1. CEREBELO
Funcionalmente, al cerebelo lo podemos dividir en tres partes:
ARQUICEREBELO.
Es el cerebro primitivo, cuya función es la regulación del tono y coordinación muscular
relacionada al equilibrio. Corresponde al lóbulo floculonodular y a los núcleos del
fastigio. Conexiones principales se realizan con los núcleos vestibulares y reticulares
del tronco del encéfalo y se relaciona con el mantenimiento del equilibrio.
PALEOCEREBELO.
Regulación del tono y coordinación muscular, pero en relación a la postura corporal.
Sus axones aferentes provienen principalmente de la médula espinal (tractos
espinocerebelosos anterior y posterior) y del tronco encefálico. Ejemplo en la
mantención de la postura de las extremidades.
NEOCEREBELO.
Control automático de la motilidad voluntaria e involuntaria. Regulación del tono y la
coordinación muscular en relación a los movimientos voluntarios e involuntarios.
Sus axones aferentes provienen de áreas motoras de la corteza cerebral (tracto
corticopontino).
Corresponde a la mayor parte del hemisferio cerebeloso y a los núcleos dentados.
Recibe aferentes del puente y se proyecta hacia el núcleo ventral lateral del tálamo.