar este tipo de agresiones.
Las marchas seguirán existiendo y la policía seguirá teniendo excesos. Al
menos en lo que lo que resta de esta administración recién iniciada de
Miguel Ángel Mancera. Pocas son las opciones para los comunicadores. La
más acertada, hasta el momento, es prepararse y tomar cursos que ayuden
a disminuir los riesgos durante coberturas de riesgo. Aunque nunca se va a
estar exento de ser víctima de la violencia. La profesión del periodista es una
que siempre va a estar plagada de peligros.
Mientras que Miguel Ángel Mancera y la Secretaría de Seguridad Pública
del DF protegen a sus elementos, hay algo que queda en claro: en México,
y en el DF, poco importa si eres periodista o “anarquista”, de todas formas
sigues siendo un objetivo a silenciar •
5. Años de atraso en la cultura
de prevención de desastres
naturales en México
Estefanía Camacho
En menos de un mes se regis-
traron 171 casos de cólera en el
país. Es una cepa que se asemeja
en 95% a la que provocó el bro-
te de la enfermedad en Haití tras
el terremoto que sufrieron hace
tres años. La epidemia comenzó
a esparcirse semanas después de
que los huracanes “Ingrid” y “Ma-
nuel” golpearon Guerrero, Vera-
cruz y Oaxaca.
Las fotos no mienten, el impac-
to alcanzó una magnitud inimagi-
nable. En parte por las fuerzas de
los dos fenómenos naturales que
ocurrieron simultáneamente y en
parte porque las autoridades mi-
nimizaron el impacto que tendrían
en el territorio mexicano.
“Ingrid” y “Manuel” fueron
previstos por la Administración
Nacional Oceánica y Atmosférica
de Estados Unidos (NOAA, por sus
siglas en inglés), ya que México
no cuenta con su propio sistema
de alertas. Sin embargo, el coor-
dinador nacional de Protección
Civil, Luis Felipe Puente, anunció
la “probable” gravedad de los he-
chos el mismo día que entró “In-
grid” a Guerrero.
El secretario de Gobernación,
Osorio Chong, afirmó posterior-
mente en una conferencia de
prensa, que Protección Civil sí ha-
bía emitido alertas a través de su
página web y en redes sociales de
las zonas que se verían afectadas.
Sin embargo, las críticas no
tardaron en lloverle a Luis Felipe
Puente, en cuanto a que algunas
comunidades que se vieron seve-
ramente perjudicadas no tenían
acceso a estos medios. Que en rea-
lidad, son pocos los poblados que
siquiera tienen servicio de energía
eléctrica. Pueblos a los que apenas
el programa de la Secretaría de
Desarrollo Social alcanzó a incluir
en la Cruzada contra el Hambre.
Mientras millones de mexicanos
celebraban en sus casas o en los
palacios municipales El Grito del
15 de septiembre, miles intentaron
sobrevivir las fuertes lluvias que
inundaban sus viviendas e intenta-
ban llegar a los albergues más cer-
canos, aún con los deslaves en los
caminos que sepultaron a muchas
personas más.
Incluso la prensa extranjera tildó
de “negligencia” por parte de las
autoridades el no informar a tiem-
po sobre el verdadero peligro que
representaban estos fenómenos
naturales. Además que exhibieron
a los funcionarios correspondien-
tes al ilustrar que las 157 pérdidas
humanas, las pérdidas económicas
y el desastre en sí, pudieron haber-
se evitado.
Señalar sirve de poco o casi
nada después de que pasó la tor-
menta, el gobierno federal aún
demostró papeles donde a través
de boletines y llamadas telefónicas
alertaron a los gobiernos estata-
les. Sin embargo, muchos alcaldes
de Guerrero, dijeron no haber di-
mensionado el problema y que
incluso, “rebasaron sus expecta-
tivas”, como expuso el alcalde de
Tecpan en Costa Grande, Crisófo-
ro Otero Heredia.
Otra de las explicaciones que
Felipe Puente dio es que el sistema
internacional de Estados Unidos es
quien se encarga de alertar a Mé-
xico sobre los fenómenos hidro-
meteorológicos, posteriormente
notifica a la Comisión Nacional del
Agua (Conagua), que lo certifica
y es cuando se emiten las demás
alertas a las autoridades corres-
pondientes federales y estatales.
Esto, ya que México no cuenta
con la inversión suficiente ni equi-
pos de prevención nacionales, por
lo que tiene que depender de Es-
tados Unidos en este aspecto. A
pesar de que Peña Nieto destacara
en su primer informe (que dio 15
días antes de que los desastres
naturales pegaran a los estados
mexicanos) que el Sistema Nacio-
nal de Protección Civil buscaba
una “estrategia equilibrada” para
prevenir y mitigar consecuencias
adversas por desastres naturales.
Asimismo, las autoridades que
apenas tomaron sus puestos en
este año con el sexenio entrante
no deben ser las únicas señaladas
en los sucesos. Y es que las edifica-
ciones en las zonas más afectadas
tan sólo en Guerrero, no tenían los
permisos correspondientes para
realizarse o ignoraban el hecho
de que estuvieran erguidas sobre
lagunas secas o puntos que repre-
sentaban un peligro para sostener
semejantes instalaciones.
Muchos puntos de Acapulco,
por ejemplo, fueron construidos
en la década de los setenta, por lo
que es desde ahí donde comienza
la falta de cultura de prevención,
sobre todo en planeación urbana.
La corrupción, reina
de todos los males
Algunos permisos para la edifica-
ción de zonas urbanas han sido
concedidos sin examinar previa-
mente las condiciones de las tierras
y sin ser certificadas como zonas
seguras, como que se encuentren
a la distancia suficientemente lejos
de ríos o caudales; o en puntos de
riesgo donde puedan existir desla-
ves o aludes.
Osorio Chong afirma que la ex-
pedición de estos permisos deben
ser investigados y sancionados,
pues refirió que algunos eran ne-
gocios políticos y que catalogó
como “actos de corrupción que
se han dado a la luz de una serie
también de unidades habitaciona-
les”, como las que se construye-
ron en Punta Diamante en 1990,
cuando Francisco Ruiz Massieu era
gobernador.
Los caminos y carreteras que
conducen específicamente a Gue-
rrero también son una gran fuen-
te de inversión cada que se les da
mantenimiento, ya que suele ser
muy constante. Sin embargo, la
La Política •
5 •
Diego Martínez
¡Toma lo bueno!, afirma una voz convincente, mientras que con le-
tras blancas pequeñas se lee: “Haz ejercicio”, éste es uno de los tantos
slogans que la compañía Coca-cola propaga. A raíz de la propuesta de
subir el IVA al refresco y a los productos chatarra, han bombardeado
con anuncios en los que promueven una imagen familiar y a su pro-
ducto como algo noble.
Cabe señalar que México hoy en día ocupa el primer lugar en obesi-
dad, esto genera diversos problemas. Uno de ellos es la saturación de
hospitales gubernamentales por enfermedades derivadas de la obe-
sidad, como la diabetes. También representa un fuerte gasto; debe
hacerse algo pronto.
Más allá de aumentar el IVA a estos productos, se debe educar.
Desde las escuelas y en los medios de comunicación. No basta con au-
mentar las horas de educación física si en los recesos venden cualquier
cantidad de alimentos con alto contenido calórico. No sirve de nada
que cuesten más unas gomitas si en cada corte comercial de cualquier
programa aparecen anuncios promoviendo el consumo de las mismas
gomitas y de muchos otros productos chatarra.
De vez en cuando la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco)
suspende algunos anuncios por considerarlos “publicidad engañosa”,
pero esos son casos aislados.
Mientras tanto seguimos escuchando y viendo cifras verdaderamen-
te graves, 42 mil millones de pesos se gastaron en 2008 para combatir
la obesidad y de seguir las cosas así esta cantidad se duplicará en 2017,
según la Secretaría de Salud.
La publicidad continúa su curso, en los espectaculares de la calle, en
el cine, en la tele, en los periódicos, en radio, en revistas y demás. Los
niños crecen comiendo chatarra, desarrollando problemas de salud
y transmitiendo la mala forma de alimentación de una generación a
otra.
Se ve positivamente al Osito Bimbo, al igual que el gansito de Ma-
rinela, los helados de Holanda, el famoso eslogan: “A que no puedes
comer sólo una” de Sabritas, y por supuesto los refrescos. Aunado a
las compañías de comida rápida que tampoco destacan por sus ali-
mentos saludables; por ejemplo: Subway, KFC, Carls Jr., Mc Donalds,
Dominos Pizza, entre otras más.
La solución no será fácil ni se dará en un lapso de tiempo corto. Lo
que sí debe suceder es una reacción inmediata. La primera que podría
dar buenos resultados es la que dio a conocer Mikel Arriola, titular
de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios
(Cofepris), que consta en prohibir los anuncios de comida chatarra en
horario infantil. Es decir, de lunes a viernes de las 14:30 a las 19:30
horas, sábados y domingos de las 7:00 a las 19:30 horas.
