En 1883, Joseph Pulitzer compró el periódico New York World y adoptó un estilo populista de periodismo que se enfocaba en problemas sociales de una manera combativa y sensacionalista para atraer al público común, con muchas ilustraciones y promociones. Este nuevo estilo amarillista tuvo éxito y fue copiado por otros periódicos, estableciéndose como una tendencia pero también degradando el periodismo.