2. Se denominan cuidadores informales a las personas que realizan la
tarea de cuidado de personas que han perdido su autonomía de
manera temporal o permanente. Suelen ser mujeres de entre 45-52
años, bajos estudios, amas de casa, hija o esposa de la persona
cuidada.
Hay un continuo envejecimiento de la población y creciente
importancia de las enfermedades crónicas e invalidantes.
La mayoría de los cuidados a las personas dependientes se llevan a
caso en el seno familiar y en menor medida en hospitales,
residencias geriátricas, centros de día, etc.
Sin su labor el sistema sanitario no sería sostenible, por eso es tan
importante educar al cuidador informal en los cuidados de la
persona dependiente antes del alta.
3. El paciente dependiente requerirá cuidados tras su estancia
hospitalaria. Estos cuidados serán impartidos fundamentalmente
en su domicilio, por tanto su familia, deberá adquirir los
conocimientos y habilidades necesarios para poder proporcionarle
estos cuidados.
Por ello, es fundamental que resuelvan sus dudas, para poder
ofrecer cuidados de mayor calidad, sepan cuáles son los síntomas y
signos de la patología del paciente, así como exacerbaciones de la
misma, conozcan los dispositivos o medios de apoyo instrumentales
necesarios para el paciente.
4. El equipo de salud es definido por la OMS, en 1973, como una
asociación no jerarquizada de personas, con diferentes disciplinas
profesionales, pero con un objetivo común que es el de proveer en
cualquier ámbito a los pacientes y familias la atención más integral de
salud posible.
El trabajo del equipo Interdisciplinar y Multidisciplinar en el cuidado
del anciano enfermo y su cuidador durante la hospitalización (Gestión
de Casos) es imprescindible para poder proporcionar un cuidado
continuo, integral y holístico al anciano, siendo la mejor manera para
dar calidad de vida al problema de salud. El equipo tiene que estar
coordinado, para poder ofrecer un mayor rendimiento y calidad.