“Toma lo bueno” es irónicamente una buena frase, necesitamos to-
mar lo bueno y comer lo bueno. Esto, por supuesto, no incluye comida
chatarra •
Un problema
redondo
Autopista del Sol que conecta a la
Ciudad de México con Acapulco,
es prueba de que muy a pesar de
las cifras que se invierten para su
manutención, no resisten fuertes
deslaves o incidentes de este tipo.
Lo que provocó por lo menos
que 40 mil turistas se quedaran
varados e incomunicados en las
zonas afectadas y sólo se pudiera
llegar por vía aérea (cuando los
aeropuertos estuvieran lo suficien-
temente acondicionados).
Asimismo, el diario estadouni-
dense The New York Times pu-
blicó un reportaje que tituló “En
México, los críticos dicen que la
corrupción política empeoró el im-
pacto de ambas tormentas” y cri-
ticó la falta de experiencia de las
autoridades mexicanas en México
a pesar de haber tenido las mis-
mas consecuencias en desastres
naturales que afectaron al país
previamente.
Como la inundación histórica
que azotó a los estados de Ta-
basco y Chiapas en 2007, cuando
incluso la Organización de las Na-
ciones Unidas (ONU) alertó sobre
las desastrosas consecuencias y
lamentó el millón de damnificados
que dejó, pues pudo haber sido
prevenida •
6. Diálogos • Noviembre-diciembre 2013
• 6
Michoacán, episodios de horror
Manuel Velásquez
Derechos humanos,
tarea pendiente
Manuel Velásquez
Cuando se habla de Michoacán,
en años recientes, resulta una ma-
raña de opiniones, argumentos y
sucesos que son difíciles de entre-
lazar. Un estado que ha recibido
un brutal castigo por parte de la
delincuencia organizada, no por-
que sea el único ni el que tenga
la tasa más elevada de homicidios,
sino por la violencia que han visto
sus habitantes y el tiempo que lle-
va presente.
Desde 2006, año en que salió
a la luz la Familia Michoacana, el
estado ha visto un incremento en
la violencia. La tasa de homicidios
en el estado se elevó drásticamen-
te. Según las Cifras de Incidencia
Delictiva del Sistema Nacional
de Seguridad Pública, de 2000 a
2005, hubo en el estado 2 mil 703
homicidios dolosos.
De 2006 a 2012, la cifra se elevó
a 4 mil 670; más el año que va en
curso. Pero el promedio no mien-
te: en el primer periodo, la cifra
fue de 450; en el segundo fue de
667 homicidios al año.
Esto es debido a la confluencia
de los diversos grupos de la de-
lincuencia organizada en el esta-
do. Cabe recordar que a partir de
“México se presenta a la se-
gunda evaluación del Examen Pe-
riódico Universal (EPU) como un
Estado que ha logrado avances
trascendentales para garantizar la
promoción, protección y defensa
de los derechos humanos, y que
está decidido a no sufrir retroceso
2006 entraron en pugna el grupo
de los Zetas, quienes controlaban
el territorio, con el de la Familia
Michoacana, grupo que surgió ex-
plícitamente para “expulsar” a los
Zetas.
Tras la muerte de Nazario More-
no, líder de la familia, en 2010, se
formó el grupo de los Caballeros
Templarios, encabezado Servando
Gómez Martínez y Enrique Plan-
carte, quienes hicieron una guerra
abierta en contra del cártel de la
Familia Michoacana, lo que gene-
ró más violencia a la cual hay que
sumar los enfrentamientos con las
fuerzas federales, en donde la ca-
pital del estado, Morelia, estuvo
prácticamente sitiada, así como
varios de los municipios más im-
portantes en el estado.
A la entrada del gobierno de En-
rique Peña Nieto, se delimitó que
la estrategia de seguridad se en-
focaría, en gran parte, en Michoa-
cán, como lo expresó en diversas
ocasiones el Ejecutivo Nacional.
Debido a la presión mediática que
se venía gestando desde el gobier-
no de Felipe Calderón, quien no
pudo controlar la violencia en su
estado natal.
alguno en esta materia, gracias al
trabajo conjunto entre los poderes
del Estado, la sociedad mexicana
y la comunidad internacional”,
así llegó México ante la segunda
ronda del EPU ante el Consejo de
Derechos Humanos de la ONU en
Ginebra. Una afirmación que deja,
Sin embargo, a un año de que
Peña Nieto haya tomado posesión
de la Presidencia, el grado de vio-
lencia no disminuye, al contrario,
aumentó. En 2012 según el INEGI,
hubo un total de 826 homicidios
en Michoacán.
En lo que va de 2013, ha habido
más de 600 y contando. A estas
cifras hay que aumentar un factor:
el resurgimiento de grupos auto-
denominados como autodefen-
sas, quienes en el último año han
jugado un papel clave en el equi-
librio de fuerzas, ya que ahora no
sólo se da entre grupos criminales
o contra los elementos federales,
si no que habitantes de las co-
munidades han decidido tomar la
seguridad pública en sus propias
manos.
El gran problema que vive el
estado de Michoacán es que tras
7 años de vivir en una vorágine
de violencia que parece no tener
fin, las instituciones estatales se
han debilitado enormemente, más
aún con la ausencia del goberna-
dor Fausto Vallejo, quien pretende
“gobernar” una entidad que se
encuentra inmersa en una crisis
muy profunda.
cuando menos, con serias dudas
acerca de lo que el Gobierno Fe-
deral quiere que sea la imagen de
México ante el mundo.
Sin embargo, la ONU, sí dejó en
claro que al país le queda mucho
por avanzar en materia de derechos
humanos. En total se hicieron 176
Peor aún, el Gobierno federal, se ha mostrado sumamente inefectivo al
tomar las riendas del control de la seguridad del estado y la incapacidad
operativa ha llegado al grado de que se embosque y asesine a un contra-
almirante —equivalente a general brigadier— de la Secretaría de Marina,
comandante de la Octava Zona Naval.
Esta radiografía no favorece nada al estado, a pesar de los intentos de
recuperar el control, pareciera que cada vez se hace más difícil esta tarea.
Para bien o para mal, los grupos de autodefensa han marcado un alto a los
grupos de la delincuencia organizada, pero a un costo muy alto, en donde
los enfrentamientos cada vez son más seguidos y cruentos.
Los grupos de autodefensas tienen recursos limitados y ningún apoyo
más que el de la comunidad. En cambio, los cárteles tienen a su disposición
entrenamiento, armas y recursos ilimitados y hasta algunas autoridades a su
favor para su protección.
Parece que las imágenes de cuerpos mutilados y amontonados sobre una
carretera o las de enfrentamientos en comunidades, las narcomantas y los
ataques a instalaciones de empresas privadas o estatales van a seguir y no
se ve para cuando pueda acabar •
Matutino:
• Lunes Mexvolución 13:00
• Martes Pambología 13:00
• Miércoles Warika Reload 13:00
Todo ese jazz 13:30
• Jueves Común Denominador 13:00
• Viernes Disonancias 13:00
Vespertino:
• Lunes Deporsound 17:00
• Martes Autos en Movimiento 17:00
• Viernes Deporsound 16:00
Referente Radio 17:00
recomendaciones, por 87 países.
Entre las que destacan: mayor pro-
tección a periodistas y comunica-
dores, las desapariciones forzadas
así como la impunidad alrededor
de ellas, revisar la figura del arraigo.
Temas como el feminicidio,
desigualdad, violencia de género,
discriminación a mujeres e indí-
genas, fuero militar, derechos de
migrantes, desigualdad social y los
casos de tortura tampoco faltaron
dentro del documento emitido por
el Consejo de Derechos Humanos
de la ONU.
La Secretaría de Relaciones
Exteriores dijo que el gobierno
mexicano los va a estudiar con un
plazo hasta marzo de 2014, antes
de que inicien la vigésimo quinta
sesión del Consejo de Derechos
Humanos de la ONU, para infor-
marle sobre las recomendaciones
que aceptan y van a trabajar.
Cabe recordar que en 2009, du-
rante la administración de Felipe
Calderón, se hizo el mismo ejer-
cicio, el primero en su tipo para
México y en esa ocasión recibió
91 recomendaciones, de las cua-
les aceptó 83, rechazó tres y dejó
pendientes cinco.
La situación actual del país deja
mucho qué desear. Al gobierno
ya le resulta muy difícil maquillar
y ocultar las violaciones a los de-
rechos humanos como lo han de-
nunciado organizaciones no gu-
bernamentales y la sociedad civil.
Más ahora con la inclusión de las
redes sociales a la opinión públi-
ca y como forma de información
alternativa a los medios tradicio-
nales.
Además que casi 20 países re-
comendaron a México fortalecer
su Mecanismo de Protección de
Periodistas y Defensores de Dere-
chos Humanos, así como propor-
cionar más apoyo económico en
esta materia para proteger a los
periodistas y comunicadores.
Otros 17 países insistieron tam-
bién a las autoridades mexicanas
en enfocarse a la erradicación de
la violencia de género, en hacer
efectiva la sanción al feminicidio y
que todos los estados reconozcan
la tipificación de este delito.
