El documento describe la ideología y valores del Movimiento Juvenil de Cumbres EL SADDAY. Los saddayistas adoptan un estilo de vida sustentable basado en el montañismo y la formación integral, con dos compromisos fundamentales: esparcimiento y crecimiento espiritual. Usan el montañismo para promover el desarrollo social, entendimiento cultural y conciencia ambiental.
1. Movimiento Juvenil de
cumbres EL SADDAY
Al ingresar a la agrupación, adoptas una ideología muy valiosa y rica en vivencias y
aventuras, aceptas compromisos especiales que nos hace diferentes de otras
agrupaciones montañeras
2. Esta ideología desemboca en un estilo de
vida sustentable, el que adoptas para vivir
plenamente como montañero.
3. Lo aquí expresado está contenido en la
declaración de los principios y valores
saddayistas, actualizada y aprobada el mes
de julio de 2017, por efecto del
cincuentenario de EL SADDAY
4. El Sadday fue fundado con una mística especial la que se ha
enriquecido y elevado por su aplicación durante 50 años de
montañismo y formación continua de líderes juveniles:
TODO SADDAYISTA TIENE 2 COMPROMISOS FUNDAMENTALES:
a. Esparcimiento
c. Formación integral
b. Crecimiento espiritual
2.- Usar el montañismo como medio para
promover:
1.- Usar la práctica del montañismo como
herramienta ideal de:
a.- Desarrollo social
b. Entendimiento cultural
c. Desarrollar la Conciencia medio ambiental
5. En la conquista de las cumbres, no solamente cultiva su condición física y
técnica, como lo haría un montañista. El saddayista es un montañero, ya
que además, cultiva virtudes que le llevan a crecer como ser humano.
EL MONTAÑERO:
Es aquel que busca solamente
satisfacción al lograr las cumbres.
EL MONTAÑISTA:
Hace de su vida, la montaña. Es
aquel que encuentra su gozo en el
camino hacia la cumbre y no
solamente en la conquista de ella.
Por vivir el camino hacia la cumbre, decimos que la montaña es nuestra
Maestra y a la vez nuestra aula de aprendizaje, porque de ella recibimos
enseñanzas y en ella nos forjamos.
Existe una diferencia básica entre montañero y montañista:
6. Para el saddayista, subir montañas no es un deporte
de competencia, no busca vencer a otros, por el
contrario, busca ayudar a otros a alcanzar las
cumbres.
EL SADDAYISTA NO BUSCA IMPONER MARCAS NI ROMPER RÉCORDS
ES COMO EL GUERRERO QUE EN ÉPOCAS DE PAZ, AL ENTRENAR, FIJA SUS
ENERGÍAS EN VENCER A SUS ENEMIGOS INTERNOS COMO SON:
1. LIMITACIONES
2. MEDIOCRIDAD
3. PEREZA
4. MIEDO
7. Somos un pueblo andino y por ello
herederos de culturas primigenias.
Al estar íntimamente ligado a las montañas, tenemos una conexión especial
con ellas
Por esto, también adquirimos el deber de:
1. Preservar la naturaleza
2. Rescatar la herencia cultural andina.
8. El vivir de esta manera forja un estilo de
vida y carácter especial
Al ingresar a la agrupación, se compromete a aplicar las enseñanzas impartidas
por la montaña en su vida cotidiana para:
1. El bien de la sociedad.
2. Forjar un mundo mas justo.
9. Ese estilo de vida y carácter especial del saddayista
se resume en 5 aspectos y en los valores
relacionados a cada uno de estos:
ESFUERZO
Autodisciplina
Constancia
RIESGO
Sensatez.
Coraje.
Autocontrol.
FRATERNIDAD
Honestidad.
Lealtad
Generosidad
Tolerancia
SERVICIO CUMBRE
Benevolencia
Humildad
Pasión
Responsabilidad
Respeto
10. ESFUERZO
“La alegría solo florece en el esfuerzo. El saddaista manifiesta su gozo en la dificultad vencida, en la lucha continua, en el sudor y en el cansancio. Mientras
mayor es el esfuerzo, mayor es el gozo de la cumbre. Desprecia la diversión fácil. No puede sentir alegría íntima y profunda sino en las actividades que le
han costado esfuerzo, que le han obligado a sacudir la pereza y el desaliento, en las empresas en que ha sido actor y no mero espectador”. (Fabián Zurita,
1967)
Valores relacionados:
•Autodisciplina
•Constancia
•Autodisciplina
El saddayista no se conforma, siempre busca aprender y autoeducarse. Se apasiona por sus objetivos y por ello no le resulta difícil esforzase en entrenar
por sí mismo o en grupo, para llevar a cabo una determinada tarea o para adoptar un estilo de vida.
Para ser disciplinado, toma el largo camino del trabajo constante. La montaña es un escenario muy diferente a la ciudad, allí está expuesto a los
elementos y para cuidar su integridad y la del grupo, debe observar los siguientes factores:
•Planificación: Para salir a montaña planea cada detalle con el máximo cuidado, determina un cronograma específico para cada ocasión y lo cumple a
cabalidad.
