2. Primeros Años
Fernando nació en Envigado,una
ciudad localizada al suroriente del Valle
de Aburra.Hijo de Daniel González y
Pastora Ochoa. Fue el segundo de siete
hermanos. En su niñez fue enviado a
estudiar en el colegio de las Hermanas
de la presentación de donde fue
expulsado.Lo mismo sucedería cuando
los jesuitas del colegio San Ignacio de
Medellín lo expulsaron en su quinto
año de bachillerato porleer a Nietzsche
y a otros autores prohibidos ypor
cuestionarante el padre Quirós.Fue
entonces acusado de escepticismo
religioso,aunque sus tratadosde
teología han sido consideradosde un
enorme valor dentro de ese campo
3. Ingresos en círculos intelectuales
En 1915 sevincula a Los Panidas, una agrupación de
jóvenes rebeldes entre los que se cuentan otros
futuros notables personajes como el poeta León de
Greiff y el caricaturista Ricardo Rendón. Alaño
siguiente publica su primer libro, Pensamientosde
un viejo, prolongado por el legendario periodista
Fidel Cano.
En 1919 obtiene su título de abogado de la
Universidad de Antioquia. Su trabajo de grado, un
estudio de sociología titulado El derecho a no
obedecer, no fue bien recibido por las directivas de
la institución, González, presionado por las
circunstancias, hacealgunas modificaciones y lo
publica bajo el título Una Tesis.
Carrera Profesional
En 1921 es nombrado magistrado del Tribunal Superior de Manizales,
ciudad a donde se traslada. Al año siguiente e casa en Medellín con
Margarita Restrepo Gaviria, hija del expresidente de la Republica Carlos
Restrepo. Tiene luego cinco hijos.
En 1928 es nombrado Juez Segundo Civil del circuito de Medellín. Allí
conoce a su secretario, Benjamín Correa, con quien entabla una
entrañable amistad. En compañía suya recorrecaminando varios
pueblos de Antioquia, Caldas y Valle, experiencia de la que surgeuno
de sus libros más populares, Viajea pie, publicado en 1929, esemismo
año el libro es prohibido bajo pecado mortal por el arzobispo de
Medellín, Manuel José Caicedo:
El libro del doctor Fernando González, “Viaje a
pie”, está vetado por derecho natural y
eclesiástico, y por tanto su lectura es prohibida
bajo pecado mortal. El presente Decreto será
leído en todas las iglesias y capillas de la ciudad
arzobispal y publicado por la prensa para
conocimiento de los fieles. Dado en Medellín, a
30 de diciembre de 1929