El reto para la administración
de Enrique Peña Nieto no va a ser
sólo acatar las recomendaciones,
si no verdaderamente ponerlas en
práctica e impulsar políticas de
estado que apuntalen lo que ya se
ha avanzado. Son buenas y boni-
tas intenciones en organismos de
“vigilancia” que no tienen auto-
nomía y capacidades para imple-
mentar mecanismos adecuados
para evitar que se violenten los
derechos fundamentales de los
mexicanos.
El panorama no es muy alenta-
dor, y es que desilusiona saber que
un día antes de la comparecencia
de México ante la ONU, Peña Nie-
to mandó tres iniciativas pendien-
tes relacionadas con los derechos
humanos al Senado. También va-
rias organizaciones de la Sociedad
Civil sacaron informes en el marco
de EPU, en donde recalcan el in-
cremento a la violación de los DH •
7. Opción Social •
7 •
Historias breves desde Guerrero
Fotos de Ximena Natera
VIENE DE LA PORTADA
Opción Social
Valle adentro, lodo mezclado
con basura cubre miles de plan-
taciones de maíz completamente
formadas, que en condiciones
normales alcanzarían los dos me-
tros de altura.
No importa qué dirección to-
mes, la escena es una variación de
la misma, campos enteros listos
para cosechar destrozados y entre
estos, esporádicamente, una per-
sona aparece sumergida hasta las
rodillas en fango y con una cesta
en mano mientras espulgan ma-
zorca por mazorca, en busca de
sobrevivientes.
El superviviente
Quechultenango. Afuera el cielo
tronaba, las palmeras se partían a
la mitad por los rayos, el ganado
era arrastrado por las causes cre-
cidas del río y la estrechísima ca-
rretera que comunica el pueblo de
Santa Fe con el balneario empeza-
ba a desaparecer bajo toneladas
de tierra desprendida del cerro,
pero de esto Isidro y Socorro no
escucharon nada.
Fue hasta que el gallo, sin nom-
bre, de 5 años que tienen en su
propiedad entró por una ventana y
empezó, más ruidoso que de cos-
tumbre, a cantar.
Socorro, dormida, le dio un ma-
notazo en la pierna a su esposo
para que sacara al animal. Isidro,
adormilado y confundido, se le-
vantó a oscuras de la cama, fue
cuando bajó la primera pierna del
colchón sintiendo el agua hasta la
rodilla que se despertó por com-
pleto y se percató de los sonidos:
cielo tronando, troncos cayendo al
suelo, los animales, al igual que el
gallo, en un total frenesí.
Vio, con ese particular efecto de
estrobo que provocan los rayos,
cómo dentro de su pequeña casa
de adobe la televisión, las sillas, fo-
tos, trastes, zapatos, todo flotaba
alrededor. Como por las ventanas
abiertas y por los cachos del techo
que se habían desprendido el agua
entraba a chorros. En particular vio
como sobre un viejo buró de ma-
dera, estresado y mojado, el gallo
no cerraba el pico.
Despertó a Socorro y tan rápi-
do como pudieron, después de un
par de intentos fallidos de atrapar
al animal, salieron de ahí. Afuera,
lo que antes había sido una área
de recreación para la clientela con
un gran jardín con palapa, una co-
cina y restaurante, una pequeña
cancha de “fucho” y una alberca
donde en temporada alta atien-
den hasta 300 turistas se había
convertido en una extensión del
río Azul, que horas antes termi-
naba a buenos 200 metros de la
propiedad.
De alguna forma, la verdad es
que no están seguros del cómo,
caminaron por la destrozada ca-
rretera cerro arriba y llegaron a ca-
sa de su hijo. Pasaron las restantes
horas de la madrugada en vela, in-
tentando mantenerse secos, difícil,
ya que incluso ahí las paredes más
que impedir la entrada de la lluvia
parecían transportarla y los fuertes
vientos terminaron por romper los
vidrios.
Pasaron casi dos días antes de
que el río regresara a algo pare-
cido a su cauce natural, dejando
tras de sí toneladas de basura y
otro par antes de que, a falta de
ayuda gubernamental, los hom-
bres del pueblo y a mano limpia
lograran abrir paso en la destro-
zada carretera.
Bajaron caminando, el trayec-
to de 15 minutos fue de casi tres
horas y cuando por fin llegaron a
su terreno, el nivel del agua que el
río había alcanzado y pintaba una
línea en las paredes, llegaba casi a
los dos metros, unos 25 cm más
alto que el nivel del lodo que cu-
bría todo el terreno. Sobre la total
destrucción de lo que ha sido su
hogar por más de 30 años, la tex-
tura asquerosa del lodo en el cuer-
po y la pestilencia que dejó el agua
estancada encontraron a un único
ente vivo: Negro por el lodo y mo-
lesto el gallo sin nombre, estaba
parado sobre el techo de su mo-
desta casa, cantando a manera de
grito de auxilio y reclamo. “Creo
que ahora merece un nombre. Ca-
nelo estaría bien” Dice Isidro un
mes después, mientras con la pala
saca poco a poco el lodo que aún
cubre casi un metro de su hogar.
Los damnificados:
“a Santa Fe
nadie ha llegado”
Santa Fe Quechultenango, Gue-
rrero. María Natividad ahorró has-
ta el último centavo posible duran-
te todo julio y agosto. Al 13 de septiembre, tenía ya una buena cantidad
de dinero y como cada año, lo gastó todo en carne. Suficiente como para
embutir dos refrigeradores enteros de ella, mucha cerveza y litros y litros
de Coca-cola.
Con tantita suerte, la venta del fin de semana patrio le daría suficiente
para hacer un colchón de dinero que la respaldara hasta la siguiente época
festiva, la Navidad. No es sorpresa entonces, que agache la cabeza y entre
lágrimas diga que lo que pasó la madrugada del 15 fue cuestión de pura
mala suerte: Azul, el río que bordea el balneario de Santa Fe, el centro
turístico más importante de la región centro en Guerrero, se desbordó en
cuestión de minutos.
Alrededor de las 12, el agua llegó casi 100 metros tierra adentro y el
local de María, una pequeña casa de dos niveles sobre la rivera quedó
sumergida casi en su totalidad. Cuando el agua por fin retrocedió la mes-
colanza de lodo y basura rellenaba por completo el primer piso. Ahora,
casi un mes después, la inversión que habría de darle libertad económica
la está ahorcando.
La única fuente de ingreso segura desapareció y aunque el balneario
es el principal sustento de todo el pueblo las autoridades dan largas a sus
peticiones, pues como centro turístico cae a última posición en la lista de
prioridades. María es al momento, una de las miles de personas en guerrero
que debido al enorme caos que reina entre las organizaciones civiles y fede-
rales no han recibido apoyo alguno, ni económico ni de despensas porque
a Santa Fe “nadie ha llegado”.
“Mi tipo de pobreza cambió”
Tixtla, Guerrero. En los escalones de una tiendita de abarrotes, sobre la calle
principal de Tixtla, Vicky Nazareno de 64 años se sienta con la espalda per-
fectamente recta, las manos abrazando ligeramente sus rodillas, los talones
acomodados delicadamente uno junto al otro. Viste una desgastada camisa
de algodón y una falda color crema perfectamente planchada hasta las ro-
dillas y unos guaraches llenos de polvo. En su delgada muñeca izquierda tie-
ne un reloj de plástico color melón. Lo revisa, indiferente, un par de veces,
aunque no muy seguido. Lleva algo más de una hora en la misma posición,
ahí, esperando. Dice que sus hijos no tardan en regresar, fueron a recoger
un poco de ropa a la casa familiar que 20 días antes quedó sumergida hasta
el segundo piso cuando la laguna de aguas grises cerca del pueblo colapsó.
Virginia no se ve muy esperanzada, en realidad no muestra mucha emo-
ción, está cansada. Se sienta bajo la única sombra que hay a la vista, la
proyecta un pequeño trozo de tela que todavía se aferra al toldo de la
tiendita. No se puede asolear mucho, no sólo está cansada, también débil.
Es diabética y desde que se inundó su casa tiene el azúcar alta.
La desgracia más grande en su universo personal es saber que cada cosa
que come la enferma un poco más y no puede hacer nada al respecto, el
albergue en el que ahora vive no puede darse el lujo de hacer comida espe-
cial, a duras penas mantiene el ritmo. Virginia entiende que en tiempo de
contingencia uno no se puede dar el lujo de ser remilgoso.
En tiempos de contingencia no hay lujos, no hay justicia. En realidad, no
hay gran cosa de nada. Resignación tal vez, como la que se refleja perfecta-
mente en las facciones de la delicada mujer mientras espera •
8. El amarillo se comió al gris
Uriel Salmerón
El acoso de los moscos ya no mo-
lesta y el olor de agua estancada
se ha fundido a sus fosas nasales.
Tixtla vive bajo el agua desde ha-
ce más de 20 días. La fuerza del
verdoso cauce les ha arrebatado lo
poco que tenían. Veo en sus ojos
la desesperación que orilla a tomar
medidas en el mismo sentido.