•Organización: Bautizar lugares y designarlos para cada cosa. El equipo de montaña demanda de especial cuidado y transporte. Tenerlo todo en su
lugar, ayuda a superar cualquier eventualidad.
•Puntualidad: El saddayista debe ser puntual, por su seguridad y la del grupo. De trascendental importancia en montaña, ya que al cumplir los horarios,
cuida de su integridad y la de todos. La montaña no perdona errores.
•Limpieza: En montaña no se necesita más que lo necesario. No intenta cargar más de la cuenta. Entrena para lograr ese nivel. Elimina o deja en casa
cosas innecesarias. No deja huella.
•Constancia
Al saddayista le gusta trabajar y esforzarse en conseguir nuestros objetivos sin rendirse. Libera su mente de la distracción y persigue la perfección. La
montaña es dura, pero cuando entrena en la ciudad dura y constantemente, le recibe bien y permite que la conquiste. La montaña sabe si estás o no
preparado, no es necesario demostrarlo a nadie. En la montaña, no sirven títulos, ni reconocimientos humanos, solo tu tenacidad.
“Hay dos tipos de escaladores... los escaladores
inteligentes y los escaladores muertos”
Don Whillans
“Cerca de la cima siempre hay mil excusas para
bajarse y una sola para subir.”
Ramón Portilla
11. “El camino hacia la cima es, como la marcha hacia uno
mismo, una ruta en solitario”
Alessandro Gogna
“Aprendí que el coraje no era la ausencia de miedo, sino
el triunfo sobre él. El hombre valiente no es el que no
siente miedo, sino el que lo conquista”.
Nelson Mandela
“Quien conquista a otros es fuerte; más quien se
conquista a sí mismo es poderoso.”
Lao Tse
“La vida es un riesgo continuo y solo el que acepta asumir los retos, puede triunfar. El riesgo es la única fuente de creación. Arriesgarse es
empezar a triunfar. Pero debe ser un riesgo sensato, no una temeridad vacía. Sin riesgo no pueden conquistarse las cimas, pero sin
prudencia tampoco. Un riesgo sano es el mejor antídoto contra el miedo. El saddayista no puede retirarse ante las dificultades y debe luchar
hasta el último, pero teniendo siempre como consejera a la prudencia”. (Fabián Zurita, 1967)
Valores relacionados:
•Sensatez.
•Coraje.
•Autocontrol.
Sensatez
La montaña, es el juez de tu preparación técnica, física y psicológica. El saddayista no puede culpar a los elementos ni a nadie por sus
errores. La montaña puede cobrar duramente y le enseñará a mejorar cada día. Cuando se hace responsable de sus actos, está muy cerca
de la solución de sus problemas. El saddayista es el arquitecto de su destino.
Coraje
El saddayista es valiente y arriesgado. Vive su vida con plenitud. Se diferencia del común de la gente, de aquellos que temen actuar. Para él,
ocultarse de la vida, no es vivir. Este coraje no debe ser ciego. Es inteligente y fuerte. Reemplaza el miedo por el respeto y la precaución. El
saddayista tiene que ser un audaz prudente.
Autocontrol
Para tomar las mejores decisiones antes las dificultades que presenta la montaña, debe estar tranquilo, no debe dejarse dominar por el
miedo, frio o cansancio. De esta manera procura el éxito a toda aquella empresa en la que se embarca
RIESGO
12. “Pequeños actos amables, pequeñas cortesías, pequeñas consideraciones, pequeña benevolencia,
cuando se practican habitualmente, dan mayor encanto al carácter que grandes conferencias,
oratoria, discursos y exhibición de talentos desde el estrado.”
Sivananda
“La humildad no es cobardía. Mansedumbre no es debilidad. La humildad y mansedumbre son realmente
poderes espirituales.”
Sivananda
“El lema de EL SADDAY es: ‘servir es ascender´ consecuencia lógica será el servicio a los demás como algo fundamental en nuestra agrupación.
Para el saddayista todo servicio es ascensión, mientras más sirve a los demás, más asciende, de ahí que el verdadero saddayista tiene
necesariamente que superar el egoísmo, los prejuicios sociales, el tradicionalismo, etc. Para cumplir con este principio”. (Fabián Zurita 1967)
Para el saddayista, ascensión no es solamente subir a las cumbres de las montañas, es crecer espiritualmente y como ser humano íntegro.
Valores relacionados:
•Benevolencia
•Humildad
•Benevolencia
Mediante el entrenamiento intenso, el saddayista se vuelve resistente y fuerte. No es como el resto de los hombres. Desarrolla un poder que debe
ser usado en bien de todos. Ayuda a sus compañeros en cualquier oportunidad. Es compasivo.
b. Humildad
El saddaista debe procurar poseer una fortaleza interior y un encanto penetrante y perpetuo, así consigue una personalidad sencilla. Usualmente,
personas así, no las percibimos con facilidad, pero las encontramos cuando realmente, ellos nos demuestran que son únicos, recios, sin actos
involuntarios, y de cualidades evidentes y naturales.
