Los agentes químicos pueden absorberse a través de las vías respiratoria, cutánea o digestiva y distribuirse por el organismo, donde pueden ser metabolizados o eliminados. La exposición a largo plazo a bajos niveles de agentes químicos puede dar lugar a intoxicación crónica, mientras que la exposición aguda a altos niveles puede causar intoxicación aguda. Los efectos de los agentes químicos dependen de la dosis, la duración y la frecuencia de la exposición.
2. AGENTES QUÍMICOS
Los contaminantes químicos son compuestos inertes que pueden
presentarse en forma sólida, líquida o gaseosa, y cuya acción sobre el
organismo humano resulta dañina. La acción del organismo sobre el
contaminante se produce en su posible absorción, distribución,
metabolización y eliminación (ADME).
Absorción
Los contaminantes químicos pueden penetrar en el organismo por tres vías:
respiratoria o inhalatoria, cutánea o dérmica, y digestiva. La absorción vía
digestiva es menos importante, pero hay que tenerla en cuenta cuando se
está expuesto a determinados tipos de polvo tóxico y no se mantiene una
buena higiene, o cuando se come, bebe o fuma en el puesto de trabajo.
El sistema respiratorio está especialmente diseñado para que la materia
particulada no llegue a los pulmones. Sin embargo, las partículas con
diámetro aerodinámico inferior a 5 micrómetros (1 μm: una milésima de
milímetro) pasan a la región alveolar, pudiendo ser allí absorbidas.
La piel no es muy permeable, sin embargo algunos contaminantes químicos
pueden ser absorbidos por ésta en cantidad suficiente para producir efectos
en otros órganos del cuerpo.
3. Distribución
Una vez que la absorción ha tenido lugar, la sangre distribuye el contaminante
químico por el organismo; primeramente a los tejidos con flujo sanguíneo elevado
(pulmón, riñón, cerebro, hígado), luego a los músculos, y más lentamente al tejido
adiposo y óseo.
Los contaminantes químicos se clasifican en:
Acumulativos: despreciable o nula eliminación (pesticidas en el tejido adiposo o
sílice en los pulmones).
No acumulativos: velocidad de eliminación alta (algunos disolventes se eliminan
totalmente del organismo a las pocas horas de haber cesado la exposición).
Parcialmente acumulativos: se eliminan lentamente (algunos metales).
Metabolización
La mayoría de los contaminantes químicos al penetrar en el organismo sufren
cambios en su estructura molecular. Estas biotransformaciones son debidas a una
serie de reacciones químicas que dan lugar a la formación de los metabolitos. Como
consecuencia de esta biotransformación el metabolito resultante puede ser:
Inactivo: el metabolito no es tóxico.
Presentar igual toxicidad que el contaminante químico.
Activación: el metabolito se hace tóxico.
4. Eliminación
Los contaminantes químicos o sus metabolitos pueden ser eliminados por
vía:
Renal (la mayoría de los compuestos se eliminan en mayormente por la
orina).
Respiratoria: exhalación, expectoración (los productos volátiles en gran
parte).
Digestiva.
Secreción glandular: sudor, saliva, leche materna.
Dosis o concentración letal, dosis o concentración tóxica
Se llama dosis letal 50, DL50, cuando se refiere a la dosis, expresada en
mg/kg de peso de un cobaya, que administrada de una vez por vía oral a un
grupo determinado de animales produce la muerte del 50% de los mismos.
Si la administración es vía inhalatoria se habla de concentración letal 50,
CL50. En base a los valores de las DL50 y las CL50 se pueden clasificar los
tóxicos en muy tóxicos, tóxicos y nocivos. Cuando lo que se estudia no es la
muerte sino otro efecto tóxico con una magnitud determinada, hablaremos
de dosis tóxica, por ej., dosis tóxica 50, DT50.
5. Efectos de los contaminantes químicos sobre el organismo
El efecto producido como consecuencia de la exposición a un contaminante químico
no sólo depende de la cantidad absorbida sino también de la intensidad y duración de
la exposición. Se conocen dos tipos principales de intoxicación: aguda y crónica.
Intoxicación aguda es la que da lugar a una alteración grave y se manifiesta en un
corto periodo de tiempo.
Intoxicación crónica: cuando el contaminante químico se absorbe en pequeñas
cantidades durante un período largo de tiempo de la vida del trabajador.
Efectos de los contaminantes químicos sobre el organismo
Puede ser crónico o agudo según la cantidad absorbida y la duración de la exposición.
Intoxicación aguda es la que da lugar a una alteración grave y se manifiesta en un
corto periodo de tiempo.
Intoxicación crónica: cuando el contaminante químico se absorbe en pequeñas
cantidades durante un período largo de tiempo de la vida del trabajador.
Si se acumula el contaminante químico (la absorción es mayor que
biotransformación y/o excreción) y alcanza una concentración suficiente para
que se manifiesten los efectos.
Si se producen efectos tóxicos irreversibles, que son aquellos que no permiten
la recuperación del estado normal.
Si no hay tiempo suficiente para reparar el daño en los intervalos de
exposición. Se acumulan los efectos producidos por la exposición repetida al
tóxico, el cual sin embargo se va eliminando del organismo.
6. Clasificación de productos químicos peligrosos para la salud:
El Reglamento sobre clasificación, envasado y etiquetado de preparados peligrosos, de 2003, establece
la siguiente clasificación:
Muy tóxicos: las sustancias y preparados que, por inhalación, ingestión o penetración cutánea en
muy pequeña cantidad puedan provocar efectos agudos o crónicos e incluso la muerte.
Tóxicos: las sustancias y preparados que, por inhalación, ingestión o penetración cutánea en
pequeñas cantidades puedan provocar efectos agudos o crónicos e incluso la muerte.
Nocivos: las sustancias y preparados que, por inhalación, ingestión o penetración cutánea puedan
provocar efectos agudos o crónicos e incluso la muerte.
Corrosivos: las sustancias y preparados que, en contacto con tejidos vivos puedan ejercer una
acción destructiva de los mismos.
Irritantes: las sustancias y preparados no corrosivos que, en contacto breve, prolongado o
repetido con la piel o las mucosas puedan provocar una reacción inflamatoria.
Sensibilizantes: las sustancias y preparados que, por inhalación o penetración cutánea, puedan
ocasionar una reacción de hipersensibilidad, de forma que una exposición posterior a esa
sustancia o preparado dé lugar a efectos negativos característicos.
Carcinogénicos: las sustancias y preparados que, por inhalación, ingestión o penetración cutánea
puedan producir cáncer o aumentar su frecuencia.
Mutagénicos: las sustancias y preparados que, por inhalación, ingestión o penetración cutánea,
puedan producir alteraciones genéticas hereditarias o aumentar su frecuencia.
Tóxicos para la reproducción: las sustancias y preparados que, por inhalación, ingestión o
penetración cutánea, puedan producir efectos negativos no hereditarios en la descendencia, o
aumentar la frecuencia de éstos, o afectar de forma negativa a la función reproductora.