El sol azota con su látigo ar-
diente. Somos apenas una do-
cena de hormigas bajo la incle-
mente lupa. Los habitantes del
pueblo se han destrozado la es-
palda por días haciendo trabajos
de desagüe. Ellos no piden una
solución inmediata, un milagro
que cambie su situación en un tri-
nar, desean salir adelante con su
esfuerzo. Sólo imploran que éste
no les sea arrebatado.
Los silencios se comen la galaxia
y sólo los murmullos empiezan a
resonar.. Nadie se mira directa-
mente a los ojos.
Se ha hablado de una ofrenda,
de un ritual que según algunos po-
bladores no se ha realizado desde
hace más de nueve décadas. Las
caras se han vuelto de jade: páli-
das y rígidas. Si Dios no ha sido la
fuerza que cambie la desgraciada
realidad, tal vez su contraparte sí.
Porque al final del día todos ne-
cesitan de la mano franca de un
amigo.
Abordamos con poca gracia la
canoa. Entre la inestabilidad del
transporte, nuestra falta de expe-
riencia y la atrofiada motricidad
que nos caracteriza, logramos
una subida temerosa, que apenas
unos segundos después desata el
contoneo burlón de nuestros con-
ductores. El motor se prende, un
encargado empuja. La cueva de
Amatitlán, escondite del insurgen-
te Vicente Guerrero, ya es escena-
rio del choque entre lo terrenal y lo
etéreo.
El recorrido inició en la colonia
El Santuario. El agua rebasa los
dos metros, avistamos algunos
automóviles bajo su nivel. La du-
da es generalizada. Don Guadalu-
pe, habitante de Tixtla y nuestro
guía, responde en voz baja. Se
traba, tartamudea. El manto de
la zozobra nos cubre mientras
los balidos en una casa aledaña
pintan una escena que bien pudo
haber retratado el Allan Poe más
macabro.
—¿Quién es el amigo?
—Son fuerzas que no podemos
controlar, que piden que se les ve-
nere. Unos dicen que es el diablo,
otros dicen que es una fuerza so-
brenatural.
De la nada un grupo de nubes
se arrejuntan como tomándose de
las manos. La precipitación arre-
cia. De los virulentos golpes del
astro rey nada queda.
—¿Qué es lo que le piden?
—¡Qué deje trabajar! ¡Qué ya
no lo derrumbe!
Es sorprendente la manera en la
cual se han sincronizado el ritmo
del relato y el de la lluvia. Las no-
tas se humedecen, la tinta se co-
rre. Nos cubrimos con tapices de
oscuro plástico. Rápidamente es-
tos se ven sobrepasados. La rojiza
carpa de una tienda de abarrotes
al costado del Instituto Superior de
Especialidades Pedagógicas sirve
como resguardo.
—El amigo no nos quiere dejar
llegar. El amigo nos está enviando
esto.
Han transcurrido más de 20 mi-
nutos. Las metralletas celestiales
han cesado el fusilamiento. Es ho-
ra de partir. Guadalupe vuelve a su
mística conferencia sobre el ritual:
—Es cierto porque lo hemos vi-
vido. Es un ser que no lo vemos. Sí
hace caso a las plegarias. En déca-
das no se había llevado ofrenda al
resumidero.
De entre el agua se alcanzan a
distinguir algunas figuras. Un gi-
gante de hierro y uno de carne.
Ganado en descomposición, pa-
trimonio hundido. Sobre una casa
divisamos a un trío de perros con
comportamiento agresivo, nos
preguntamos cuándo fue la última
vez que se alimentaron. Después
algunas viviendas con cerraduras
forzadas. Ya contamos más de
cuatro. Aún en la devastación hay
oportunismo.
El cielo, aunque gris, luce im-
poluto. Como si ya se estuviese
negociando la tregua. A la cueva
de Amatitlán arriba un grupo de
alrededor de 20 integrantes. Mu-
jeres, en su mayoría. El contingen-
te lleva por el frente un Cristo ata-
viado en una túnica púrpura. Con
flores de cempasúchil abarcando
de una mano a la otra, rodeándo-
le el cogote.
Las demás rezanderas traen ca-
nastos con ofrendas. Pan de dulce,
velas y garrafas con varios tipos de
mezcal.
—Ave María Purísima, sin peca-
do concebida.
Las tixtlecas colocan el artífice
religioso en una bifurcación de la
caverna donde se cree que Vicen-
te Guerrero almacenaba tesoros
confiscados al ejército realista.
Después de este gesto, la ritualis-
ta líder sirve algo de mezcal claro
en un envase y lo arroja al chicloso
suelo haciendo la señal de la cruz.
Se prende el incienso y las ora-
ciones. Ahora ponen platos con
comida a sus pies. Los hombres
asistentes ayudan prendiendo ci-
garros, que serán colocados a la
derecha del mezcal.
—¡Perdón! ¡Oh, Dios mío!,
¡perdón e indulgencia!, ¡perdón y
clemencia!, ¡perdón y piedad!
El altar improvisado ya luce 12
copas, representadas por vasitos de
plástico con mezcal, y 12 cigarros.
Hay incongruencia en las versiones.
Algunos le atribuyen el significado
al número de meses que confor-
man el año, mientras otros más,
aseguran, se trata de la cantidad
de apóstoles de Jesús. También hay
cuatro velas larguísimas.
La única certeza es la devoción.
No hay sonrisas ni bromas. Todos
atienden al rito. Los rostros de las
tixtlecas, ricos en diversidad como
una paleta de acuarelas. Las hay
jóvenes, morenas, avejentadas,
arrugadas, convencidas; desgas-
tadas y asustadas. Toman en sus
manos el destino de la comunidad.
Llevan los pantalones muy bien
puestos.
—Perdona a tu pueblo, ¡perdó-
nalo, señor!
La cueva tiene un resquicio por
donde entra una luz de cristal que
casi toca al cristo. Entre la dedi-
cación y los distractores, ahora
señala a nuevos actores, quienes
se han sumado a la petición en
calidad de creyentes y no de auto-
ridades.
Gustavo Alcaraz, presidente
municipal de Tixtla, así como re-
presentantes de su equipo de tra-
bajo, han asistido a la cita. ¿Qué
tan necesitada está esta gente que
incluso el representante del poder
en su comunidad ha acudido a im-
plorar ayuda a una deidad?
La comitiva hace la entrega de
cuatro ramos de flores rojas. Las
encargadas pregonar El Santo Ro-
sario las ubican a los costados de
la cruz. Alcaraz se cruza de brazos,
tiene la cabeza gacha. No inter-
cambia miradas ni comentarios.
Aguanta en la misma posición
hasta que el tiempo de orar desfa-
llece.
Para concluir, las rezanderas sir-
ven mezcal en vasos del tamaño de
un dedal. Instan a tomárselo de un
trago. Sirven otro más, pero en es-
ta ocasión solicitan lanzarlo al aire.
Con furia si se puede. Sí puedo.
La lideresa del ritual niega lo
ocurrido:
—Le pedimos a Dios, no al ami-
go…
—Pero, ¿le ofrendan a Dios al-
cohol y cigarro?
—Bueno, este… las oraciones
son para Dios.
—¿Y lo demás?
—Se podría decir que es para
distraer al diablo. Que deje a Dios
hacer su trabajo.
La ofrenda está hecha, lo demás
será cuestión de esperar. Salimos
de la cueva. Ahí ya nos esperan
algunos habitantes del municipio
afectado. Nos ofrecen tamales de
frijol y pollo con mole verde. El am-
biente ha cambiado. Los rostros
que se mostraban achicharrados
y compungidos ahora degustan el
trabajo de toda la mañana.
De los virulentos golpes de la
lluvia nada queda. El amarillo se
comió al gris •
Diálogos • Noviembre-diciembre 2013
• 8
• Licenciatura en Periodismo
RVOE SEP Acuerdo 8166 del 2 de julio de 1976
• Turnos matutino y vespertino
• Beca parcial en el vespertino
• Prensa, Radio, televisión:
–Sala de cómputo (Mac)
–Fotografía digital –Estudios de radio y tv
–Radio Septién por internet –Periódicos impreso y en línea
64 años de
experiencia
Escuela de Periodismo Carlos Septién García
Foto: Ximena Natera
9. El uso de la fuerza pública y
el estado de ingobernabilidad
en México
Martha Scarlett Lindero
Opción Social •
9 •
La cuerda se aprieta con la provocación mutua: los granaderos intimi-
dan y los manifestantes atacan hasta que revienta con igual fuerza que
determinación.
Los granaderos rompen filas y recogen la ira colectiva para devolverla sin
discriminar a la muchedumbre. Vuelan piedras, pintura, insultos. Y en medio
de esto: la prensa.
Esta podría ser cualquier escena en las marchas defeñas desde la llegada
de Miguel Ángel Mancera a la jefatura de gobierno.
Desde el 1 de diciembre de 2012 el modo de hacer periodismo cambió
en la capital del país a pesar de que la ciudad había sido reconocida, al
menos durante los pasados ocho años, como un lugar seguro para co-
municadores mientras que provincia se incendiaba con la corrosión del
crimen organizado.