SERVICIO
13. “Haber hecho o dicho ‘algo´, significa que ese ‘algo¨ le
pertenece” Bushido
“La montaña es uno de los medios que más une a los hombres creando en ellos lazos de amistad, hermandad y fraternidad que
no se rompen con facilidad y que suelen durar toda la vida. La cuerda que une a dos escaladores no solo une sus cuerpos en un
esfuerzo común sino funde, sobre todo, sus almas”. (Fabián Zurita 1967)
Valores relacionados:
•Honestidad.
•Lealtad
•Generosidad
•Tolerancia
•Honestidad.
El saddayista es honrado en sus tratos con todo el mundo. Cuando un saddaista dice que hará algo, es como si ya estuviera hecho.
Nada lo detendrá en la realización de lo que ha dicho que hará. No ha de "dar su palabra", no ha de "prometer", el simple hecho de
hablar ha puesto en movimiento el acto de hacer. Hablar y hacer son la misma acción. La palabra del saddayista es sagrada. Para un
montañero no existen las tonalidades de gris en lo que se refiere a honradez y justicia. Sólo existe lo correcto y lo incorrecto. A la
montaña no puedes engañarla. Las mentiras y trampas, que te pueden servir en la ciudad, no valen nada allá arriba.
FRATERNIDAD
14. •Lealtad.
El saddayista es leal con todos quienes están bajo su cuidado. Es responsable de lo que ha dicho y de todas las consecuencias que
sigan.
Por ello es fiel al grupo, a sus principios y valores. Su lealtad se manifiesta en su admiración y respeto a sus maestros, padres y
antepasados.
No hay lealtad cuando se engaña, se miente, se dicen medias verdades, se dice lo que al jefe o líder le agrada o desea oír y si se le
esconden situaciones y hechos independientemente de las motivaciones que se tenga. El líder necesita la información verdadera
para la toma de decisiones.
La montaña no sabe de palabras, sabe de hechos. No le puedes decir nada que te favorezca. Ella conoce tu corazón.
Generosidad
El saddayista cuida de su compañero de cordada o grupo. El beneficio finalmente es para todo el grupo. La fuerza de un grupo
misma que la fuerza del más débil. Por ello, comparte con su compañero de cordada, hasta el “último caramelo que le queda,
por la mitad”. Estas experiencias, transmitidas a la ciudad, lo convierten en un mejor ser humano.
Tolerancia
El saddaiysta respeta las opiniones, ideas o actitudes de los demás aunque no coincidan con las suyas. Tiene fortaleza emocional.
saddayista no necesita demostrar su fuerza. Es cortés, incluso con sus enemigos. El saddaysta recibe respeto no solo por sus éxitos
montaña, sino también por su manera de tratar a los demás. La auténtica fuerza interior del saddayista se vuelve evidente en
de apuros.
“Si no podemos poner fin a nuestras diferencias, contribuyamos a que el
mundo sea un lugar apto para ellas”. John Fitzgerald Kennedy
“Cuando uno es generoso, con la intención de recibir algo a
cambio o de obtener una buena reputación o de ser
aceptado, entonces no está actuando como un ser
iluminado.” Dalai Lama
“Nuestras palabras son como nuestras huellas: pueden seguirnos a
donde quiera que vayamos” Bushido
15. “El alpinista es quién conduce su cuerpo allá
dónde un día sus ojos lo soñaron”
Gaston Rébuffat
“Para un saddayista las cumbres son el símbolo de superación en la vida. La cima de una montaña es siempre un desafío. El saddayista acepta este
desafío y se lanza a la lucha por vencer la cumbre. En la vida normal el saddayista acepta con igual brío el reto de cualquier empresa difícil que se le
presente, empresa que a veces será más dura que la conquista de una cumbre nevada”.
Pondrá en este combate el mismo caudal de energías que pone en la conquista de las cimas de roca o nieve. Actitud, por tanto, de conquista en la
vida”. (Fabián Zurita, 1967)
Valores relacionados:
Pasión.
Responsabilidad.
Respeto.
Pasión
El saddayista desarrolla un fuerte deseo para lograr lo que se propone, lo que lógicamente le conduce a tener éxito, no solo al alcanzar una
cumbre. Se siente motivado y entusiasmado cuando está luchando por sus sueños, por ello muchas veces es más importante el camino hacia la
cumbre, que ella misma.
Responsabilidad
Para alcanzar su cumbre, el saddayista habrá desarrollado al máximo su potencial para servir a los demás, para procurarse y procurar seguridad.
Cumplirá con sus obligaciones y aceptará completamente sus acciones, decisiones y sus consecuencias. Cuando no es posible, será consecuente
de la seguridad de los suyos y la suya propia. Renunciará a ella, sin problema alguno.
Respeto
Para tener éxito, el saddayista respeta al máximo a la montaña y ella, en retribución le permite llegar a su cumbre.
Este respeto se manifiesta en toda la preparación previa, el esfuerzo al escalar, la gratitud al alcanzar la cumbre y la humildad
al bajar. La cumbre física de una montaña es secundaria a las cumbres internas que logra.
CUMBRE
“La cima es la mitad del camino” Ed Visteurs
“La montaña no es como los humanos. La
montaña es sincera”
Walter Bonatti