1. AUTOCUIDADO DE LA MEMORIA
La memoria es la capacidad para registrar, almacenar y evocar acontecimientos del pasado o información
recientemente aprendida que por algún motivo se desea recordar.
A medida que las personas se hacen mayores
presentan más problemas de memoria que
cuando eran jóvenes. Aunque es cierto que a
medida que se envejece se produce una
pérdida de memoria, ésta no tiene porque ser
progresiva en todas las personas, ya que
muchas de ellas mantienen una buena
memoria a lo largo de toda su vida.
2. La memoria se puede entrenar y mejorar en las
personas mayores, y sus alteraciones
corresponden más a una falta de práctica o
desuso que a la edad.
Sin embargo, debemos tener en cuenta
también, que puede ser el inicio de una
demencia y hay que estar vigilantes a
esto.
Debemos tratar de mantener y
mejorar la memoria mediante
la práctica.
Las personas recuerdan porque han
realizado un esfuerzo por retener la
información que más tarde
necesitarán.
3. En el envejecimiento normal la atención es igual de
eficiente que en el adulto joven, pero el enlentecimiento
en el procesamiento de la información puede ser un
factor determinante en la alteración de los procesos de
selección se pueden exacerbar en el envejecimiento
patológico.
ENVEJECIMIENTO Y DETERIORO COGNITIVO
El deterioro de la percepción y la atención en el
proceso demencial se inicia en el momento en
que la persona comienza a perder su capacidad
para recordar, ya que se le pierde el estímulo con
el que debería comparar lo que percibe. En
consecuencia, la persona empieza a tener
dificultades para interpretar correctamente y
reconocer adecuadamente las situaciones.
4. MEMORIA EN EL ENVEJECIMIENTO:
PATOLÓGICO
NORMAL
En el envejecimiento normal se conserva la
capacidad de comprender y seguir instrucciones,
seguir tramas en un programa de televisión o en
un libro, hacer cálculos (con lentitud), olvidos
benignos de tipo atencional (citas, actividades o
extravío de objetos) o solo de detalles de eventos.
Se benefician de recordatorios o ayudas externos.
En el envejecimiento patológico se olvidan
progresivamente citas y/o eventos, palabras o
nombres, operaciones de cálculo, instrucciones
complejas, tramas de programas de televisión o
de libros, actividades de autocuidado, y hay un
extravío frecuente de objetos. Pobre o nulo
beneficio de recordatorios o ayudas externas.
5. Diferencias entre el envejecimiento normal y la
enfermedad de Alzheimer
Envejecimiento normal Enfermedad de Alzheimer
Tomar una mala decisión de vez en
cuando
Hacer juicios equivocados o tomar
malas decisiones la mayor parte del
tiempo
Olvidarse de hacer un pago mensual Tener problemas para pagar las
facturas mensuales
No recordar qué día es y acordarse
más tarde
Perder la pista de la fecha o la época
del año
A veces no saber qué palabra usar Tener dificultad para mantener una
conversación
Perder cosas de vez en cuando Perder cosas a menudo y no poder
encontrarlas
6. Si se presta atención se podrá:
Recordar dónde pone los objetos como las llaves, el
monedero, anteojos, etc.
Recordar qué ha ido a buscar a una habitación.
Recordar si tomó o no la medicina.
Recordar si se ha apagado el gas, la luz o cerrado la
puerta con llave.
Recordar dónde puso el dinero o el objeto que guardó
en un lugar seguro.
Atención y concentración
7. En la vejez podemos:
Ser independientes.
Aprender nuevas cosas.
Ser activos.
Tomar nuestras propias decisiones
Seguir manteniendo nuestros intereses.
Consejos para cuidar la memoria
1. Leer y escribir
2. Desarrollar crucigramas, jugar cartas,
ajedrez, dominó.
3. Coleccionar recetas de cocina, estampillas,
monedas, cuidar nuestro propio jardín o
plantitas en macetas.
4. Salir al cine o al teatro.
+ Escuchar música y sobre todo cantar, ayudará
a ejercitar su memoria.
+ Realizar trabajos manuales creativos como
tejer, bordar, pintar.
+ Hacer viajes, ir de compras.
+ Participar como voluntarios -en alguna
organización O asociación.
8. Fomentar la autonomía de la persona adulta mayor. No realizar por él, aquello que él
mismo puede hacer.
Se le puede prestar ayuda, pero sólo la necesaria.
Anímelo a que realice todo lo que pueda por sí mismo.
Ayúdelo a encontrar ejercicios y actividades que mantengan activa su mente.
Que lea y si no puede hacerlo, que los familiares le lean algo de su agrado.
Converse con las personas mayores de problemas diversos como por ej.: la película de
ayer, quién ganó un partido de fútbol, comenten una llamada telefónica, etc.
Premie su esfuerzo por recordar. No importa cómo lo haga. sino que lo intente.
Orientación a los familiares