Nada tenía que ver la situación de la urbe con el Estado de México, Vera-
cruz, Chihuahua y Guerrero, que resaltaron por la falta de condiciones para
ejercer el trabajo reporteril con seguridad.
Sin embargo, durante los últimos 10 meses las protestas en el DF se han
intensificado en número y tono. Según informes de distintas organizaciones
civiles como Artículo 19, la policía del nuevo gobierno en diversas ocasiones
ha actuado de manera represiva contra los manifestantes, así hemos visto
un patrón de violaciones a los derechos humanos el 1 de diciembre de
2012, el 10 de junio, 1 de septiembre y particularmente 2 de octubre de
este año.
Los periodistas que ejercen el derecho a documentar y perseguir la infor-
mación, aseguran que se han visto afectados por los procesos arbitrarios y
la carencia de un protocolo eficiente en la seguridad social.
Para José Jiménez, fotoperiodista independiente, quien fue atacado el
pasado 2 de octubre en la marcha conmemorativa del 45 aniversario de la
matanza en Tlatelolco, trabajar en medio de estos choques de intereses es
difícil, pues puedes fotografiar escenas que afecten los intereses de estos
grupos.
“El gobierno está quebrantando el derecho a informar y documentar
estos casos de violencia, se criminaliza la protesta, el derecho a informar,
el derecho al empleo, hay un ambiente de ingobernabilidad en los últimos
13 años”, explica.
Jiménez opina que el estado de ingobernabilidad en México deriva del
choque partidista, ya que con el retorno del PRI regresa la violencia, y la
sorpresa es que el gobierno capitalino que está dirigido por Miguel Ángel
Mancera, es una izquierda que tiene poca identidad con el PRD y esta iz-
quierda no debería comulgar con el PRI.
Según él, la nula capacitación de los elementos de seguridad del DF y las
políticas de estado excluyentes han despertado la efervescencia y levantado
el hartazgo social.
“El mismo sistema crea pobres, estos pobres viven en barrios pobres,
sufren violencia interfamiliar, tienen poco acceso a la educación y acá tienes
de dos, te vuelves delincuente, te vuelves ambulante o te vuelves policía y
al final el mismo sistema que te hizo pobre, que no te dio las oportunidades
que necesitabas y que te dio un entorno violento, te da un trabajo violento”.
El sistema reprime cometiendo irregularidades porque “alguien dio la orden
de reprimir a la prensa, alguien dio la orden de reventar la manifestación,
alguien quiere enviar un mensaje”, denuncia.
El caso del fotoperiodista es grave, fue amenazado de muerte y golpeado
en la cabeza con un extintor, según su testimonio documentado en Artículo
19. Ese día, los granaderos también activaron los extintores para impedir la
visibilidad de personas y cámaras de medios.
“No entendía por qué nos estaban golpeando tan fuerte, nos amenaza-
ron de muerte, lo primero que nos gritan es ¡ya se los cargó la chingada y
uno de ellos me golpeó la cabeza con un extintor y antes de golpearme me
grita: ¡Te voy a matar!, no es normal que la policía te amenace de muerte
ni que te esté golpeando”, cuenta.
Ante estas detenciones arbitrarias el fotorreportero recomienda una serie
de pasos para el protocolo personal en las nuevas generaciones de periodis-
tas:
1. Si eres estudiante, debes tener una red de apoyo, un monitoreo desde
la escuela y una red de apoyo entre profesores, amigos a través de redes
sociales, de celulares.
2. Informe a la familia, que alguien te esté monitoreando.
3. Prevenir la capacidad física de tu cuerpo para no meterte entre los grupos
de choque.
4. Llevar casco, máscara, goggles.
5. Proveer tu vestimenta, si tienes una camiseta del “Che Guevara” no te la
pongas ese día, por ejemplo. Tienes que tener clara tu identidad, vas como
periodista, eres estudiante o vas como activista.
6. Tener claro tu objetivo periodístico ¿a qué vas?
El escuálido
protocolo de
seguridad
Los manifestantes lo ignoran. La
gente que se cruza con las mar-
chas también. Son pocos los que
lo saben: sí existe un protocolo
policial para usar durante las ma-
nifestaciones, pero es desconoci-
do porque brilla por su ausencia.
El manual se llama “Actuación
Policial para el Control de Multitu-
des en Materia de Uso de la Fuer-
za, Restablecimiento del Orden
Público y Respeto a los Derechos
Humanos” y fue promovido con
intensidad por el jefe de Gobier-
no, Miguel Ángel Mancera, ante
los mandos de la Secretaría de
Seguridad Pública local (SSPDF),
luego de las manifestaciones del
1 de diciembre de 2012, cuando
Enrique Peña Nieto asumió la pre-
sidencia.
En teoría, el protocolo se enfo-
ca principalmente en la vigilancia
de las concentraciones y a que los
uniformados se apeguen al respe-
to a las garantías individuales.
El documento cataloga 23 tipos
de actividades que se desarrollan
en las manifestaciones y cómo de-
ben reaccionar los elementos po-
licíacos: Arenga, Unidad Policial,
Técnica, Táctica, Sustancias irritan-
tes en aerosol, Seguridad, Punto
Estratégico, Puesto de Mando,
Plantón, Orden público, Orden de
Operaciones, Motín, Mitin, Mar-
cha, Manifestación, Linchamiento,
Estrategia, Dispositivo, Diligencia,
Conducción, Concentración, Blo-
queo y Asamblea.
El reportero gráfico opina que
pese al esfuerzo por crear este
manual, todo transcurrió como si
no existiera. Peor: como si hubiera
que desafiarlo para demostrar que
los policías se han ganado el dere-
cho a vigilar una manifestación.
“Quien cometió un abuso de
poder desde su posición pague
las consecuencias, si no hacemos
algo ahorita se va a volver una
constante y lo vamos a asumir
como una normalidad, que se
procese a los policías que lo hi-
cieron y que se les capacite, que
no nada más se les capacite para
aprender a golpear gente, que
se les capacite para saber actuar
como funcionarios públicos dig-
nos de la policía”, concluye José
Jiménez.
Todo quedó grabado en dece-
nas de cámaras profesionales o
celulares de transeúntes, que sir-
vieron como testigos para la de-
rrota más significativa del manual
“Actuación Policial para el Control
de Multitudes en Materia de Uso
de la Fuerza, Restablecimiento del
Orden Público y Respeto a los De-
rechos Humanos”.
La criminalización en las marchas
Para Vladimir Chorny, relator para la Libertad de Expresión de la Comisión
de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), regular las marchas
implica meterse con temas de regulación del espacio público, llegando a
extremos casi de privatizar o de desnaturalizar el uso del espacio público
que es indispensable para el ejercicio de la libertad de expresión.
Indica que es contrario a estándares de libertad de expresión, hay varios
informes especiales para la libertad de la reunión específicos de la Organi-
zación de las Naciones Unidas. Lesiona la libertad de expresión, la lectura
política es una mala respuesta y jurídicamente no se sustenta. “El derecho a
la protesta social es un derecho que entre sus componentes esenciales está
el de ocupar el espacio público, intentar regularlo y quitarlo es desnaturali-
zar ese derecho”, afirma.
¿Son los periodistas una víctima más o un objetivo?, cuestiona el relator.
Es cierto que los derechos a la expresión, a la manifestación, a la reunión,
a la asociación y a la protesta no pueden ser absolutos. En el orden jurídico
hay múltiples penalizaciones, como la calumnia, el daño moral, el terroris-
mo o la instigación a la violencia que imponen límites a estas libertades.
Chorny comenta que es un error en varios niveles la regularización de las
marchas, ”porque no se ha entendido el problema político, gran parte de
la violencia es un clima de profunda ruptura del tejido social y de mucha
inconformidad y rabia por parte de los sectores, que tiene que ver con des-
igualdad con problemas de desempleo, la crisis de representación política
de los partidos”.
No obstante, la Suprema Corte de Justicia de la Nación definió recien-
temente que sólo en la Constitución pueden establecerse expresamente li-
mitaciones a derechos humanos pues, de no hacerlo, prevalecerá la norma
más protectora, sin importar que provenga de una fuente internacional.Al no
encontrarse en la Carta Magna limitaciones explícitas a la libertad de mani-
festación pública, pretender “reglamentar” las marchas en una ley secundaria
significaría, de entrada, limitar un derecho constitucional y convencional.
“Quitando o regulando el derecho a la libre manifestación y a la libre
reunión se podrá solucionar el problema... tú tienes un problema en el cual
hay fuego e intentas apagarlo echándole gasolina. Es decirles cómo, cuándo
y dónde van a marchar para manifestar su inconformidad cuando parte de
esa inconformidad es porque se toman ese tipo de decisiones”, añade.
Por ahora, un estricto examen a la propuesta de restringir las manifesta-
ciones públicas demuestra no sólo la absoluta ignorancia de muchos acto-
res políticos sobre el significado y el alcance de los derechos humanos, sino
que despierta la sospecha de que se persigue otro interés, más que el de
fortalecer el Estado de Derecho, al encender este debate.
“Vivimos momentos difíciles, las autoridades se han encargado de enviar
un mensaje negativo, de no salir a manifestarse porque se puede terminar
en la cárcel , hay momentos en los que los derechos humanos pasan por
tiempos difíciles y es en esos tiempos donde la sociedad debe fortalecerse
y abrazar a los derechos humanos y la manera de abrazarlos es ejercerlos,
aun teniendo en cuenta el riesgo que implica ejercerlos, si los derechos hu-
manos no se ejercen, se asfixian, y las autoridades están intentando asfixiar
nuestros derechos.
“No hay que dejar que los derechos se asfixien, hay que darles aire ejer-
ciéndolos, salir a las calles, denunciar y salir de manera informada intentar
enterarse del panorama, romper el cerco informativo que hacen tanto me-
dios de comunicación como autoridades y utilizar las herramientas tecnoló-
gicas para documentar. Hay que organizarse y como dice Artículo 19 ¡Hay
que romper el miedo!”, concluye el relator •
Foto: Aline Martiñon
10. Diálogos • Noviembre-diciembre 2013
• 10
Alberto
Patishtán:
la punta
del iceberg
Luisa Cantú
El profesor Alberto Patishtán,
ahora un hombre libre, es tan sólo
la parte visible del iceberg de en-
carcelamientos con violaciones al
debido proceso en México.
El luchador social tzotzil perma-
neció 13 años encarcelado, a pe-
sar de las pruebas de su inocencia
presentadas en las tres instancias
y el recurso de Reconocimiento de
Inocencia interpuesto por sus abo-
gados en octubre de 2012, aun
cuando se reconocieron pública-
mente las violaciones a sus dere-
chos humanos, como por ejemplo
el de la presunción de inocencia.
Únicamente en el DF, según un
estudio elaborado en 2012 y por
Roberto Hernández, productor
y director de la película Presunto
culpable, 67% de los reclusos se
declaran inocentes, y únicamente
6% asegura que contó con la pre-
sencia de un juez durante su juicio.
Las cifras de violaciones al debido
proceso en el resto de la república
se desconocen debido a la falta de
estudios. El año pasado, la Comi-
sión Nacional de Derechos Huma-
nos elaboró el Diagnóstico Nacio-
nal de Supervisión Penitenciaria,
sin embargo, no obtuvo exactitud
en las cifras debido a la situación
en que encontró a la mayoría de
los centros de reinserción social.
Eso quiere decir, que hay tal
ingobernabilidad en las cárceles
que los reclusos no permitieron la
entrada de la comisión, como fue
en el caso de Piedras Negras en
Coahuila, donde ocurrió la segun-
da fuga más grande más grande
del sexenio pasado en la que esca-
paron 132 internos.
¿Qué es el
debido proceso?
Según el trabajo de la UNAM; “El
debido proceso como derecho hu-
mano” de Cirpiano Gómez Lara,
es el conjunto de condiciones y
requisitos de carácter jurídico y
procesal que son necesarios para
poder afectar legalmente los dere-
chos de los gobernados; es decir,
una garantía de la correcta aplica-
Sin saber escribir su nombre ni
leer los señalamientos de tránsito,
185 mil 872 personas en el DF son
analfabetas, que corresponde a
2.1% del total de la población de
la ciudad que vive con rezago edu-
cativo (dos de cada 100 no saben
leer ni escribir).
“Esto genera otros problemas
sociales como la exclusión”, afir-
ma Patricia Ducoing Watty, espe-
cialista en el tema de educación e
integrante del Instituto de Investi-
gaciones sobre la Universidad y la
Educación (IISUE) de la UNAM.
Panorama Nacional
A nivel nacional el DF es la entidad
con menos analfabetas en compa-
ración con estados como Chiapas,
en donde 18 de cada 100 perso-
nas mayores de 15 años no saben
leer ni escribir, lo que corresponde
a que 853 mil 791 de total de la
población del estado (4 millones
796 mil 580 personas) no sabe
leer ni escribir.
En México seis de cada 100
hombres son analfabetas y ocho
de cada 100 mujeres se encuen-
tran en la misma situación, afir-
man estudios de la UNAM.
“Esto demuestra la segregación
de género. En ciertos ámbitos so-
ciales persiste la idea de que no es
necesario que las niñas asistan a la
escuela, porque deben encargarse
de las tareas domésticas”, señala
Patricia Ducoing Watty.
A nivel mundial
Sin embargo a nivel América La-
tina, México sigue por arriba, con
6.7 millones de personas en esta
condición, de países como Cuba,
Venezuela, Chile y Argentina, los
cuales, muestran que menos de
4% del total de su población es
analfabeta, afirman cifras de la
UNAM y del Sistema de Informa-
ción de Tendencias Educativas en
América Latina (SITEAL).
En el mundo existen 100 millones
de analfabetas y se encuentra en
las regiones de África Subsaharia-
na, Asia del Sur y del Oeste y las
naciones árabes, así como Améri-
ca Latina, asegura el SITEAL.
Nivel de escolaridad
por delegación
En el DF el grado promedio de
escolaridad es de 10.5, en la po-
blación de 15 años y más, lo que
significa que cuentan con más del
primer grado de preparatoria, es-
tudios técnicos o comerciales con
secundaria terminada y normal bá-
sica, afirman datos de INEGI.
A nivel nacional la población de
15 años y más únicamente termi-
nó la secundaria, que corresponde
a un grado promedio de escola-
ridad de 8.6, destacan cifras del
ción en el proceso legal de cual-
quier ciudadano acusado.
Por ejemplo, cuando una perso-
na es detenida, según la Comisión
de Derechos Humanos del DF, tie-
ne derecho a estar comunicada, a
ser presentada de manera inme-
diata ante el Ministerio Público o
el Juez Cívico (nunca a un lugar
o con una autoridad distintos) y a
que en todo momento se respete
su presunción de inocencia.
Además se debe salvaguardar
su integridad física y no debe ser
expuesta ante terceras personas o
ante los medios de comunicación y
en contra de su voluntad (a excep-
ción de niñas, niños o adolescen-
tes, cuya exhibición está totalmen-
te prohibida).
El detenido también tiene dere-
cho a defenderse personalmente
o con auxilio de un abogado; ni-
ñas, niños y adolescentes tienen el
derecho a contar con la presencia
de sus padres o representantes le-
gales; a contar con un abogado o
defensor que le asista al momento
de rendir su declaración; a escu-
char al acusador para saber de qué
se le acusa y a confrontarse con él;
a tener acceso a las constancias
de investigación en su contra; y a
ofrecer pruebas para defenderse.
Una vez iniciado el proceso le-
gal, en las tres instancias los dere-
chos que el estado debe garantizar
para no violar el debido proceso
son: el acceso a los tribunales y tu-
tela sin discriminación, la atención
del asunto en un plazo razonable
de tiempo frente a un juez inde-
pendiente e imparcial reconstitui-
do por ley, el derecho de presentar
pruebas directas o contrapruebas.
El profesor quedó libre tras una
reforma al Código Penal Federal
que faculta al presidente a liberar
a los sentenciados que tras el juicio
puedan probar que sufrieron viola-
ciones a los derechos humanos.
Las fallas, detectadas y docu-
mentadas, del sistema de justicia
mexicano se pueden entender a
través del caso Patishtán •
INEGI.
Grado promedio
Delegación Hombres Mujeres de escolaridad
Benito Juárez 14.1 13.5 13.1
Miguel Hidalgo 12.4 11.4 11.9
Coyoacán 12 11.4 11.7
Cuauhtémoc 11.8 11 11.3
Azcapotzalco 11.1 10.5 10.8
Tlalpan 11 10.5 10.7
Iztacalco 10.8 10.2 10.5
Venustiano Carranza 10.8 10.3 10.5
Álvaro Obregón 10.7 10.1 10.4
Cuajimalpa 10.5 10 10.2
Gustavo A. Madero 10.5 10 10.2
Xochimilco 10.3 10 10.1
La Magdalena Contreras 10.2 9.7 9.9
Tláhuac 9.9 9.5 9.7
Iztapalapa 9.8 9.4 9.6
Milpa Alta 9.2 9 9.1
Total 10.8 10.3 10.5
En la tabla se muestra la diferencia entre Milpa Alta, que apenas llega al
tercer grado de secundaria, y la delegación Benito Juárez alcanza el cuarto
grado que corresponde a la preparatoria estudios técnicos o comerciales
con secundaria terminada y normal básica.
“De no alcanzar el tercer grado de formación básica, las capacidades de
leer y escribir pueden perderse”, aseguró Patricia Ducoing Watty especialis-
ta en el tema de educación e integrante del IISUE de la UNAM.
¿Para qué debe servir la alfabetización? Aumentar la participación de las
personas, tener condiciones de igualdad, contribuir y evitar la marginación
y exclusión.
Ducoing Watty destacó que además de abatir el analfabetismo, los pro-
gramas deben erradicar la deserción escolar para cumplir el mandato cons-
titucional que establece la obligatoriedad de la educación secundaria y el
bachillerato, además de garantizar la equidad de género en todos los nive-
les instructivos.
“La alfabetización, además de ser un derecho humano elemental, es un
recurso indispensable para el ejercicio de otros derechos fundamentales.
Las posibilidades de alcanzar democracias efectivas se ven afectadas mien-
tras una gran parte de la población se mantenga fuera del acceso a la len-
gua escrita.
“El ejercicio de una ciudadanía activa requiere de adultos capaces de
expresar su palabra por escrito y de comprender la palabra escrita de los
otros”, señala el SITEAL •
Analfabetas,
un problema latente
en el DF
Patricia Carranza
Foto: Aline Martiñon
11. Opción Social •
11 •
éste es tu espacio
PARTICIPA
palabradigital.com.mx
Foto: Aline Martiñon
Rodrigo André Nieto Bojórquez
Estamos en la sala de un depar-
tamento con Rodrigo André Nieto
Bojórquez; se preguntarán quién
es. Mientras compartimos un ciga-
rrillo, Rodrigo, o como sus amigos
lo llaman Rorro, de 19 años, co-
mienza a contarme sus experien-
cias en las distintas marchas de
protesta en las que ha participado
los últimos meses, incluyendo su
terrible experiencia del 1 de di-
ciembre de 2012.
Rodrigo estudia la licenciatura
en Derechos Humanos y Gestión
de Paz en la Universidad del Claus-
tro Sor Juana, fue voluntario en el
Albergue de Migrantes en “la 72”,
Tenosique, Tabasco, donde duran-
te año y medio ayudaba a cocinar,
curar heridos y otros servicios.
Cuenta que a este lugar llegan
los inmigrantes, la mayoría de ori-
gen hondureño, que no logran pa-
sar desapercibidos en la frontera y
reciben golpizas por parte de los
oficiales de migración.
“Un día llegué al albergue y los
Zetas se habían llevado a 20 inmi-
grantes sepa para qué pero llega-
ron armados y sin duda alguna de
matar”, me dijo.
A partir de esta vivencia Rodrigo
comenzó a tener más consciencia
y a la vez coraje por la situación
en la que vive nuestro país, pronto
terminó sus estudios de bachiller
y llegó a la Ciudad de México en
fechas cercanas a las elecciones
presidenciales.
El Rorro asistió a las marchas de
#YoSoy132 y algunas más, luego
llegó el famoso 1 de diciembre,
donde la protesta era por la toma
de posesión del presidente Enrique
Peña Nieto.
“Estaba manifestándome de
manera pacífica en San Lázaro
camino a Bellas Artes, en todo
La próxima vez que vayas
a marchar mejor corre
Braulio Meza
momento iba con un contingente
de personas pacificas, había mu-
chas vallas y policías impidiendo el
paso”, relata.
Luego, pasando por la calle Re-
gina lejos de los granaderos, Ro-
drigo volteó y en un momento le
llegó la lluvia de patadas y golpes
de parte de un pequeño grupo
de policías para luego esposarlo
como un criminal sin dejarlo expli-
car nada. Entonces trató de expo-
ner su posición y un oficial de la
policía le respondió con un “cálla-
te que allá adentro te van a violar
por güerito”.
A Rodrigo lo trasladaron a la
Agencia 50 del Ministerio Público
junto con dos hombres más, en-
tre ellos un abogado que salió a
las pocas horas del Ministerio sin
problema alguno. A él en cambio
le entregaron una declaración que
no había redactado y mucho me-
nos hecho, pero fue obligado a
firmar para no meterse en proble-
mas con los policías. Las supuestas
declaraciones relataban que esta-
ba en estado de ebriedad, que se
portó violento con los policías y
que había participado en la quema
de un camión.
“No te pongas pendejo o te va
a cargar la chingada”, dijo el judi-
cial, “entonces firmé”, me cuenta
Rodrigo.
A los dos días trasladaron a Ro-
drigo junto con 69 detenidos al
Reclusorio Norte de la delegación
Gustavo Madero.
“Mi condena iba a ser de 45 años
por ataques a la paz pública con
agraviante de pandillerismo y ul-
trajes a la autoridad”.
Llegando al reclusorio me cuen-
ta que lo vistieron como recluso
y estuvo nueve días en ese lugar
donde dice “comíamos huevo en
agua, chicharrón con pelos en
agua, había violencia física y emo-
cional, hay gente amable como los
cocineros que nos ayudaban a no
perder la esperanza. Me enteré
de que cobran por comer en las
cárceles, 5 pesos por comida, que
es inhumana la situación en la que
denigran al hombre. Los peores
olores, fríos y momentos de toda
mi vida”.
Rodrigo logró salir absuelto por
falta de pruebas aunque tiene
reservas de ley por 4 años cosa
que es ilegal, porque quedó ab-
suelto pero de igual manera está
colgando de un hilo, uno de los
protestantes afronta una condena
de 2 años 3 meses en ese mismo
reclusorio, por su parte Rodrigo
apoya a todos los que siguen ahí y
ahora protesta más que nunca. El
video de como capturan a Rodrigo
el 1 de diciembre se encuentra en
www.youtube.com, bajo el título
de Detenciones Arbitrarias 1 de
diciembre es el primer video la pri-
mer parte •
Iván Molina
El profesor tzotzil condenado a 60 años de prisión por su supuesta participación en el homicidio de siete po-
licías en Chiapas fue liberado el pasado octubre, tras un indulto otorgado por el presidente de México Enrique
Peña Nieto.
Después de 13 años tras las rejas el profesor indígena Alberto Patishtán obtuvo su libertad, gracias a las
reformas al Código Penal Federal que fueron aprobadas por el Congreso de la Unión hace unos días.
En junio de 2000, una emboscada a fuerzas policiacas federales y del estado de Chiapas cobró la vida de
siete oficiales y dejó dos heridos, entre ellos el hijo del alcalde de El Bosque, quien señaló a Alberto Patishtán
como responsable de los homicidios, sin embargo, tiempo después se logró desmentir esta declaración cuando
testigos aseguraron que el profesor tzotzil no se encontraba en la localidad de Las Limas en el momento del
atentado, además de estudios que demostraron que Patishtán no había disparado un arma de fuego.
Según expertos el caso del profesor ha estado lleno de irregularidades las cuales desde un principio fueron
las causantes de una condena injustificada.
El gobernador de Chiapas, Manuel Velasco Coello, dio su opinión sobre el tema al decir: “Qué bueno que
vaya a obtener su libertad, pero hay que decir que Patishtán nunca debió estar preso.”
El profesor indígena ha estado preso durante su condena en los penales de Cerro Hueco, El Amate y en los
Ceresos 5 y 14 en Chiapas •
*Un indulto se refiere al perdón de la pena, en este caso la persona sigue siendo culpable pero se le perdona el
cumplimiento de la pena, Alberto quedó en libertad, sin embargo ha perdido algunos derechos como a votar.
Alberto Patishtán Gómez
libre tras indulto de EPN
12. Diálogos • Noviembre-diciembre 2013
• 12
La reforma fiscal fue aprobada por la Cámara de Diputados y Senadores en
la que se aumenta el precio a las bebidas azucaradas y refrescos con el fin de
reducir los índices de obesidad y diabetes, pero ¿es esta la verdadera razón?
Gustavo de la Rosa, licenciado en Economía egresado de la Universidad
Metropolitana de México y analista de CNN Expansión, realiza un análisis
sobre este aumento.
¿Por qué aumentar el costo de los refrescos y bebidas azucaradas?
El pretexto o argumento del gobierno son los índices de obesidad. Lo que
destaca el poder ejecutivo y legislativo es tratar de inhibir el crecimiento de
la obesidad, sin embargo las industrias refresqueras y de bebidas azucaradas
señalan que tendrá poco efecto en este propósito.
El refresco es un producto que su consumo no es básico pero lo compran
todos los niveles de estratos sociales. En términos simples, en la tiendita de
un pueblo a lo mejor no encuentras leche, pero encuentras refresco y lo con-
sume la gente es parte de su alimentación, malamente, pero es parte de su
alimentación y consumo diario. Al final ese impuesto se va transferir en lo que
pagan las familias, las empresas no lo van a asumir.
¿Qué efectos tendrá este impuesto?
Tendrá dos efectos a consumidores y a productores:
Consumidores: Van a terminar pagando más por este producto que ya de
por sí trae tasas altas de impuestos especiales (impuestos sobre consumos
específicos además del IVA) ahora lo gravaron con mucho más y se les va a
cargar ahí la mano.
Va a tener poco efecto de lo que se tiene originalmente propósito que es
combatir la obesidad. En cambio le van pegar a todos los estratos sociales: los
de menores ingresos, los de mayores ingresos y los de clase media, que son
los que al final están pagando más.
¿Por qué le afectará más a la clase media? La clase media es la que
más consume y con este tipo de impuestos el consumo promedio de este
estrato social se ve afectado.
Porque tú no vas a dejar de consumir refresco vas a seguir consumiendo
igual que el cigarro. Estos son bienes con una gran elasticidad en la deman-
da y que el precio tiene poco efecto. Tú lo puedes elevar y estás dispuesto
a echarte un cigarro al igual que con la cerveza, si aumenta 10 pesos, lo
Aumento a refrescos
“el beneficio a la burocracia”
Valentín Navarro
pago; te cuesta 15, lo pago; te cuesta 20, lo pago porque estás dispuesto a
consumir. Su demanda no se ve afectada por el precio pero tiene un límite.
Si ese precio va en aumento los consumidores se ven afectados porque están
pagando más.
Productores: El precio de estos productos tienen un límite en el que empie-
za a afectar la demanda por lo que se empiezan a reducir las inversiones, la
producción, la planta instalada o la capacidad de la planta disminuye, enton-
ces, se empieza generar desempleo.
No están contratando a la gente porque si antes producían 100 van a
producir 80. Si cada trabajador producía 20 tienen que despedir a 1 y ese 1
se va a salir a incrementar el desempleo y la informalidad. Por ejemplo, los
de la Cámara Nacional de las Industrias Azucareras y Alcoholera señalaban
que ellos están luchando contra un mercado informal debido a que existe un
contrabando de bebidas azucaradas de todo tipo provenientes sobre todo de
China que son más baratas.
Las industrias de azucares en México
están luchando contra:
1. El contrabando.
2. Para que no se reduzca la demanda.
3. Con pocos incentivos y poca inversión porque existen muchos monopolios
como: Pepsi y Coca-Cola.
Estas empresas tienen una fuente de distribución que no le permite a los
pequeños productores si quiera llegarle a algo. Entonces se ven beneficiados
los monopolios y los pequeños o medianos productores se ven afectados.
¿Cuáles serán las consecuencias?
Tú no vas a sacrificar el volumen entonces en lugar de comprarte una botella
de 2 litros ahora nada más te compras una de un litro por este impuesto por-
que tú como consumidor lo pagas. Este impuesto es para tener más recursos.
¿Por qué quieren tener más ingresos?
Es cierto la recaudación de México es baja por impuestos como porcentaje
del PIB y quieren elevar este porcentaje. Quieren más ingresos porque los
gastos se están elevando hay un incremento en el valor al gasto. El gasto
puede ser en educación, salud y vivienda pero el gobierno no ha etiquetado
ese gasto y decir se va a hacer un programa para construir un parque o un
deportivo porque simplemente puede ser que sólo vaya para sus bolsillos
debido a que hay un gasto de corriente fuerte.
¿Qué es el gasto corriente?
El gasto corriente es en burocracia, el salario de los funcionarios por eso quie-
ren elevar el impuesto para poder solventar el gasto.
¿En qué le afectará a las refresqueras?
Las empresas refresqueras no son unos santos pero se puede llegar a un
punto, por ejemplo: te cobro el cigarro a 10 hasta 20 pero si llega 50 ya lo
piensas, ya no te compras una cajetilla te compras un cigarro eso puede su-
ceder con el refresco y las bebidas azucaradas, no vas a ir y te vas prepara tu
agua de limón, qué vas hacer no te vas a comprar una botella de 2 litros sino
una de un litro ahí estas afectando el consumo en cantidad.
La industria refresquera que es muy grande y genera muchas inversiones,
lo que brinda son muchos empleos y genera un volumen de producción muy
importante. Sin embargo, con el aumento en lugar de vender 100 mil bote-
llas al año venderán 80 mil eso en vez de expandir la producción reduce la
cantidad de consumo. Si alguna empresa refresquera tenía pensado ampliar
su planta productiva pues ya no lo va a hacer y todo eso no va destinado a un
beneficio va destinado a porque el gasto del gobierno va en aumento sobre
todo en el gasto corriente que es la burocracia.
Entonces si Peña Nieto antes tenía una secretaría ahora se contrata dos. No
están etiquetando los beneficios por los ingresos que generarían por obten-
ción de los impuestos.
¿Nos beneficia la miscelánea fiscal?
El paquete de mediadas fiscales sólo está tapando huecos porque necesitan
recaudar más. Sin embargo se le está cargando la mano a la clase media,
que es la que más gasta. Este país necesita un clase media más fuerte para
elevar el consumo y dinamizar la economía para generar inversión, consumo
y empleo.
Yo gasto mi dinero como clase
media y compro comida, me voy de
viaje y qué genero ahí un gasto que
se convierte en empleos, productivi-
dad mayor crecimiento. Eso implica
mayor empleo y al final es un círculo
virtuosa de la economía.
Si frenas el consumo le metes un
freno a la economía y no fluye el
dinero. Por ejemplo Estados Unidos
baja las tasas de interés para que
tengas un consumo ágil. Si tu vas al
banco y pides prestado para comprar
un carro o una casa el impuesto del
dinero es nulo 0.25 % pero estás
gastando para seguir comprando y
que la economía siga creciendo.
Le están cobrando más a los que
siempre pagan y la informalidad no
se está tocando. No es progresivo el
impuesto no genera el ciclo virtuoso,
se genera mayor ingreso al gobierno
pero mayor gasto en bonos produc-
tivos que dan empleo. No, nos bene-
ficia debido a que se está haciendo
es un ciclo regresivo.
Refresqueras,
inversionistas de peso
16 millones de litros de refresco se
consumen al año en México. Las
intenciones del gobierno mexicano
por gravar las bebidas azucaradas y
refrescos se concretaron.
En la propuesta de Reforma Ha-
cendaria se basan en un estudio
elaborado por el Instituto Nacional
de Salud Pública de México en 2008
que llevó por nombre: “Consumo
de bebidas para una vida saludable:
recomendaciones para la población
mexicana”, en el cual indican la
prevalencia de sobrepeso, obesidad
y diabetes. Estas enfermedades au-
mentan con rapidez en México debi-
do al consumo de bebidas que inclu-
yen a los refrescos como las menos
saludables, debido a que proveen
excesivas calorías y muy escasos be-
neficios nutricionales. México ocupa
el primer lugar mundial de obesidad,
con una tasa de 32.8%, señaló un
informe de la Organización de las
Naciones Unidas para la Agricultura y
la Alimentación (FAO), el cual asien-
ta además que 70% de la población
total presenta sobrepeso.
Las refresqueras
en números
Esta industria genera una inversión
fija bruta a un ritmo de 600 millones
de dólares anuales, según datos de
la Asociación Nacional de Producto-
res de Refrescos y Aguas Carbonatas
(ANPRAC). Gesta 0.5% del PIB total
nacional (59 millones 443 mil pesos),
2.8% del PIB de la industria manu-
facturera y el 9.3% del PIB de la Di-
visión Alimentos, Bebidas y Tabaco.
En materia de empleo la industria
da origen a 135 mil 332 empleos di-
rectos y 693 mil empleos indirectos
en su cadena productiva.
De acuerdo con la ANPRAC el
consumo total en el país es de 16 mil
millones de litros al año, lo que re-
presenta una ganancia en impuestos
por 16 mil millones de pesos anuales.
Además utilizan materias primas
como: 1 millón de toneladas de azú-
car, 900 mil toneladas de fructosa,
450 mil toneladas de resina PET y 33
mil toneladas de aluminio.
Por lo que son generadoras de un
porcentaje de los 37 millones de to-
neladas que se generan anualmente
en México. •
Economía
Jorge Cordero
El presidente Enrique Peña Nieto busca recaudar 4 billones 479 mil
954 millones de pesos sin subir el impuesto al IVA en alimentos y me-
dicinas. El año pasado, para el ejercicio 2013, los recursos de ingresos
presupuestados ascendieron a 3 billones 956 mil 361 millones de pesos.
¿Podrá lograrlo?
Aquí los puntos más importantes de la reforma hacendaría:
1. Incremento del IVA de 11 a 16% en la frontera.
2. 8% de IVA en alimentos para perros, gatos y pequeñas especies,
utilizadas como mascotas en el hogar, ya que se trata de alimentos que
evidentemente no están destinados al consumo humano.
3. Impuesto Sobre la Renta (ISR) a 32% a ingresos mayores a 750 mil
pesos.
4. Impuesto de 7.5% con que se gravaran las ganancias de las empresas
mineras: 50% se destinará a los municipios donde se asientan las mi-
nas, 30% a los gobiernos estatales y 20% a la Federación.
5. Aplicación de un Impuesto Especial sobre Producción y Servicios
(IEPS) a bebidas azucaradas y combustibles.
6. Eliminar el Régimen de Consolidación Fiscal, mecanismo que facilita-
ba a las empresas la deducción fiscal.
7. Gravar las utilidades que se obtengan en la Bolsa de Valores con 10%
de impuesto.
8. Eliminar la deducción inmediata de impuestos de las inversiones que
realicen empresas.
9. Eliminar la posibilidad de deducir el consumo en los restaurantes,
pues actualmente personas físicas y morales pueden deducir hasta 12.5
%de su consumo.
Reforma hacendaria,
la recaudación millonaria
Todos los mexicanos tendrán que pagar 1 peso más por cada litro de refresco y
bebida azucarada como uno de los puntos principales de la reforma hacendaria “con
el fin de recaudar fondos para el gasto corriente”, menciona Gustavo de la Rosa.